Resurrección en Percy Jackson

El Hijo Del Caos

- ¿Estás seguro, Grover? - Decía Thalia.

- Eh... bastante seguro. Al noventa y nueve por ciento. Bueno, al ochenta y cinco - Dijo con seguridad. Un ochenta y cinco por ciento es muy bueno.

- ¿Y lo has hecho con unas simples bellotas? - Preguntó Bianca con incredulidad.

 Grover pareció ofendido. 

- Es un conjuro de rastreo consagrado por la tradición. Y bueno, estoy bastante seguro de haberlo hecho bien - Se defendió rápidamente.

- Washington está a unos cien kilómetros - Dijo Bianca - Nico y yo... - Frunció el entrecejo -  Vivíamos allí. ¡Qué... qué extraño! Se me había olvidado - Dijo un poco desconcertada por haber olvidado algo así. 

- Esto no me gusta - Murmuró Zoé - Deberíamos dirigirnos directamente al oeste. La profecía decía al oeste - Remarco con precipitación.

- Como si tu destreza para seguir el rastro fuese mejor, ¿no? - Espeto Thalia un poco molesta. Zoé dio un paso hacia ella quedando frente a frente. 

- ¿Cómo osas poner en duda mi destreza, bellaca? ¡No tienes ni idea de lo que es una cazadora! - Aseguro Zoé con irá en su voz.

- ¿Bellaca? ¿Me llamas bellaca? ¿Qué narices significa eso? - Pregunto Thalia aunque ya estaba bastante molesta.

 "Si supiera que le esta diciendo que no tiene moral en absoluto se enojaría mucho" Pensé un poco gracioso al verlas pelear.

- Thalia, Zoé, dejen de pelear como niños - Dije ansioso - Es una perdida del tiempo discutir ahora - Expuse con falsa calma aunque le tenia un poco de miedo a Zoé que me mira con molestia pero solo pudo suspirar.

- Grover tiene razón, Washington es nuestra mejor opción - Dijo Bianca apoyando la idea de Grover - Es mucho mejor que vagar por el mundo sin saber a donde ir - Murmuro sin que nadie la escuchara.

Zoé no parecía convencida, pero asintió a regañadientes. 

- Muy bien. En marcha - Dijo finalmente Zoé.

- Vas a conseguir que nos detengan por empeñarte en conducir - Se quejo Thalia - Yo aparento más que tú los dieciséis - Dijo con razón ya que Zoé no parecía superar los 14.

- Quizá - Respondió Zoé - Pero yo llevo conduciendo automóviles desde que los inventaron. Vamos.

***

Zoé manejaba con prisa adelantando a la mayoría de autos que pueda, diría que es imprudente pero estaba aburrido así que mientras más rápido mejor.

- ¿Cuánto falta? - Pregunte impaciente a Thalia ya que no sabia si Zoé me respondería algo tan trivial.

La niña no se había querido sentar delante o mejor dicho, no llego a sentarse delante ya que Bianca le gano la carrera.

- Depende de si quieres ir caminando - Respondió mirándome con ojos indiferentes.

- Si alguien te oyera hablarme así podria pensar que me odias - Dije riendo aunque ella mostro indiferencia.

- Cuando nos conocimos posiblemente fuiste la persona que más quise, eso duro hasta que me desperté - murmuro - Pero los vi a los dos, a ti y Annabeth, parecían una pareja - dijo mirándome con fijeza - Eso me molesto un poco pero nada en comparación a tu reacción cuando Annabeth desapareció, como si nada hubiera pasado - Espeto con rencor.

- Porque no paso nada, Annabeth volverá cuando terminemos esto y no volveré a confiarme - Dije tranquilo - Aunque me alegra que seas amiga de Annie - Dije acariciando su cabello con alergia haciendo que ella me mirase un poco avergonzada.