22°

11.9K 1K 1.2K
                                    

Algunas cosas duelen toda la vida, no se pueden controlar o predecir, pueden ser solo culpa de un demonio ambicioso que solo juega contigo, o también pueden ser los últimos deseos de un corazón susurrandole al amor, sin embargo, sin importar cual de las dos razones sea correcta, dichas cosas son verdaderas y le doleran a tu alma, aunque tu mente ni las recuerde

Nugh - se quejó un pequeño cuerpo mientras se removia en una cama totalmente fría, sus huesos dolían mientras se movía sentándose en el lugar, sentía húmedos los ojos así que limpio las lágrimas que habían en ellos, aunque no sabía porque su rostro estaba llorando, estaba muy confundido en ese momento - ¿Mi habitación? - murmuró mientras se tocaba la cabeza quejándose de que le dolía demasiado, era extraño que le doliera tanto, parecía estar latiendo, se levantó tambaleándose y comenzó a mirar a todas partes mientras miraba - ¿Hermano? ¿Padre? - pregunto mientras empezaba a buscarlos por la casa, todo se veía oscuro así que tenía que ir prendiendo las luces, esa casa parecía estar abandonada, a pesar de que estaba totalmente limpia, como sí alguien la hubiera limpiado

Sin embargo, en ese momento, en ese instante en su mente, senjuro rengoku no recordaba absolutamente nada de lo ocurrido, solo sabía que se levantó en su cama extrañamente y lo que había pasado antes de eso era borroso

Q-que problema - tartamudeo mientras llegaba a la cocina y se disponía a prepararse un té para el dolor de cabeza, tenía que pensar y tratar de recordar porque se encontraba solo en casa, donde estaba su hermano y su padre, empezaba a sentir mucho miedo de ese lugar, aunque no tenía porque hacerlo

Se volteó con el té en la mano y miró la mesa quedandose confundido - ¿Y eso? - murmuró mientras veía un plato de estofado en aquella mesa, se acercó a él y miró a todos lados, pensó que tal vez kyojuro lo había dejado para él, sin embargo, nunca había visto ese tipo de comida, aunque se le hacía conocida y era extraño, su estómago gruñó hambriento y tomo de su té dispuesto a comenzar a comer, tomo una gran cucharada que soplo para enviarlo y lo metió a su boca sintiendo su explosivo sabor - ¿Qué? - susurró al mismo tiempo que sus ojos comenzaban a llenarse de cristalinas lágrimas mientras mascaba, se limpió las que corrían por sus mejillas y las miró, no sabía porque lloraba mientras comía aquella comida, pero sabía sumamente deliciosa, era como sí ya la hubiera comido antes con alguien más, sin embargo, no lograba recordarlo

Simplemente dejo que sus lágrimas calleran mientras comía con mucha tristeza aquella comida, no entendía muy bien cuál era su dolor, pero el estofado era tan delicioso que no podía dejar de comerlo, enserio tenías muchas ganas de recordar porque, senjuro en su amnesia no sabía que esa era la primera comida que akaza había aprendido a cocinar para él mientras estaba secuestrado, no podía recordar porque la amaba tanto, porque ese fue el primer acto de amor que hizo el demonio con él y aún así su mente no lo recordaba, para senjuro solo era una comida triste o la inmensa soledad que lo rodeaba

Terminó de comer y agradeció por la comida mientras dejaba el plato en el lavabo, suspiro entristecido por no entender la situación y alzó su mirada, no tenía una buena sensación en el pecho, era como sí tuviera un mal presentimiento

Escucho que tocaron a su puerta y miró curiosamente mientras comenzaba a caminar hacía ella, sintió un poco de curiosidad, podría ser alguien de su familia, pero hubieran entrado como normalmente lo harían, no tenía caso que tocaran la puerta, al final suspiro sin pensarlo tanto y comenzó a caminar hacía ella, quería descubrir quién la tocaba, llegó y con una sonrisa abrió de golpe - ¿Sí? - contesto viendo cómo los rostros de los cazadores se ponían negros de miedo

¿Pasa algo? - pregunto con curiosidad mientras empezaba a sospechar que la situación era más extraña de lo que pensaba

¿Rengoku senjuro? - preguntaron ambos cazadores a la vez para asegurarse de que estuvieran hablando con la persona que imaginaban

Demonios de media noche°Where stories live. Discover now