- ¿A Dionisio? - Pregunto riendo el hombre de pelo largo con algunas canas - Es uno de los 12 del Olimpo, no suele ver a semidioses normales - Dijo como si fuera lo más estúpido que ha oído.
Realmente me sentí decepcionado, aunque personalmente no sentía motivación por ver a cualquier dios pero por alguna razón… al sentir la presencia de un dios me sentí… tranquilo, como cuando un padre deja a sus hijos en casa y al volver todo está en orden.
Mientras yo pensaba en eso ya estábamos llegando a las 12 cabañas.
En orden las cañadas serían:
Zeus. La número 1.
Hera. La número 2.
Poseidón. La número 3.
Demeter. La número 4.
Ares. La número 5
Atenea. La número 6
Apolo. La número 7
Artemisa. La número 8
Hefesto. La número 9
Afrodita. La número 10
Hermes. La número 11
Dionisio. La numero 12
Cada uno de esos dioses tenía su propia cabaña para sus hijos, este sistema hacia que aunque los hijos de pequeños dioses fueran reclamados aún así tuvieran que quedarse en la cabaña de Hermes.
- ¿Así que debo ir a la cabaña de Hermes? - Pregunté desdeñoso.
- ¿Sabes quién es tu padre piadoso? - Pregunto el a lo que negué - Entonces si - Dijo finalmente.
Tsk.
Chiron se fue dejándome a la entrada de la cabaña.
- Veamos - Dije entrando en la cabaña.
Adentro la cabaña había mucha gente y todos estaban amontonados por el poco espacio que había para tanta gente.
Mire desdeñoso a todos eso niños mientras caminaba entre ellos.
Cuando vi un espacio libre donde deje una mochila y me senté a lado de ella mientras cerraba los ojos.
***
La calma del campo era usual, ningún alboroto, nadie molestando y ninguna persona que me pudiera hacer daño de alguna manera.
Sentado afuera de mi casa miraba los cultivos mientras el viento me daba en el rostro de manera agradable.
De pronto sentí algo… un sensación horrible y vi una luz en la oscura noche.
Suspire irritado mientras tomaba al azada.
- ¿Que quieren ahora? - Pregunté mientras mis ojos brillaban molestos.
- Hemos estado siguiendo a un monstruo durante toda la noche y llegamos aqui - Dijo un hombre que creo vive en la cuidad a unas millas de aquí.
- ¿Y? - Pregunté tranquilo - ¿Quieren pasar por aquí? - Pregunté fríamente.
Al notar mi tono y el arma en mi mano el hombre pareció dudar y retrocedio.
- El sacerdote no tomara bien tu intervención en este asunto, la diosa Atenea quiere a ese monstruo muerto - Dijo como amenza.
- Me da igual - Dije bostezando - Ya es tarde, váyanse si no quieren ver a Hades - Amence mientras la luz de la luna se reflejaba en el filo de la azada y aunque le diga así es tan grande que podría ser considerada una guadaña.
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Resurrección en Percy Jackson
FanfictionLuego de una vida sin suerte supongo que esto era lo menos que podía tener, eso pensé hasta que mi madre me contó mi origen semidivino. ¿Acaso no puedo tener una vida normal? Pero... por lo menos no me aburriré. La saga Percy Jackson no me pertenece.
