El conjunto de vivencias colorean tu corazón hasta alcanzar una gama determinada, el cual, definirá todos tus pensamientos, sentimientos y preferencias. Para poder comprender el color, debemos entender de dónde proviene.
¿Qué es lo que reside en el...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—¿Vas a quedarte todo el día en silencio o...? —gruñó Kid. A pesar de querer aparentar enfado o irritación, su voz se había perdido antes de salir de su garganta y apenas podía mantener contacto visual con Killer. Estaba más nervioso que frustrado; no dejaba de trasladar el peso de su cuerpo de una pierna a otra y cruzaba los brazos para instantes después tratar de estallar sus nudillos. Habían dejado de hacer ruido la tercera vez.
Killer no podía culparlo por su reacción; él estaba pasando por el mismo proceso de confusión y extrañeza, aunque con diferente expresión. ¿Cuánto tiempo se había pasado con la boca abierta y sin saber qué decir?
—Perdón, yo... No esperaba escuchar nada como eso.
Estaba escogiendo mal sus palabras, estaba dando una expresión equivocada. Aun así, era incapaz de redirigir su mente.
Para poder hablar primero debería recuperar la capacidad de pensar. Y tras escuchar la confesión de Kid aquello le resultaba completamente imposible.
Habían sido amigos desde la infancia, se habían criado en la misma zona de la isla y se habían salvado y arrastrado al peligro en múltiples ocasiones. Se habían convertido en un dúo inseparable... y por ello Killer no lo comprendía.
¿Cuándo habían cambiado las tornas? ¿Cuándo el bobo y distraído de Kid había ganado la suficiente consciencia de sí mismo para poder siquiera pensar en que él le gustaba? ¿En qué momento Killer había olvidado su crush en su mejor amigo y se había resignado a su destino?
¿Y por qué?
Killer no tenía nada nuevo que ofrecer. La dinámica entre ellos se había mantenido exactamente igual desde que izaron velas y pusieron rumbo hacia el Nuevo Mundo. Seguían en el mismo viaje, con los mismos objetivos y con unas alianzas pésimas que no se mantenían durante demasiado tiempo. Cuanto más crecía la fama de Eustass Kid, más los quehaceres de Killer. Como su primer oficial disipaba las tensiones que provocaba la tormenta incansable que era su capitán y después debía limpiar cualquier posible desastre que dejase a su paso. No se quejaba de ello, pero sin duda implicaba un mayor distanciamiento debido a sus respectivas obligaciones.
