11. INVITACION IMPERIAL

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Pregunto el señor que anteriormente me había informado que padre me necesitaba, así es, su mayordomo. Al notar de quien se trataba retome mi postura y me senté nuevamente de la forma correcta

—Claro pase— Cedi con una leve sonrisa

—Parece que está aburrida, ¿acaba de terminar de leer una novela?

—sí, pero para ser sincera tengo un poco de sueño

—ya veo, es la novela de "La mucama y el duque I", saldrá la parte dos"

— ¿Saldrá otra parte?— mis ojos se abrieron con sorpresa, pensé que ese había sido el fin y estaba un poco decepcionada pues faltaban cosas por resolver, me alegraba escuchar que había otra parte, mis ojos se iluminaron y no pude evitar sonreír llena de esperanzas

—sí, mi hija también lo lee y se la pasa hablando de la novela, ¿quiere leer la segunda parte?

—Si, por favor— asentí y contesté inmediatamente sin pensarlo, creo que tengo un problema con las novelas y mangas, para empezar estaba en una novela y no podía evitar leer otra

—oh, yo no la tengo, como mencioné apenas saldrá la otra parte, pero es muy popular y fácil de conseguir, no se desanime

—oh, lo siento, entonces estaré pendiente de su estreno, con su permiso me retiro para ir a mis clases de etiqueta

—Pase, estaré un rato aquí leyendo un poco, espero que no le moleste mi presencia

—Para nada, con permiso— respondí con una gran sonrisa mientras me retiraba a mis clases.

El cuerpo de Luna reaccionaba naturalmente a la etiqueta, realmente era muy buena en esto, no sé cómo pudo haber cometido una equivocación en la novela, ya que en ella se relata que en una invitación a un banquete de la familia imperial se mostró sin etiqueta, no recuerdo muy bien que hizo pero había causado problemas a la casa Soleil.

La maestra de etiqueta es la hija de un pequeño vizconde sin embargo era amable con Luna, creo que era ya que habían convido mucho juntas.

—No entiendo por qué me piden que siga enseñándole etiqueta cuando lo domina perfectamente— Dijo con una expresión de abatida aquella maestra

—Desconozco la razón, y disculpe que tenga que malgastar su tiempo en mí, si gusta puede faltar a las clases, le diré a padre que no lo hace, tal vez le beneficie más— dije con algo de culpa

—oh, querida, no te preocupes, lo digo porque ya lo has aprendido todo desde hace casi un año, ya hablé con tu padre pero aún quiere que las tome

Un año, ¿casi un año? ¿Por qué hacer algo tan exagerado? tal vez debería hablar con el duque...quizá pueda usar estás horas para aprender alguna otra cosa, como por ejemplo manejar el mana de Luna, si es que queda algo de eso en este cuerpo.

En la casa Glace se había mandado a llamar a los tres hijos del duque con una interesante noticia relacionada a la casa Soleil

—Kiel, padre nos habla— Kemp. El hermano mayor de aquel rubio distante estaba notificándolo de aquello

—Voy, aún estoy ocupado sobre aquel tema— respondió sin prestar mucha atención a su contrario

—es sobre la casa Soleil

—...voy en un momento— dejo de un lado lo que hacía y se dirigió a donde era llamado

En la oficina del duque se encontraban los 3 hijos del duque Karl, el primer hijo Kemp Glace, el segundo hijo Kiel Glace y el tercer hijo Kohl Glace, el duque y la Duquesa Rouse Glace.

Reencarne en la villana de mi novela FavoritaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora