16. Mi primera cita (spoiler: mando a mi cita al hospital)

291K 28.9K 175K
                                    

Me siento húmedo y la sensación no me agrada para nada porque mi cuerpo se siente pegajoso

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Me siento húmedo y la sensación no me agrada para nada porque mi cuerpo se siente pegajoso. Es la misma sensación que tenía a los diez años después de comer un helado y mancharme por todos lados. Es asqueroso e incómodo, aunque no puedo echarle la culpa a Edward por hacer que me mojara, después de todo fui yo el que decidió acompañarlo bajo la lluvia.

Y la verdad es que no me arrepiento.

Me gustó.

Me gustó hacer el tonto con él, me gustó que nos valiera una mierda el clima y me gustó besarlo.

Pero (sí, tiene que haber un «pero») quiero mantenerme firme a la idea de que todo esto es solo momentáneo, quiero aferrarme al sentimiento que tengo hacia Heather y hacia la amistad que estoy comenzando a crear con Edward. Sí, eso es justo lo que quiero; avanzar con la chica que me gusta, disfrutar de los días que nos quedan a Edward y a mí como novios y encerrar cualquier otro pensamiento o sentimiento confuso.

Solo quiero estar bien. Quiero protegerme y mi zona de confort es la única que me asegura protección.

Edward me ayuda a sacar las cosas de la canasta una vez que regresamos al auto, ve cada tupper con intriga y una sonrisa de oreja a oreja comienza a crecer en su rostro. Sonrío por lo bajo para que no note que su reacción me ha robado una sonrisa. Se ve lindo emocionado.

Me hace feliz mirarlo de ese modo, no solo porque está demostrando que soy una buena cita, sino porque eso significa que se la está pasando bien. La cita no ha salido tan mal pese a todos los imprevistos y la muy mala organización de mi parte, me atrevo a decir que salió mejor de lo que esperaba. Aunque no esperaba nada más que destrucción y huesos rotos para ser sinceros. Mi mamá estaría muy orgullosa de lo que hice hoy.

Y yo también lo estoy. Gracias a la cita de hoy siento que estoy más que listo para mi cita del miércoles con Heather.

Comienzo a ayudar a Edward sacando los vasos, platos y cubiertos, busco un lugar para dejarlos, pero al ver que no tengo espacio para acomodarlos, los regreso a la canasta. Comer en el auto no sonaba tan mal, el problema es que el espacio que hay para poder hacer el "picnic" (que más que picnic es una simple comida en el carro) es demasiado reducido. Apenas y podemos dejar los tuppers sin que nada se caiga. Cuando nos sirvamos la comida sacaré los platos y utensilios de nuevo.

Le echo un vistazo a la canasta para mirar si hay algo más pequeño que pueda sacar y me sobresalto al sentir que algo me cubre por completo. Alzo la mirada con rapidez hacia Edward y descubro que él está poniéndome el mantel que encontré en el cuarto de mamá sobre mi cuerpo. Pestañeo, confundido. ¿Está tratando de cuidarme?

Él tiene su mirada puesta sobre el mantel, para acomodarlo sobre mí. Me quedo rígido por el acto una vez que la confusión se ha ido y cuando sus ojos se encuentran con los míos y me regala una sonrisa ladina marcando el hoyuelo en su mejilla, siento que mi alma sale de mi cuerpo.

Una perfecta confusión Donde viven las historias. Descúbrelo ahora