Capítulo 7

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Hace mucho tiempo en un reino no muy lejano.

Vivía un poderoso rey con un gran territorio, era muy conocido por poseer grandes lujos. Tanto por lo material como las hermosas concubinas que tenía, y sus maravillosos hijos que tenía, cada uno tenia una habilidad diferente.

Uno era listo, otro fuerte, encantador y por último un celoso.

—Hermano, ¿me gustará la historia?

—Solo espera y veras.

Lamentablemente el reino no era el más amado por todos, el rey era un gran tirano robaba a sus súbditos hasta dejarles sin nada de comer; a sus esposas las maltrataba sin piedad y a sus hijos los golpeaba sin remordimiento, él quería un reino poderoso y perfecto.

Un día el rey proclamó a uno de sus hijos en un gran baile quien sería el nuevo gobernante.

— Yo el rey, el ser más poderoso de este reino te proclamó a ti entre todos mis hijos la gran virtud de ser el príncipe heredero.

Se escucharon aplausos de la multitud.

El principe heredero estaba feliz por tener esa gran responsabilidad.

— Te prometo padre que no te defraudaré.

Todo el público aplaudía al príncipe con una gran sonrisa excepto un hermano escondido entre las sombras lleno de celos y rabia pensó.

—¡Eso deberia ser mío, no de él!, porque él siempre lo tiene todo.

Salio del gran salón, alejándose de sus hermanos y su padre.

— Yo debí ser el heredero, ¡yo! no él.

Enojado, empezó a destrozar toda cosa que se interponía en su camino.

El hermano furioso y lleno de envidia empezó a perjudicar al príncipe heredero para obtener justicia por robarle un título que no era suyo.

Primero convenció a su padre de que el prometido del heredero fuera suyo en un principio el rey se negó,  pero salió con la excusa de que encontrarían a alguien mejor para él, a pesar de que el heredero amaba a su prometido.

— Padre pero tu sabes que yo lo amo.

—Principe heredero deja de poner tus sentimientos personales en lugar de lo que es mejor para el reino.

— Pero...

— Un futuro rey nunca diría pero, estoy pensándolo bien si mi decisión fue la correcta.

— No... discúlpame padre fue mi error.

— Eso es lo que quería oír, ahora retírate.

El príncipe salió de la oficina de su padre. Para poder ver a su hermano a los ojos y decirle.

—Hermano ¿Por qué me haces esto tu sabes que yo lo amo?

—Por favor, no seas dramático un heredero no necesita amor hay mejores pretendientes que nos podrían apoyar, deja de ser egoísta. Todo esto lo hago por el  bien del reino.

El príncipe heredero aún con pena aceptó la situación, todo era por el bien del reino. A pesar de estar triste por todo lo ocurrido el pensó que su egoísmo debía dejarlo atras.

—Si tienes razón, perdóname hermano.

Dijo triste y con lágrimas en sus ojos.

El hermano lo abrazó para consolarlo pero detrás de él tenía una magnífica sonrisa de oreja a oreja.

Segundo, queria buscar aliados y empezó a viajar a todas partes del mundo y consiguió mucha gente que lo apoyaba a su causa por tener rencor del malvado rey porque él era el responsable de la explotación de esclavos y por despilfarrar el dinero en joyas o vicios.

Celos -EDITANDO-Where stories live. Discover now