𝗟𝗮 𝗵𝘂𝗺𝗮𝗻𝗮 𝗱𝗲 𝗛𝗮𝗱𝗲𝘀.

Decepción

Hades

Llegué al Olimpo topandome a Eros en la entrada del palacio.

-Hermano ya nos llegó el rumor de lo de Persefone.

¿Cómo es que esa Diosa conseguía que todos se enteraran de cosas que ella quería?

-¿Alyssa sabe?.

-Por fortuna no aún, te está esperando desde hace horas en la habitación que le dejo Hera.

Camine para entrar pero Eros me sujeto del brazo y me detuvo.

-La cagaste Hades.

-Alyssa no está enamorada de mí, la escuchaste, solo quiere sobrevivir.

-Si no te quisiera, ¿Por qué me pediría que la fleche a tí? Me negué exactamente por esto- dijo cupido molesto.

Quedé sorprendido por enterarme de eso, un nudo en la garganta me impedía hablar y mi pecho ardía de dolor, Alyssa iba a sacrificar su vida para atarse a un Dios, iba a sacrificar la oportunidad de enamorarse de un mortal solo para cumplir el capricho que tengo con ella gracias a la flecha de Eros.

Eros me soltó y yo entré hecho pedazos a ese templo.

¿Con qué cara iba a ver a mi humana ahora? Ella queriendo enamorarse de mi y yo cogiendo con otra, no es justo.

Pero la vida jamás es justa, no tenemos nada seguro y el futuro está en movimiento constante, ni las mismas Moiras pueden asegurar nada.

Entre a la habitación y la ví limpiando su rostro, cuando me escucho volteó hacia mí.

-Hades, volviste- su rostro se veía algo cansado.

-Te dije que vendría de nuevo.

-Lo se, confío en tí, por eso te esperé- confesó.

Ella era tan dulce, tan amable y atenta, me dolió no poder ser suficiente para ella.

Se levantó de la cama y se acercó a mí.

-Hades- acaricio mi rostro -gracias por cuidar de nosotras- me sonrió pero sus ojos lucian tristes.

-Es lo mínimo que podría hacer por ustedes- sonreí falsamente.

-Vamos a buscar a Melissa, Hera me dijo que ya estaba lista la cena, vamos- tomo mi mano entrelazando sus dedos con los míos.

💀💀💀

Llegamos al comedor donde la pequeña Melissa ya estaba comiendo acompañada de Hércules.

Ese escuincle no la suelta.

-Papá Hades- grito al verme y corrió hacia mí -te extrañe.

La abrace con fuerza y me aferre a la pequeña como si eso me diera la valentía necesaria para seguir con todo este desastre.

-Tambien te extrañe hija.

Zeus se atragantó al escucharme decir esa palabra y tosió con fuerza.

Me separé de ella y me senté junto a mi humana.

Ella comió en silencio y se limito a responder cuando los otros Dioses preguntaban cosas sobre ella, se veía triste, tal vez ya sepa lo de Persefone.

-¿Qué planeas hacer de tu vida, Aly?- preguntó Hera

-Quiero ser escritora.

-Si necesitas ayuda, las musas de Apolo podrían ser de utilidad- contesto Zeus.

-Gracias, lo tomaré en cuenta.

Acabando la cena salió al jardín y yo quise seguirla pero Hera me detuvo.