Capítulo 1: ¿Es esto real? O es mi mente

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Katsuki Bakugou, era muchas cosas: descarado, abusivo, orgulloso, ruidoso, enojón, etc... Sin embargo, lamentable no era uno de ellos... o eso había pensado.

Se sentó en clase escuchando al idiota profesor hablar sobre algo que ya sabía. Su codo estaba apoyado en el escritorio, su cabeza en su mano, su cuerpo inclinado hacia los lados en su asiento. Katsuki echó una mirada furtiva hacia Deku, quien parecía tan cansado y patético como siempre. Su atención volvió a la maestro mientras les asignaba tareas. Una vez que sonó la campana, señalando el final del día escolar, Deku salió corriendo de la habitación lo más rápido que pudo. Como siempre.

Katsuki contempló sus opciones y decidió que hoy no iría tras el nerd de mierda. Se tomó su tiempo para caminar a casa, esos dos extras siguiéndolo como si pudieran volverse más increíbles simplemente disfrutando de su presencia. Katsuki se burló y se alejó más rápido.

-¡Oye, hombre! ¡Espera!-*dijo unos de los extras del salón*.

-¡Sí, Katsuki! ¡Por qué no vienes a la sala de juegos hoy con nosotros! ¡Podríamos recoger a algunas de esas chicas desesperadas!-*exigió el segundo extra*.

*Katsuki se detuvo y se dio la vuelta para enfrentarlos* -¡Diablos, no! ¡Estoy ocupado, extras, dejen de seguirme!-

*Ambos levantaron sus manos en señal de rendición* -¡Está bien, hombre! Dios...-

El rubio enojado se fue corriendo hacia su casa una vez más, esta vez sin ser seguido. Una vez que llegó a casa, abrió y cerró la puerta de golpe, y se dirigió a su habitación. Mientras subía las escaleras, su madre salió de su habitación y gritó: -¡¿QUÉ DIJIMOS ACERCA DE ASOTAR LA PUERTA KATSUKI?!-

-¡JODER, HAG!-*gritó él y mejor decidió aguantar gritar su mierda en ese momento, y procedió a cerrar la puerta de su habitación, solo para fastidiarla. Katsuki dejó su mochila y prácticamente se arrojó sobre la silla de su escritorio y suspiró. Después de un rato, dejó su tarea en su escritorio y se puso a trabajar. Pasó una hora antes de que se levantara de su silla y se retirara a la sala de estar de la planta baja.

-¡VIEJA BRUJA! ¿QUÉ HAY PARA LA CENA?" gritó, pero no hubo respuesta. Se levantó del sofá, preocupado y confundido. Él a alta velocidad entró en la cocina y vio a su madre sentada en el suelo, como si se hubiera deslizado hacia abajo aturdida, sosteniendo su teléfono en su oído. Su expresión era de lamentable horror, cuando sus ojos se encontraron con los de él.

*Ella suspiró con un estremecimiento*-Está muerto, Katsuki-*

-¿QUE?-*preguntó, el pánico se epodedo de el, subiendo por su pecho más rápido de lo que podía empujarlo hacia abajo. ¿Se refería al anciano? ¿Quién más garantizaría esta reacción?*

-F-Fue Izu-kun, él se suicidó y fu-fué encontrado-* la vieja bruja rompió en sollozos, haciéndose eco con los sollozos que venían del teléfono*.

Katsuki se quedó allí paralizado por la conmoción, incapaz de procesar lo que acababa de escuchar. Su mandíbula estaba abierta y sus manos empezaron a temblar, -Qué carajo...-*dijo con una voz tranquila que comenzó a temblar al final*

El resto de su velada la pasó en el sofá sin responder, ya que no estaba seguro de cómo reaccionar ante la noticia, y mucho menos del gran papel que debió haber desempeñado en ella. No, esos pensamientos surgirían mañana. Así como durante las semanas siguientes. Pero no pasado mañana, ya que él lo aceptaría para entonces.

Katsuki se despertó tres minutos antes de su alarma, como de costumbre. No sabía cómo sentirse acerca de los eventos del día anterior. Era un día normal, entonces, ¿qué pudo haber llevado a Deku a suicidarse? Se quedó allí, contemplando todo y nada al mismo tiempo, durante lo que le parecieron horas.

El rubio se obligó a levantarse de la cama una vez que sonó la alarma y, aturdido, siguió su rutina matutina. Cuando finalmente miró su teléfono, se quedó allí en estado de shock durante varios. ¿La fecha fue ayer?

Nadie que él conociera sería tan cruel, tacha eso, nadie que tuviera acceso a su teléfono durante la noche sería tan cruel, por lo que no podría ser una broma. No sabía qué demonios se suponía que debía hacer con esto. Si se trataba de una broma elaborada, fingiría que nada era extraño, esperaría a que cayera el alfiler y luego se volvería loco. Si fuera otra cosa ...

Bien...

Esperaba que no fuera así.

Bakugou pasó su día de manera diferente a ayer. El hecho de que estuviera jugando a largo plazo para vengarse no significa que estuviera dispuesto a aceptar la monotonía de repetir un día. Terminó saliendo más tarde que el día anterior y vio a Deku camino a la escuela. Por una vez, la rubia explosiva se abstuvo de, bueno, hacer estallar al adolescente sin peculiaridades, los eventos de ayer no estaban frescos en su mente.

El día aburrido continuó, Deku estaba inusualmente ausente mentalmente. Si Bakugou no hubiera tenido ese... ese sueño anoche, no habría notado nada diferente. Pero no hubo murmullos, ni cuadernos de héroes, ni luz en sus ojos: estaban aburridos y cansados. En el almuerzo, Deku no estaba en la cafetería (aunque eso era normal, comía afuera), pero cuando la clase comenzó de nuevo, su escritorio estaba vacío. Bakugou se puso inmediatamente nervioso, pero el profesor lo ignoró, así que lo descartó y trató de desconectar al profesor tonto.

No vio al maldito nerd durante el resto del día, y estaba teniendo dificultades para reprimir los nervios y las inquietudes.

Si era él quien se preocupaba por nada, ese maldito nerd pagaría. Y si fuera por las bromas de la gente, ¡los patearía al infierno!

Resultó que no fue en vano. Bakugou había vuelto a abrir y cerrar de golpe la puerta principal, esperando una desagradable reprimenda de la vieja bruja.

En cambio, todo lo que obtuvo fue un lastimoso, "¡K-katsuki!" de su madre que estaba sentada en el sofá. La noticia informaba sobre un adolescente familiar encontrado atropellado por un automóvil a media ciudad de distancia.

¡Eso es absurdo! Se necesita toda la tarde para caminar...!

que...

lejos...

Pero no había visto a Deku desde antes del almuerzo, ¿verdad?

Bakugou gritó de frustración y cayó de rodillas. La vieja bruja se apresuró a abrazarlo y se quedaron allí hasta que su padre llegó a casa. Su mente se derrumba bajo la presión de... De lo que sea el infierno que era.

¿Qué clase de maldita pesadilla era esta?

SuicideDekuWo Geschichten leben. Entdecke jetzt