Louis había tenido la infancia perfecta, tenía a ambos padres juntos que lo amaban sin importar que, tenia a amigos a los que amaba y confiaba con su corazón y alma, era feliz.

Tenía todo lo que un niño de su edad deseaba, una casa, ropa, comida, dinero pero, lo más importante...amor. Creció lleno de amor y cariño, era uno de esos hijos de mamá y papá que si solo se le ofrecía algo, chasqueaba los dedos y ya tenía a todos comiendo de la palma de su mano; sus caprichos se cumplieron cuando el quiso y eso solo hizo que su felicidad aumentara. Creció creyendo que nunca tendría que hacer algo por cuenta propia porque siempre había alguien más haciéndolo por el, creció sin tener que buscar el amor de un alfa porque mamá se lo daba y por partida doble,  creció sin tener que saber defenderse de nadie porque papá siempre era quien respondía por el.

Pero como siempre, no todo en la vida es de color de rosa.

A los 10 años cuando tuvo su primer celo (que por cierto, adelantó) y logró averiguar su casta, los problemas llegaron de inmediato, su padre ya no estaba tanto tiempo en casa, muchas veces les gritaba a el y a su madre y a veces lo golpeaba. Su madre lloraba cada vez que su padre salía de casa sin decir a donde iba, lloraba cada que lo golpeaba sin razón y lloraba cada vez que le gritaba...hasta que un día ella solo se canso y él también.

—¡Es una completa vergüenza! ¿no lo ves?—grito su padre, rojo de rabia —es un hombre y es un maldito omega—volvió a gritar haciendo temblar su pequeño y delicado cuerpo en su lugar.

—por favor, Edmund, solo...no lo toques más— suplicó en un susurro.

El ojiazul solo vio a su madre con los ojos llenos de lagrimas e inyectados de miedo. Se froto la mejilla que su padre había golpeado sin razón y le pidió con la mirada a su madre que lo dejara pasar y como siempre...lo hizo.

Hasta que un día ambos se cansaron de la vida que llevaban, no era la adecuada para la edad de Louis y aunque su madre era mayor, no tenía por qué pasar por tantas humillaciones juntas, así que uno de los días en que Edmund no estaba en casa, su madre se llevó la mayoría de sus pertenencias junto con las suyas y se fueron de esa casa que por mucho tiempo atrás había dejado de sentirse como un "hogar".

No sabía que el ser un omega masculino sería tan malo, siempre había estado interesado en ser un omega, uno bonito. Le encantaba la idea de poder tener hijos, de poder dar vida a una criatura con sus facciones o tal vez su pereza en las mañanas, poder llevar cachorros en su vientre siempre había sido un sueño para el. Ese pensamiento lo lleno de luz, que poco a poco se desvaneció con la negativa de su padre por ser un omega, un omega hombre.

—No seas tan ingenuo, niño, ningún alfa querría estar con alguien como tú—.

—Por favor— se burlo Edmund —nunca podrás tener hijos. Serias repugnante siendo padre, porque los hombres omegas no son buenos en eso—.

—Jamás podrás formar una familia, recuerda que eres un omega. O-ME-GA— hizo hincapié las palabras —y nadie te tomara enserio. Nunca— escupió con odio mientras salía de la habitación de Louis. 

Y Louis no  quería creerle, pero esas palabras habían salido con tanta dureza y certeza, que perdió toda esperanza.

Muchas veces las palabras de Edmund resonaban en su cabeza y aunque la mayoría de ellas intentaba ignorarlas, a veces era difícil y se quedaban ahí. Atormentándolo.

—¡Louis!— la voz de su madre que sonaba desde la cocina lo saco de sus pensamientos —baja, la cena está servida— le volvió a gritar desde la cocina.

—¡Ya voy, mamá!— grito de la misma manera.

Bajo de la cama y sintió como su cuerpo se erizaba al sentir el contacto del frío suelo con sus cálidos pies. Se puso los primeros zapatos que encontró y corrió escaleras abajo, ganándose una regañina de su madre que estaba poniendo los vasos en la mesa del comedor. Sonrió tímidamente y tomó la jarra de agua, colocándola sobre la mesa de la misma manera, frunciendo el ceño confundido al notar que había tres vasos, tres platos y seis cubiertos. Cuando solo eran él y su mamá.

QUIERO ESTAR CONTIGO (L.S.)Where stories live. Discover now