¡M#%&d@! Enamórate de mí

Capítulo 37

Capítulo 37

[Nat]

— ¿Recuerdas que te dije que esto no tendría futuro? — Le pregunté, Firstfh no responde, solo me mira con sus ojos temerosos. — No podemos seguir con esto, yo acabo de empezar una relación.
—¡¿Qué?! ¡Tú relación es conmigo!
—Jamás te dije que teníamos ni que tendríamos una relación.
—¿Entonces que teníamos?
—Sexo — Firstfh quedó impactado, podría jurar que comenzará a llorar en cualquier momento.
—Mientes. — Su voz se quebró.
—Firstfh, por favor.
—Estás mintiendo, yo sé que me amas — desesperadamente tomó mi rostro con ambas manos acercándose a mí con la intención de besarme pero moví mi cabeza. — ¡Tú me amas! ¿Por qué mientes?
—Jamás te dije que te amo. — Las lágrimas de Firstfh comenzaron a correr por sus mejillas, solo mirándome.
—Mientes, yo sé que mientes.
—Firstfh, por favor. No lo hagas más difícil.
—¿Difícil? Porque me amas, ¿cierto?
—Porque no quiero lastimarte.
—No te creo, yo no te creo. — Se puso de pie, yo solo lo observó, sin moverme del sofá. — Y esto no termino porque sé que me amas. — Acaba de sentarse en mis piernas frente a mí, tomándome del rostro, sus labios rozando los míos intentando besarme pero yo no correspondo a sus acciones. Firstfh se abraza a mis hombros, sus labios siguen pegados a los míos, sus lágrimas corren por sus mejillas, algunas llegan a mis labios. Me abraza con más fuerza, queriendo besarme pero yo no muevo mis labios. Solo puedo dejar que se desahogué.

[Earth]

Cuando llegamos a la casa de Mix, estacione el auto frente a ella.
—Te veo mañana
—No te vayas todavía. Quédate. — Sonreí por las caras tan tiernas que hace y cómo sus manos se aferran a mi muñeca. 
—Esta bien. — Sonreí apagando el motor, en realidad quería ir a ver a Cookie y platicarles sobre Win y Bright pero… no puedo negarme a Mix. Ambos bajamos del auto, entramos a su casa, está su mamá y su hermana en la sala. — Buenas tardes — salude a ambas, su hermana me sonríe pero su mamá parece no quererme aún.
—Earth dijo que va a hacer la cena para nosotros — comento Mix con tremenda sonrisa, yo volteo a verlo sorprendido porque yo nunca dije eso.
—¿De verdad? — su mamá se levantó del sofá caminando hacia nosotros. — ¿Qué vas a cocinar?
—yo voy a cambiarme — dijo Mix al notar que me quedé sin palabras. — Mamá le ayudas con los ingredientes, por favor — Mix sabe cómo convencerla, abraza a su mamá dándole besos en la mejilla. — No me tardó. — Y así se fue, dejándome con su mamá, me da algo de miedo, la verdad.

Su mamá me preguntó que es lo que sé cocinar, le platique lo que hago en el restaurante de Cookie, ella me ayudó entregándome los ingredientes, por supuesto no la deje hacer nada, solo observar hasta que regreso Mix, se cambió de ropa, está usando una sudadera gris y unos shorts pequeños, tuve que desviar rápido la mirada antes de que su mamá me descubriera mirándolo, y es que sus piernas se ven tan… tan… ¿cómo decirlo? Como si fuera de peluche y quisieras apretar.
—yo le ayudaré, mamá
—esta bien, estaré en la sala — esa fue una advertencia para mí. Su mamá nos dejó solos en la cocina, aunque desde la sala puede vigilarnos. Mi mirada se dirigió de nuevo a sus piernas.
—¿Qué? — me preguntó Mix al descubrir dónde estoy mirando, solo negué pero él sonrió. — No me digas que… — se acercó demasiado a mí, lo aparte enseguida.
—mantén tu distancia — se atacó de risa. Para que dejará de reírse le dije que me ayudará a preparar la comida, en algún momento comenzamos a discutir porque la carne parecía que se estaba quemando. — Se está quemando — le advertí al ver la carne en el sartén.
—no se está quemando. — Mix me aseguro, no estoy muy convencido así que seguí insistiendo.

[First-fh]

—Firstfh — sigo aferrado al profesor Nat, no quiere besarme, no quiere abrazarme, por más que intento que sus labios devoren mis labios como suele hacerlo no lo hace. No me besa. — Por favor, tengo que irme — me abrace más a sus hombros, pegando mi cuerpo al suyo, quedando su brazo atrapado entre nuestros torsos.
—No me dejes, te lo suplico… no me dejes — estoy pidiendo aferrado a él, llorando sin poder evitarlo.
—Entiende, estoy saliendo con alguien más.
—puedo ser lo que tú quieras que sea — lo tome del rostro con ambas manos, mirándolo a los ojos. — Solo no me dejes.
—Firstfh, por favor, no te humilles. — No dije nada, el profesor Nat acomodo mi cabello, acariciándolo. — Yo sé que te duele, que te dolerá unos días, quizás semanas pero me olvidarás y llegará a tu vida alguien mejor. No soy una buena persona, Firstfh.
—sí lo eres.
—No lo soy. Eres muy joven, te falta mucho por vivir, encontrarás a alguien mejor, que te ame, alguien de tu edad para vivir momentos que corresponden a tu edad. Simplemente y sencillamente que te ame.
—Yo te quiero a ti — aseguré tomándolo del rostro.
—pero yo a ti no. — Mi pecho dolió, es como si mi corazón se detuviera. —  De verdad no quiero herirte. — Me quitó de encima de él, dejándome sentado en el sofá. — Por favor, vete. — Negué como niño pequeño llorando, es que mis lágrimas no paran de salir.
—Bien. Entonces yo me voy. Fue un placer haberte conocido, te deseo que seas feliz. Adiós Firstfh. — El profesor Nat se alejo de mí, se dirigió a la puerta, justo ahí reaccione, me puse de pie pero fue demasiado tarde, el profesor se fue, cerro su puerta dejándome solo en su departamento. No pude evitar llorar aún más.