LA EDAD ES SÓLO UN NÚMERO

Cap 14: WE ARE BULLETPROOF: THE ETERNAL

Esa mañana, en la que despertaron abrazados y completamente desnudos, Jung Kook y Lynda, comprendieron que el cuerpo del otro, era su hogar... El lugar al que pertenecían.

Aunque tuviesen que sortear una y mil complicaciones; como la diferencia de edad, lo que significaba ser una pareja interracial, las habladurías de la gente, entre otras cosas; ambos, estaban dispuestos a ponerle el pecho a las balas y defender su amor a como diera lugar. Sabían que seguirían juntos, a pesar de todo y de todos.

***

Esa noche de pasión y de amor infinito, fue el inicio de una mágica aventura. Desde ese encuentro, Jung Kook comenzó a pasar todas las noches en el departamento de Lynda.

Las mañanas nunca más fueron iguales para ninguno de los dos. Despertar en los brazos de la persona amada, iniciar el día mirando el rostro del otro, regalarse una sonrisa matutina y unas cuantas cosas más, se volvió habitual para la pareja. La que, desde ese encuentro, nunca más quiso soltarse de la mano, ni perder tiempo, alejados.

Habían decidido ocultar su relación, ya que, si bien estaban muy convencidos de lo que sentían el uno por el otro, y seguros de que se quedarían juntos hasta que la vida se los permitiese, necesitaban tiempo para aterrizar tantas emociones.

Necesitaban tiempo para encontrar la forma de contarles, a sus familias y a sus amigos, que se encontraban en una relación y se amaban.

Querían rebelarlo de la manera más especial y tranquila posible, así que se lo tomaron con calma. No había apuros de compartirlo con el mundo, ya que ambos, eran el mundo del otro, y eso era más que suficiente.

***

Al cumplir los tres meses de ser novio de Lynda, Jung Kook decidió mentirles, por primera vez, a sus padres, diciéndoles que había encontrado un pequeño apartamento cerca del bar, en el que se iría a vivir, porque sentía que estaba en edad de independizarse. Lo cual no era verdad, porque sí, se iría a vivir a un departamento, pero no a uno cualquiera, sino que al de su nueva y secreta novia.

Casi un año estuvieron viviendo juntos, sin contarle a nadie lo de ellos, y manteniendo su amor dentro de las cuatro paredes del departamento de Lynda, el que ya, para estas alturas, era el departamento de ambos.

***

El cumpleaños de la Señora Jeon, otra vez, estaba a la vuelta de la esquina, por lo que después de una larga conversación, la pareja decidió que ese sería el momento y el lugar, en el que sus familias y amigos, se enterarían de su relación.

Muerto de miedo, Jung Kook solicitó, días antes de la celebración, una reunión familiar.

Ambos padres, su hermano mayor y su cuñada se hicieron presentes, dispuestos a escuchar lo que Kookie les quería compartir con tanta seriedad.

- Querida familia, les agradezco a cada uno, que se hayan dado el tiempo de presentarse hoy. Tengo algo muy importante que comentarles y necesitaba reunirlos a todos para ello. - dijo JK muy seriamente.

- ¿Voy a ser abuela? - preguntó un tanto asustada la Señora Jeon.

- ¡No mamá! No es eso lo que quiero decir, pero es algo parecido.

- ¿Te casaste en secreto? - preguntó Jung Hyun.

- ¡¿Por qué haría eso?! - exclamó confundido JK