CAPITULO 18.

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«Al fin, creí que Glynda nunca nos iba a dejar salir», pensó Niebieski, agotado por la trágica situación vivida anteriormente en la sala de castigos.

El y Yang caminaron al comedor de la escuela, sin siquiera intercambiar alguna conversación desde que fueron liberados de las garras de Glynda y Port.

Luego, cuando entraron finalmente al comedor, tomaron una bandeja repleta de comida y se sentaron en la misma mesa, de extremo a extremo. Poco a poco llegaban más estudiantes, llenando toda el área. No mucho tiempo después, el resto de los integrantes del equipo RWBY y JNPR se sentaron y los acompañaron en aquella mesa.

—Están peleados, o que. —murmuro Jaune a Blake.

—Algo así. —contesto Ruby.

—¿Algo así? —expreso Pyrrha.

—¿Saben que estamos aquí y los podemos escucharlos? —hablo Yang, entre bocados de su comida.

—Oh, lo siento. —se disculpó.

—La señorita malhumorada ha estado actuando insoportable durante estos últimos días —Weiss estaba claramente irritada hasta no más poder del comportamiento de ella—. Acéptalo, el director Ozpin nos explicó aquella confusión.

—Está bien, pero no me hables así —contesto Yang, en su estado normal. Ya no se veía molesta, luego voltio a mirar a Niebieski y le grito—: ¡Oye tú! ¿no se te olvida algo?

—¿Qué cosa? —pregunto con incertidumbre, echándole cabeza a lo que supuestamente había olvidado.

—Unas disculpas a mi hermana, ¿te suena? —añadió.

Inmediatamente Niebieski cayó en cuanta, eso era lo que faltaba, había olvidado por completo hablar o disculparse con Ruby por su arrebato aquella noche. Noche en la que fue humillado y roto su orgullo. Orgullo que el negaba tener... Pero ahora, con aquella propuesta dada por el enigmático director Ozpin. Él aún tenía preguntas que necesitaban respuestas, pero eso era para otra ocasión.

—Ruby, lo siento —volteo a mirarla a los ojos. Ella estaba atenta, su ánimo estaba regresando nuevamente; probablemente había estado preocupada de más—... Te hice pasar por un gran susto —reconoció. Los demás estuvieron en relativo silencio, escuchándolo hablar—, así que nuevamente me disculpo. Es que estaba en una crucial prueba, saben, como yo no estoy en ningún equipo, el director Ozpin me cito a un entrenamiento a esa hora de la noche. —mintió, ocultando la verdad de los hechos.

—Disculpas aceptadas —se alegró Ruby—. Pero no me vuelvas a dar un susto de muerte. —chillo. A lo que rieron, les causo gracia el comportamiento infantil del miembro más joven del grupo.

Las cosas por el momento se habían arreglado, no obstante, Niebieski noto algo, Jaune estaba actuando decaído, no le había prestado atención, pero sabía que algo malo estaba pasando con él. Pyrrha pudo notar esa preocupación en el rostro de Jaune, ¿Quién no lo iba a notar? Ella estaba sentada justamente a su lado.

Jaune ni siquiera había tocado su comida. Estaba divagando en sus pensamientos.

—¿Jaune, estas bien? —pregunto Pyrrha. No pudo soportar ver a su líder de esa manera.

—Oh... ¡Si! ¿Por qué? —reacciono, la voz de Pyrrha lo había vuelto con los vivos.

—Es solo que pareces un poco decaído... últimamente. Dime, ¿estas durmiendo bien, comiendo bien, te duele alguna parte del cuerpo?

—Chicos, estoy bien, en serio. No se preocupen —dio una clara sonrisa forzada—. ¡Miren!

Una carcajada llamo la atención de Jaune, que lo hizo voltear y ver en la dirección por dende se venía, pero el rostro de Jaune mostro todo menos seguridad, como si le tuviera miedo.

DE MERCENARIO A CAZADOR - RWBY: Volumen 01 y 02Where stories live. Discover now