𝐅𝐈𝐍𝐀𝐋-𝐒𝐀𝐄𝐁𝐘𝐄𝐎𝐊

La Cuerda

Nos amarraron las manos a la cuerda con candados. E hicimos todo lo que él viejo nos había dicho. Uno a la derecha y uno a la izquierda.

El disparo sonó, avisando que el juego ya había empezado. Inmediatamente todos nos tiramos hacía atrás mientras esperábamos que pasarán los diez segundos. Pasados esos segundos Gi-hun gritó

—¡¡Tiren!!—

De inmediato todos empezamos a jalar de la cuerda, con todas nuestras fuerzas. Lo estábamos haciendo muy bien, ya que la cuerda estaba más a nuestro favor. Pero de un momento a otro íbamos perdiendo.

—¡Tranquilos escuchen! ¡Cuando de la señal, den tres pasos hacia el frente—

—¿¡Estas loco!?—

—¡Vamos a intentarlo!—

—¡A la cuenta de tres! Uno. Dos. ¡Tres!

Dimos tres pasos y por poco Gi-hun se cae de la torre. Pero logramos que todo el equipo contrario se cayera al suelo.

—¡Tiren!—

Jalamos y Jalamos mientras nos llevábamos arrastrados al equipo de la otra torre. Jalamos hasta que logramos que todos los diez se cayeran y quedarán guindados de la cuerda. Segundos después la guillotina corto la cuerda, provocando que todos nos cayeramos enésima de los otros.

Respiraba profundamente mientras sentía las gotas de sudor que bajaban por todo mi cuerpo. Lo habíamos logrado, lo habíamos echo. Nos quitaron los candados y nos dejaron ir.

En el ascensor veía mis manos, las cuales estaban rotas y adoloridas. Había un hombre que estaba de rodillas, al parecer estaba rezando.

—Oye. ¿A quien le estás rezando? ¿A Dios? ¿De verdad crees que estas vivo gracias a Dios?— el hombre la ignoró. —Si sigues respirando y moviendo esa boca es gracias a ese anciano, y ese de ahí que se le ocurrió una técnica d e último minuto. Entonces si vas a dar gracias... Agradesele a ellos—

—Pobre oveja perdida— respondió el hombre. —¿No escuchas los gritos de los que fueron clavados en la cruz hoy? Por su sacrificio y sangre, esque estamos vivos. En nombre de todos nosotros pecadores, di gracia spor su sacrificio y por la elección echa por el de arriba, y dije una oración—

—Tonterías. Tu los mataste—

—Padre...—

—!Ah! ¿Iremos al cielo si rezamos verdad?— junto sus manos. —Entonces voy a empezar. Te agradezco padre celestial, hoy trabajamos juntos como un equipo para enviar gente a tu lado matandola. Por favor, ayúdanos a enviar más personas a tu lado de ahora en...—

—Ya cállate— interrumpió Sae.

—¿Yo? ¿O le hablas a él?—

—Los dos—

Llegamos a abajo y salimos del ascensor listos para ir a la habitación.

—Oye ¿cómo te llamas?— me preguntó la chica que Sae había traído para el juego.

—Jeon ____-

—Ah... ¿Y estas soltera?—

—¿Por qué quieres saber eso?— dijo Sae rápidamente.

—Es linda...—

—No, no está soltera. Esta conmigo, soy su novia. Ahora, no le hables—

—Solo preguntaba...—

Entramos a la habitación y ahí estaba el grupo de Douk-su. Lastimosamente habían ganado en el juego pasado.

(...)

Ya habían anunciado la hora para dormir. Antes de eso, no habían dado un elote para comer.

También habías planeado construir un fuerte para protegernos durante la noche. No sabíamos que podía pasar. Mientras unos dormían, otros vigilaban, y así sucesivamente.

Ahora era mi turno de vigilar. Y por suerte me había tocado con Yeji, así podríamos conocernos más.

—¿Por qué estas aquí?— preguntó Yeji.

—Por la misma razón que tú. Deudas—respondí.

—Oh por supuesto. ¿Tienes algún familiar cercano? ¿Mamá? ¿Papá?—

—No, sólo tengo a Sae-byeok, es mi novia. Mis padres también debían dinero. Demasiado dinero, así que al no poder pagarlo los terminaron matando. ¿Tú?—

—Vine aquí con mi hermana, pero ella murió en el primer juego—

—Oh, lo siento mucho—

—No te preocupes. A pesar de que la extraño, le prometí que saldría de aquí. Y espero hacerlo—

—También lo espero. Tal vez podamos salir las tres juntas, sería bueno—

—Si, y pasaríamos por muchos lugares, y conoceremos personas, cosas por el estilo. Sería genial ¿no crees?—

—Si, claro que lo creo—

—¿Que harás si sales de aquí con vida? —

—Iré a vivir con Sae y su hermano menor, Cheol. Lo quiero mucho, es un niño divertido y gracioso— dije soltando una sonrisa mientras lo recordaba. —Le prometimos que lo haríamos, y espero cumplir mi promesa—

—Si yo no lo logro, espero que tu si—

—Vas a salir de aquí, Yeji. Vamos a salir de aquí. Hasta podrías quedarte con nosotras y Cheol. Serias una muy buena amiga—

—_____ si no lo logro, tienes que prometerme que iras por mi abuelita. No puedo dejarla sola y ella está enferma—

—Volverás con ella Yeji, solo hay que terminar estos juegos y ganar—