Capítulo VI.

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El día había terminado, al final Kurumu unió a Goku a un club que pensó que sería el más adecuado para él, el cual era el club de karate.

Ella en cambio se unió a otro club ya que no la dejaron unirse al mismo que Goku pues le dijeron que distraía mucho a los alumnos y no podrían centrarse debido a lo llamativa que era.

-¿Cómo se atreven esos gorilas? Estúpidos, no saben que les llevé una joya como lo es Goku -la succubus se quejaba echando humo.

-¿Entonces mañana si podré peleae contra todos esos chicos? -preguntó Goku jalando de la falda a Kurumu quien lo miró.

-Así es mi querido prometido, pero probablemente no sea dificultad alguna para ti porque eres súper fuerte -respondió la muchacha con las mejillas rojas mirando hipnotizada a Goku.

Aquella demostración que dio su pequeño y sensual "futuro esposo" la había asombrado mucho, sabía que era fuerte, pero no tanto como para derrotar a las sirenas en su propio territorio, el agua.

-¡Qué bien! -exclamó el pequeño apretando sus puños con emoción bajo la atenta mirada de la joven de pelos celestes, pero de repente su expresión cambió- Oye Kumoru, ¿dónde está Morka? No la he visto en ningun lado el día de hoy -mencionó el chico mirando los alrededores solo discerniendo a otros alumnos.

-Ahora que lo dices -Kurumu también cambió su expresión a una curiosa.

No es que la ausencia de la vampiresa le molestase realmente, es más, esto jugaba a su favor ya que tuvo mucho tiempo más al lado de Goku, incluso teniendo una "aventura" a su lado si así se podría llamar.

-¿Goku-kun? -la dulce voz de Moka se hizo presente llamando la atención del duo.

La chica de pelo rosa iba bajando de las escaleras mientras se frotaba los ojos, al parecer recién había despertado, pero gran sonrisa se formó en los labios de la misma al confirmar que se trataba de su pequeño amigo con cola por lo cual se apresuró en llegar con él y Kurumu quien no pudo evitar soltar un chasquido.

-¡Morka! ¿dónde estuviste todo este tiempo? ¿será acaso que estuviste tomando sangre de otras personas? -preguntó el chico pensativo- Te entiendo, yo también tengo hambre jajaja -el chico siguió con empatía frotando su barriga.

-Probablemente sea eso, está en la naturaleza de los vampiros después de todo -mencionó entre murmuros Kurumu mientras se escondía detrás del chico, en su mente aún estaba muy fresco el recuerdo de la brutal paliza que recibió de la "otra" Moka.

-¡No estuve haciendo eso! ¡moou Goku-kun, yo solo bebo de tu sangre! -la chica al oír todas las cosas que decían de ella infló sus mejillas con molestia y algo de vergüenza.

-¿Entonces? -Goku volvió a preguntar colocando sus manos por detrás de su cuello.

-Oh, pues de alguna forma llegué al bosque y allí encontré a un chico herido -comenzó a explicar a la vez que el trio comenzaba a caminar hacia la salida ya que las clases habían terminado.

Ya era de tarde, el sol ya había tomado ese característico color naranja rojizo y lentamente se iba ocultando.

-¿Alguien herido? -Kurumu levantó una ceja de forma confusa ante lo cual Moka asintió.

-Sí, un chico que se llama Tsukune. Cayó en un barranco y allí una rama se clavó en su pierna -explicó con tranquilidad.

-¿Huh? ¡Morka, tú estas herida! -Goku se exaltó levemente al ver la mano vendada de la chica.

-E...esto no es nada, jajajaj, no te preocupes -la vampira se apresuró en decir para tranquilizar a su amigo.

-"Si su pierna estuvo herida eso quiere decir que hubo sangre, ¿será acaso?" -la succubus abrió sus ojos con asombro ante la idea que se le pasó- ¡Ja! Gracias a eso pude pasar mucho más tiempo con Goku, no sé quien sea ese Tsukune, pero al final fue algo beneficioso para mí -entre murmuros se dijo la peli celeste.

Warrior + Vampire.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora