Recapitulando las ultimas semanas

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Al principio Gabriel no le creyó, su padre intento explicarle de la manera mas sencilla que se le ocurrió sobre los sucesos recientes, la historia fue sencilla, después de que se desmayará el tio Luis y su hijo lo llevaron a la puerta del sotano, despues de tocar insistentemente y revisar las camaras que secretamente había puesto en la casa el doctor abrió la puerta, puso a su hijo en la camilla y le aplico el procedimiento estandar, en cuanto su hijo empezó a convulsionar comezó a sospechar que no se trataba de una simple gripa o resfriado.

Nadie lo sabia pero su actual investigación consistia en encontrar una manera de revertir los efectos del Edax, uno de sus colegas lo había invitado a participar en el proyecto, pero en cuanto se dio cuenta de que era con fines de usarlo como arma biologica y que gente muy poderosa financiaba dicho proyecto tuvo que reusarse, afortunadamente su colega confiaba en que era lo suficientemente listo para no poner a su familia en peligro al hacer algo tan estupido como decirle a las autoridades, fue precisamente gracias a esa confianza que pudo tomar una muestra del prión y llevarlo a su laboratorio, como no sabía quien estaba involucrado tuvo que hacer todo en solitario, remodelar el laboratorio, conseguir cadaverés a traves del mercado negro, preparar medidas para evitar que el Edax se esparciera en caso de una brecha, al final, solo logró encontrar una vacuna para evitar el contagio aereo, no tenía manera de prevenir el contagio por mordida.

En los dias posteriores a que Gabriel enfermara solo se pudo lidiar con la fiebre y esperar a que mejorara, las noticias anunciaban casos de locura y algunas personas con comportamiento erratico, en cuanto supo de ello y preparandose para lo peor convenció a su familia de que se quedaran un poco mas, solo por el fin de semana, después de poner somniferos a la comida, esperó a que todos se durmieran para aplicarles la vacuna que había creado, intentó contactar a su esposa, pero ella se negó a regresar a casa, al día siguiente el caos se desató en la ciudad, afortunadamente tenía suficientes suministros y nadie salio de la casa, al principio nadie creía lo que estaba pasando, pero después de ver los videos publicados en redes sociales todos decidieron mantenerse a salvo, usando unas tablas del taller de Tori taparon las puertas y ventanas de la planta baja, en una de las ventanas del primer piso pusieron una cuerda, la cual usaron para salir y buscar las armas en la patrulla del tio Luis.

Después de haber fortificado la vivienda y de recuperar las armas, la familia organizó dos salidas, una para buscar viverés y otra para rescatar a la madre de Gabriel, pudieron recuperar suficiente comida para sobrevivir varios meses pero por desgracia no fue posible completar la misión de rescate, para cuando llegaron, la persona que dio a luz a Gabriel y Tori ya era un muerto viviente, lo unico que pudieron hacer por ella fue aliviar su sufrimiento, la muerte de la única mujer que amó afectó profundamente al padre de Gabriel y el tener que darle la noticia a su hijo no fue nada fácil, pero alguien tenía que hacerlo.

Una vez que reunieron los suministros, la familia se atrincheró en la casa por un largo tiempo, todos a excepción del doctor pensaban que Gabriel estaba en estado de coma, su padre aún no sabía como decirles que su corazón había dejado de latir y que lo tenía en observación detrás de un muro de vidrio balistico a la espera del momento en que su hijo resucitara como un no muerto, por eso cuando de la nada despertó sin mostrar signos vitales y con capacidad de comunicación llamó a su hermano de inmediato, el no dudaría de hacer lo correcto en caso de ser necesario.

Al terminar de escuchar todo lo que pasó mientras estaba inconsciente, Gabriel subió a su habitación, necesitaba procesar toda la información, su madre había muerto, y ni siquiera pudieron hacerle un funeral adecuado, en silencio cruzó el area común, las personas que estaban en la sala y en los pasillos fueron incapaces de sentir su presencia, el rechinido de la puerta alerto a los demás, pero nadie quizo salir de su habitación a ver lo que sucedía.

En su cuarto Gabriel se lanzó al suelo y comenzó a hacer lagartijas, siempre que tenía algún problema hacía ejercicio para pensar mejor, lo había hecho por tanto tiempo que se había vuelto un habito, para cuando había hecho cincuenta,su cuerpo se movia por costumbre, sus pensamientos seguián procesando toda la información, el fin del mundo y la muerte de su madre parecián ideas demasiado lejanas y dificíles de creer, sabía que su padre nunca mentiría con un tema tan delicado, pero aún así, todo se sentía irreal, un golpe en la puerta llamó su atención, su hermana estaba de pie en el marco de la puerta.

-Me alegro ver que estas despierto- Tori lo miraba con una ligera tristeza.

-¿Cuando llegaste, Como abriste la puerta?-

-Estaba abierta, parece que andas distraido el día de hoy-

-Vaya, supongo que hoy no estoy en la mejor de las condiciones- Gabriel deja salir una pequeña risa, esta sentado en el suelo sin mostrar ninguna señal de cansancio.

-Papá te ha contado-

-¿Se nota mucho?-

-Le dije que esperara un poco después de que despertaras y te adaptaras a todo esto del apocalipsis antes de contarte lo de mamá, pero veo que ese señor me ignoró como siempre-

-Así que es cierto lo de los zombies, tenía la esperanza de que, de alguna manera nuestro padre hubiera enloquecido después de lo de nuestra madre-

-¿Aún no has visto tu ventana? esta cubierta de tablas y las luces de la casa se mantienen apagadas durante la noche-

Gabriel miró por la ventana, afuera el vecindario parecia estar pasando por una tranquila noche, notó que no tenía problemas con ver en la oscuridad, de hecho lo hallaba comodo, al fijarse un poco más se dió cuenta de que la calle estaba cubierta de personas, las casas tenían ventanas rotas, algunas parecian estar cubiertas de sangre, las personas en el suelo lucían como cadavéres, mientras que aquellas que caminaban se movian entre espasmos con la frente apuntando al cielo, algunas se acercaban a la cerca de madera que los mantenía lejos de la propiedad, otras la ignoraban por completo.

-Bueno hermanita, parece que tu sueño al fin se ha vuelto realidad ¿Ya estas feliz?- En cuanto lo dijo, Gabriel supo que debía disculparse, el latido tranquilo de su hermana se aceleró, captó un aroma que solo podía describir como "emociones dañinas" miró a Tori, pero su expresión solo era seria, sabía que estaba reprimiendose, con un tono frio su hermana le respondio mientras se marchaba.

-El tio Luis quiere hablar contigo, te espera en el atico, no tienes porque ir "hermanito"- La ultima palabra sonó como un insulto por la forma en que lo dijo. 

Gabriel queria disculparse con ella, pero no encontraba las palabras para hacerlo, en su lugar solo pudo quedarse cerca de la ventana escuchando como su hermana pequeña subia hasta su cuarto, cerraba la puerta y lloraba en silencio sobre su almohada. 


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