4. Sus manos

26 4 5
                                    

Desde ese día en el que por fin entendí el motivo de su tristeza, me comprometí a sanar ese corazón roto, por lo que inventé una y mil excusas para estar a su lado, tanto dentro como fuera del trabajo.

En ningún momento quise pasar a llevar sus sentimientos o agobiarla con mi presencia, así que cada idea que se me cruzaba por la mente, la presentaba muy casual y espontáneamente, de manera que ella se sintiese siempre cómoda.

Con el tiempo, nuestra relación fue volviéndose más cercana. Con el tiempo, ya no tuve que inventar "excusas" para salir, ya que se convirtió en algo habitual.

...Comenzamos a compartir cada vez más, como si ambos lo necesitásemos...

Si bien ella me gustaba y mucho, quise respetar sus procesos. Yo sabía que su corazón le pertenecía a otro, por lo que no la forzaría a nada. Mi intención era hacerla sentir bien y disfrutar de su compañía. En ningún momento quise pasar a llevar su estado anímico, ni mucho menos, aprovecharme de su confianza.

***

Toda la vida me había caracterizado por ser un hombre detallista. Desde niño siempre busqué hacer sonreír a mamá. Constantemente, llegaba a casa con alguna flor que cortaba en el camino. Si tenía dinero, le compraba alguno de los bombones que tanto amaba. Cuando comencé a desarrollar el gusto por el origami, de vez en cuando, le escondía alguna de las figuritas que le hacía, se las dejaba en su cartera, en sus zapatos, en su ropa, o hasta en las ollas en las que me preparaba comida exquisita. Todos esos detalles llenaban de alegría a mi hermosa madre. -Recuerdo su sonrisa cada vez que se encontraba con esos pequeños regalitos que su hijo le dejaba.

Por lo que decidí hacer lo mismo con _______, si en mamá habían dado resultado, tal vez en ella, también lo hicieran. Y no me equivoqué, con el pasar de los días, pude ir viendo como su bello rostro se llenaba de felicidad cada vez que se encontraba con uno de ellos.

Su sonrisa era la señal que me indicaba que, tal vez, estaba haciendo un buen trabajo tratando de alejarla de ese lugar triste en el que, a veces, se perdía.

***

A medida que pasábamos más tiempo uno con el otro, pude ir descubriendo lo fascinante que era su cerebro. Su elocuencia, sus conocimientos, su pronunciación cada vez que hablaba inglés, y su forma tan particular de expresarse utilizando, sutilmente, sus hermosas y delicadas manos, fueron encantándome.

Cada vez que abría la boca, se apoderaba mi atención por completo. Cada vez que usaba sus manos, me maravillaba. De hecho, no pude evitar decírselo en una oportunidad en la que me estaba explicando la diferencia entre la literatura inglesa del siglo XV y la del XVI. En esa ocasión, sus manos acompañaron la información de una manera tan armónica, que parecía una bailarina interpretando una pieza de ballet, por lo que el fan que llevaba dentro, habló sin permiso y se me escapó un alago. Quedé ahí expuesto, declarándome, abiertamente "Fan de sus manos".

Recuerdo haber sentido una vergüenza terrible en esa oportunidad, ya que esa expresión salió sin mi consentimiento, de hecho, según yo, sólo había sido un pensamiento. -El problema fue que mi boca lo había pronunciado en voz alta. - Quedé en evidencia, sin ningún tipo de intención, no tuve más remedio que resignarme y hacerme cargo de mis palabras.

Pasé de ser su compañero de labores, a ser el presidente de su club de fans.

~♡~
Funkysses




Y si te pasas por YouTube a darle amor a este MV....♡.♡

Te recomiendo buscar la traducción de este maravilloso temita de nuestra amada ovejita...
Lamentablemente, algo no me deja compartirla por acá. 🥺🤧

SEIS MESES [Lay Y Tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora