❝ 𝐒𝐨𝐧𝐫𝐢́𝐞

2.7K 277 3
                                    

Armin comenzó a moverse. Sus ojos azules observaban y exploraban la habitación con cansancio. Pronto se centraron en dos ojos de un color verde familiar, y él saltó casi de inmediato.

"¡E-Eren!" se quedó en silencio, repasando lentamente los acontecimientos que ocurrieron antes de que cayera dormido. Armin miró sus muñecas vendadas y soltó un suspiro tembloroso. Eren extendió su mano y la puso sobre la suave cabeza de Armin, y su ya desordenado cabello dorado. Armin se estremeció ante el tacto, un instinto natural por ahora, pero pronto se calmó de nuevo. La mano de Eren se movió sútilmente hasta la mejilla de Armin y este finalmente se tranquilizó por el cálido tacto de esta.

"¿Quieres salir tal vez? No te he visto salir de tu casa por un tiempo", dijo Eren suavemente y sonriendo a Armin.

La expresión tranquila del rubio fue rápidamente reemplazada por una de angustia. "Reiner dice que no puedo salir."

"Reiner no tiene porque enterarse, salió con sus amigos, ¿no?"

"S-supongo, pero-" Armin vaciló.

"¿Pero qué?" Eren instó a su amigo a continuar, colocando su mano libre en el muslo de Armin mientras que la otra continuaba dándole suaves caricias por su rostro.

"Yo... Olvidalo" sacudió ligeramente su cabeza "¿A d-dónde quieres ir?"

"Te gusta leer, ¿Verdad? Tal vez deberíamos visitar la biblioteca. Y también necesito recoger algunas cosas de la casa de Jean, así que podrias pasar el rato con Marco si quieres." Eren recordó que Armin y Marco eran cercanos. Ver a los dos chicos hablando entre ellos le hizo sentir algo celoso, pero eso era algo completamente estúpido, así que hizo lo mejor que pudo por ignorarlo.

Los ojos de Armin parecían ensancharse al mencionar a su pecoso amigo. "¿La biblioteca?" o tal vez no. Eren también recordó la pasión de Armin por la lectura.

"Sí, tengo una membresía allí por lo que puedes conseguir tantos libros como quieras." Los ojos de Armin se ensancharon una vez más, tal vez incluso volviéndose un poco más brillantes que antes.

Una sonrisa dulce se dibujó en los labios de Armin "¡Realmente me gustaría ver la biblioteca! Q-quiero decir, bueno- tal vez no… A Reiner no le gusta cuando leo." su sonrisa se desvaneció. Eren frunció el ceño.

"¡Está bien! Puedes leer a gusto sin ningún problema, ¿de acuerdo?" aseguró.

"Bien." asintió con la cabeza, y la sonrisa volvió a formarse. Eren no había visto a su amigo tan feliz en mucho tiempo.

Adorable, Eren pensó para sí mismo mientras lentamente se levantaba de la cama donde ambos se encontraban sentados. "Bueno, te dejaré cambiar ahora." salió de la habitación, cerrando suavemente la puerta detrás de él. Eren suspiró y se inclinó contra la pared con sus brazos cruzados sobre su pecho. Es tan lindo.

Momentos más tarde, la puerta del cuarto de Armin se abrió. Llevaba una sudadera azul pálido y una bufanda beige para ocultar los muchos moretones de su cuello. Eren suspiró por esto. Tomó la mano de Armin suavemente, asegurándose de no asustarlo, para llevarlo por las escaleras para finalmente salir.

Armin inhaló profundamente un poco de aire fresco, para después exhalar lentamente. No había sido capaz de hacer eso durante tanto tiempo. De hecho, no había salido de su casa al menos durante un mes o algo así.

"Vamos". Eren le dedicó una sonrisa a Armin, lo guió por la calle y para finalmente llevarlo hacia su coche.

❝ dolor. | EREMINDove le storie prendono vita. Scoprilo ora