Panal

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Nos encontrábamos en un enorme patio de juegos, habían carruseles y amacas.

También habían cuatro puertas con cuatro figuras. Una era un círculo, luego un triángulo, una estrella, y por último un paraguas.

—Elijan una figura, y párense frente a ella de inmediato—

—¿Cual deberíamos elegir?— le pregunté a Sae.

—El triángulo— respondió sin dudarlo mucho.

—¿Por qué?—

—Ya lo veras—

—Esta bien, te sigo—

—El tiempo de elegir su forma termino. Ahora, revelarnos las reglas del juego. Cada jugador, deberá tomar uno de los recipientes que está junto a ustedes—

Hicimos la fila y nos entregar uno de los recipientes, todos eran de forma redonda y color plateada.

—Por favor, abran los recipientes para ver su contenido—

Abrí la caja y había una aguja y algo parecido a una galleta con un triángulo marcado.

—El segundo juego se llama "panal". La forma que eligieron, es la forma que deben desprender. El tiempo límite es 10 minutos. Pasarán está ronda si desprenden la figura sin romperla en ese tiempo. Que comienza el juego—

Inmediatamente empezamos a jugar, y lo hacías con el mayor cuidado del mundo. Una pedazo roto, y todo se iba a la mierda.

Pasaba la aguja de un arriba a abajo en solo un lado, creo que hacia seria buena forma de empezar. Cuando creí que eso ya sería suficiente, con los nervios hasta el cielo desprendí el primer lado, y por suerte, este salió intacto.

Un disparo retumbó en toda la sala, la primera persona muerta. Luego la segunda, y seguida de esas muchas más.

Mientras los dudaron continuaban, yo seguía pasando la aguja de un lado a otro hasta llegar al último lado. Lo desprendí cuidadosamente y todo resultó perfecto.

—Terminé—

—Yo casi—

—Oye, tú— llamé. —Mira—

—Jugadora 68, aprobada— dijo la voz femenina.

—¿Puedo quedarme a esperarla?— le pregunté al soldado, no querría dejar a Sae.

—No—

—Pero...—

—No—

—No te preocupes, _____. Ve, llegaré luego, lo prometo— dijo Sae.

—¿Lo prometes?—

—Si—

—Bien... Te quiero, no lo olvides—

—Y yo a ti—

Salí con unas cuantas personas más mientras algunos soldados nos llevaban de nuevo a la habitación.

Cuando llegue3, subí a mi cama y me senté abrazando mis rodillas. Esperando a que llegara Sae-byeok...

Unos minutos después, ella volvió sana y salva. Sentí como el alma me volvió al cuerpo.

Me hice prácticamente tirada de la cama y corrí hacia ella. Le di un gran abrazo, que ella recibió con gusto.

—¡Volvíste!— dije mientras ponía mis manos en su cabeza.

—Te prometí que lo haría. Y Kang Sae-byeok nunca, jamás, rompe sus promesas—

Reí ante su comentario y luego la acerqué más a mi hasta juntar nuestros labios en un beso. De sentía tan bien estar junto a ella, tanta paz.

Sin embargo, nos vimos interrumpidas gracias a que anunciarán los resultados del segundo juego.

Una vez más, la parte de los jugadores disminuía y la cantidad de dinero aumentaba

—De los 188 jugadores, 78 fueron eliminados—

Del tubo empezaron a caer todos los billetes. La alcancía ya estaba bastante llena, llevaba más de la mitad.

—El premio es de 7900 millones de wons. El premio acumulado hasta ahora es de 35 800 millones de wons... Su hora de comida comienza ahora. Todos los jugadores fórmense y tomen su comida—

Esta vez, la comida era solo un huevo y una botella de agua con gas. Recogimos nuestra comida y nos sentamos a comer.

—¡Falta comida para cinco!— dijo una mujer interrumpiendo nuestra comida.

—Hay comida para el numero exacto de jugadores—

—Entonces explíqueme ¿¡Por qué faltó yo!?—

—Se preparo el numero exacto de comida— dijo de nuevo apuntandole a él hombre con su arma.

—Oiga— dijo una chica. —Esas personas...— señaló a Douk-su y su grupo. —Se formaron dos veces. Yo los vi—

—¿Que?? Que me ven imbéciles?— dijo Douk-su. —¿Nunca habían visto a una persona comer o que?—

—¿Quienes se creen? ¿Por qué robaron mi comida?—

—Ahhh esto ¿es tuyo?— enseñó la botella. —¿Como te llamas? Porque aquí yo no veo tu nombre— rieron. —Yo no lo veo—

Una pelea por la comida empezó con ellos dos. Douk-su lo pateó hasta que no se movió más. Un hombre se acero a él y confirmó que estaba muerto.

—¡Oigan!— llamó Gi-hun acercándose al cuerpo. —Él está muerto ¿Escucharon? Una persona murió— se acercó a los soldados. —Él acaba de morir. Ese jugador está muerto. Ese bastado acaba de matarlo—

Gi-hun se quejaba, pero los soldados no hacían absolutamente nada.

—¡Acaban de matar a una persona! ¿¡Escucharon!? ¡Un hombre acaba de morir! ¿No me escucharon? ¡Eso no es correcto! ¡No pueden matar a gente así de simple!—

—Jugador 271, eliminado—

La cantidad de jugadores bajó uno y el dinero aumentó. La alcancía se lleno de nuevo, dejando a todos en silencio.

Los soldados llevaron una caja y ahí metieron al hombre. Esta era negra con un lazo rojo. Metieron al hombre y se lo llevaron.

Luego de eso, parecía que todos estaban haciendo grupos. Todos excepto nosotras dos.

—¿Por qué todos se juntan?— preguntó Sae.

—Escuché que algo va pasar esta noche. Además tu y yo somos un grupo ¿no?—

—Por supuesto que si—

—Oigan, ladronas— dijo Gi-hun llegando cerca de nosotras. —¿Van a estar bien? Parece que ustedes y ese matón no están en buenos términos—

—¿Y que?—

—Si pasa algo en la noche, nos reuniremos junto a mi cama. Piénsenlo—

—No confiamosen ninguna persona. Si están en este lugar es porque no podemos confiar—

—¿Estas diciendo eso enserio? Tienen miedo, por eso no logran confiar. Porque no tienen a nadie más en quien confiar, solo confían una en la otra—

—Gracias por la oferta, Gi-hun— dije. —Trataremos de pensarlo, estaremos ahí si lo necesitamos—

—Okey...— dijo y se fue.

Parecía que Gi-hun en verdad quería ayudarnos. Tenía una cara con una mezcla de temor y nervios, y se podía entender porqué.

Está noche sería peligrosa...

𝐅𝐈𝐍𝐀𝐋-𝐒𝐀𝐄𝐁𝐘𝐄𝐎𝐊Donde viven las historias. Descúbrelo ahora