Un demonio bastante nervioso se encontraba caminando por los pasillos de la gran fortaleza mientras observaba todo el lugar, miro hacía abajo y vio a kokushibo sentado en el lugar de siempre mientras pensaba, la luna superior seis había muerto al parecer por un pilar, a muzan pareció no importarle mucho, pero ahora estaba presionando mucho más para extingirlos, akaza suspiró con pesadez y se paró enfrente de la habitación de senjuro, no tenía idea de que era lo que iba a pasar, pero ya había tomado la decisión en primer lugar
Abrió la puerta y se asomó levemente para ver a senjuro quién estaba acostado en la cama limpiándose las cristalinas lágrimas que salían de sus ojos, akaza frunció el ceño mientras se golpeaba la frente en la puerta, no podía verlo una noche más así, le dolía más a él en realidad, entro con una sonrisa a la habitación y se acercó a él viéndo como intentaba ocultar el pañuelo
Akaza-san - le dijo senjuro mientras se levantaba de la cama para mirarlo con una sonrisa - ya estoy listo para entrenar - mencionó mientras se acomodaba la ropa un poco desanimado, él en realidad no quería hacerlo, pero se estaba obligándo así mismo
Akaza lo miro con una expresión sería y lo tomo de la cintura llamando su atención para cargarlo en sus brazos mientras esté lo miraba con curiosidad - no iremos a entrenar - contesto akaza mientras salia de la fortaleza para comenzar a caminar junto a él
¿A donde vamos? - pregunto senjuro un poco confundido mientras veía como akaza daba grandes saltos para llegar a algún lugar
El mayor no le contesto ni volteó a verlo solo siguió saltando de un lado a otro mientras lo ignoraba, senjuro suspiro entristecido y se hundió en su pecho mientras se dejaba llevar a quien sabe dónde, era extraño cuando akaza se portaba de una manera tan sería, casí siempre era porque iba a hacer algo muy estúpido y peligroso
Empezó a ver hacía todas partes y después de un rato empezó a reconocer el lugar, se sintió inquieto así que comenzó a moverse para ver bien, estaban cerca de un pueblo y creía saber de qué pueblo se trataba, miro la expresión seria de akaza y sonrió comenzando a llorar, no pensó nunca que akaza le haría caso y lo llevaría con su hermano, se estaba emocionando demasiado entre más se acercaban, se abrazo a akaza y empezó a respirar con mucha dificultad, moría de nervios, no sabía que encontraría en la finca o sí podría quedarse, pero ya quería llegar a ella, estaba tan feliz que moriría de un infarto en el lugar, cada vez estaba más cerca de su casa y eso le emocionaba, ya quería llegar y ver cómo estaban todos
Akaza callo en una barda donde empezó a caminar con senjuro emocionado en sus brazos, volteó a verlo y frunció el ceño arrepentido, tenía que hacer algo antes de llevarlo a su casa - antes de que veas a tu hermano tengo que mostrarte algo - le murmuró mientras senjuro volteaba a verlo con una sonrisa
Okay - le respondió aceptado su condición, no era momento de ponerse ambicioso
Akaza dio un gran salto para cambiar la dirección y calleron en un gran jardín, senjuro cerró lo ojos por la brusquedad, pero en cuánto los abrió vio una fila de tumbas en ese lugar, miró asustado a akaza quien sólo camino unos cuantos pasos más y lo bajo enfrente de una retrocediendo para dejarlo asimilarlo
Senjuro lo miro con miedo y confusión mientras intentaba comprender su acción, sin embargo, lo hizo en cuanto volteó su rostro para mirar la lápida donde decía que allí llacía su padre shinjuro, calló de rodillas frente a su tumba y comenzó a tocarla mientras negaba esa realidad, su padre no podría estar muerto allí, no de esa forma, como era posible que eso estuviera pasando, comenzó a llorar mientras gritaba en su tumba agarrando la tierra que estaba en está, iba con la esperanza de encontrar a su padre esperándolo con una sonrisa, pero encontrar eso lo destruyó totalmente
