Lies of Love | Wangxian Omegaverse

Capitulo 1

- Despierta inútil, tenemos que irnos. - abro mis ojos de repente al escuchar el fuerte grito de mi padre, temblando ligeramente me levanto del cutre colchon, me cambio y acatando sus órdenes, entro al pequeño coche color azul oscuro en el asiento trasero, intentando a toda costa evitar su mirada. No me quiero ir, no quiero dejar a Jiang Cheng, pero tampoco puedo reprochar, simplemente no hay opción. Si mi padre dice que nos mudaremos, lo haremos, no puedo contradecirlo a menos que quiera un castigo.

Cuando el carro ya está en movimiento puedo ver de reojo a Jiang Cheng, quien tiene una mirada de culpa y arrepentimiento. No es su culpa. Fue mía por pensar que todo cambiaría, la verdad le debo mucho, gracias a él no me derrumbe más de lo que ya estoy. No logro establecer contacto visual con el hombre que conduce el coche, no me atrevo a levantar la vista en su presencia. Menos cuando estamos solos en un coche. La última vez que lo hice, jugo tanto con mis emociones amenazándome con tirar el auto por un barranco. Pero no lo hace, solo juega con mis sentimientos, el sabe cómo hacer que mis nervios se disparen con solo una mirada.

Seguir sus reglas al pie de la letra, No hablar, no levantar la mirada, no llorar cuando se me he es castigado, no reclamar, no preguntar, No hacer ruido, entre otras cosas.

Cuando conocí a Jiang Cheng pensé que cambiaría algo, o al menos eso me prometió, me dijo que encontraríamos la forma de sacarme de todo esto. Y de cierto modo no mintió, logro que dejarán de molestarme en la escuela, me protegió, pero no nos dio tiempo de escapar de mi padre, el descubrió que hable... Que Jiang Cheng sabía lo que él hacía conmigo, así que me castigo, aún no sanan las heridas de mi rostro y espalda, de todas formas, me ha obligado a maquillar las heridas y así no levantar sospechas... Incluso las heridas de mis muñecas que, aunque no las provoco el, si tenían la intención que él cree tener cada vez que me golpea. Matarme, desquitar conmigo todo el odio que le tiene a mi madre por abandonarlo. De cierta forma lo entiendo, yo también la odio por dejarme en manos de este hombre... Si escapó de este monstruo... ¿Por qué no llevarme con ella?

Llegamos al pueblo natal de mi padre en menos de lo pensado, tal vez los pensamientos sobre mi asquerosa vida me consumen más de lo que pienso.

- Sal - su voz es fría, casi como afiladas cuchillas que amenazan con clavarse en mi garganta si no hago lo que ordena. Quisiera decir que tengo la "valentía" que él no tiene para acabar con mi vida, pero la verdad es que, aunque en mis muñecas y antebrazos están las marcas que delatan mis intenciones, nunca fui capaz de hacer una lo suficientemente grande para poder acabar con este calvario. Si, tengo heridas que dejan mucho que decir sobre mi estado mental, pero si tuviera la "valentía" de matarme, si tan solo tuviera esa fuerza, la hubiera utilizado para poder escapar de esta vida y buscar algo mejor, pero no la tengo.

Acato obedientemente su orden y bajo del coche, logro levantar un poco mi rostro para ver la casa que se convertirá en mi nueva jaula de torturas. No sé por qué, pero siento que me observan, ese no es un buen augurio de lo que me espera en este lugar.

- La puerta de la mitad del pasillo, la que no tiene ventanas. Esa es tu habitación, asegúrate de poner los seguros para cuando estés en celo. - ordeno y asentí levemente tomando mi equipaje y dirigiéndome a mi habitación, debo admitir que lo de la seguridad es un alivio, así puedo esconderme durante mis celos, claro el supresor de aromas y el sedante, ayuda en gran cantidad, pero mi padre dice que un Omega debe estar encerrado en su habitación, no debe salir los alfas no pueden controlarse, incluyéndose a el mismo, múltiples veces, cuando mi celo termina logro ver las marcas de garras en la entrada, es claro que mi padre intenta entrar cuando mí aroma, que es desafortunadamente el mismo de mi madre lo atrae. Por suerte nunca ha logrado entrar a mi habitación cuando yo estoy en ese estado.

Al llegar a mi habitación me encuentro con una pequeña cama única con cobijas rojas, el cuarto tiene las paredes blancas, un pequeño armario y tocador, eso servirá para poder ocultar mis moretones. Después de dejar todo mi equipaje en su lugar tomo mis audífonos para poder perderme en el mundo de la música, se supone que mañana inicio clases en un nuevo instituto, no quiero que suceda de nuevo, Jiang Cheng ya no está para protegerme de los abusadores y realmente dudo que este instituto sea diferente a los demás. En mis cortos 16 años de edad he pasado por 3 institutos y ninguno se salvó de tener personas que no pueden dejarme la vida en paz.