SuicideDeku

Capítulo 35: Tu voz podría salvarme

Mejor tarde que nunca xd

Cuando Midoriya finalmente se separó de ellos, Bakugou no pudo evitar sentirse incómodo (como si ya no estuviera constantemente incómodo y ansioso con estos malditos bucles). No era una buena idea dejarlo ir solo, especialmente porque no podían estar seguros de que lo que se suponía que debía hacer fuera productivo a largo plazo.

O tal vez solo estaba paranoico y exagerando. Pero en su defensa, después de todo lo que había visto en estos bucles, se le permitió sentirse así.

Probablemente.

Miró a Aizawa e hizo una mueca cuando se encontró con una mirada perturbada en lugar de una tranquilizadora. Eso era nuevo, es decir, la falta de seguridad y esperanza del héroe, y la rubia no era muy fan de eso.

Su aprensión solo creció cuando se detuvo a considerar las ramificaciones de enfrentarse de nuevo al bastardo de Takaki. Solo dos interacciones con el hombre le habían debilitado las rodillas y el temor se acumulaba en sus entrañas. Era patético, de verdad, pero en este punto, ¿qué opción tenía? Se suponía que debía enfrentar al tipo que (supuestamente) tenía control sobre su situación y posiblemente podría cancelarla en cualquier momento.

Y eso significaba que siempre existía la posibilidad de que los bucles se detuvieran y el tiempo pasara mientras DM-Midoriya estaba muerto y desaparecido o si el mismo Bakugou hacía algo lamentable. Lo cual, había jodido demasiadas veces como para poder confiar en que cada vez que terminaran los bucles todo terminaría bien.

Bakugou fue sacado de sus pensamientos por el repentino peso sobre su hombro. Levantó la cabeza y escuchó su nombre pronunciado con preocupada urgencia.

-¿Q-qué?-*espetó*.

*Aizawa suspiró*-No te alteres, chico. Solo respira-.

Fue solo con esas palabras que se dio cuenta de lo apretado que sentía su pecho y el mareo que comenzaba a sentir. Ah, cierto... respirar es algo importante.

-C-bien...-*resolló Bakugou, dejando que su mirada volviera al suelo*.

De repente se alegró de que Midoriya no estuviera aquí para presenciar este momento de debilidad, pero eso solo trajo el pensamiento de lo que estaban planeando hacer de nuevo al frente de su mente. El rubio deseó no poder alterarse por eso, pero el sentimiento subyacente de pánico pareció asentarse profundamente en sus entrañas, incluso cuando se encontró igualando la respiración exagerada de Aizawa.

Para cuando se calmó por completo (con la ayuda de cierto héroe), había pasado una buena cantidad de tiempo. La frustración brotó dentro de él mientras intentaba y no lograba alejar sus emociones para concentrarse en la tarea que tenía entre manos.

-Creo-*interrumpió Aizawa justo antes de que Bakugou pudiera entrar en una tercera espiral mental*-que deberíamos volver a rastrear algunas de nuestras acciones o pasos por nuestra cuenta, ya que la idea de Midoriya fue brillante y no pudimos tomarla...*hizo una pausa *-todo... en cuenta mientras estuvo allí-.

El adolescente se quedó mirándolo medio incrédulo y medio serio, como si no supiera si sentirse insultado o aliviado de que el hombre lo estuviera cuidando al retrasar algo por lo que estaba visiblemente asustado.

-Mataría el tiempo, ya que no estamos seguros de si Takaki estará en casa a esta hora del día, y-.

-Y me daría tiempo para superarme-*siseó Bakugou*-Sí, lo sé-.