#8 + aviso importante

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Vio cómo su hermano mayor tocaba la puerta principal de la casa de al lado con un poco de insistencia. Uno pensaría que era muy obvio que nadie le respondería a la puerta, ¿quién se despertaba a las ocho de la mañana en vacaciones? Tal vez todos dirían que nadie, pero Kel sabía a la perfección que sólo Hero y Mari se despertarían a esa hora sin problemas, es decir, sólo la gente responsable se despertaba a esa hora.

La pregunta era qué hacía él despierto a esa hora si Kel no era una persona para nada mañanera, era obvio que no querría despertarse tan temprano por la mañana en vacaciones de verano. Pues la respuesta era mucho más obvia.

Ayer en la noche, Hero había estado muy preocupado. Mari le había llamado al borde del llanto que cancelaran la reservación del nuevo restaurante elegante que a Kel se le dificultaba en recordar su nombre al estar en francés. El Alfa, que ya había estado bien arreglado y con traje, se preocupó al no haber recibido más respuestas por parte de su novia. No obstante, a palabras de Hero, decidió que lo mejor era esperar hasta que se calmaran un poco las cosas; o sea, a la mañana siguiente.

Kel no tenía nada que ver en esta situación, pero el Omega no podía evitar sentirse preocupado por igual; y no sólo por Mari, sino también por su mejor amigo.

Estaba consciente que él no era el ser más inteligente, pero si algo tenía Kel era que su intuición rara vez fallaba, más que nada cuando se trataba de sus amigos. Tenía un presentimiento de que Sunny también estaba en problemas.

—¿Crees que se hayan peleado? —observó con ojos preocupados a su hermano mayor. Eran muy inusuales las peleas entre Sunny y Mari; no obstante, solían ser muy intensas. Uno de los dos siempre terminaba llorando y no se dirigían la palabra por todo un día.

—Me temo que sí —respondió el más alto con un suspiro—. Pero espero estar equivocado.

La puerta se abrió después de un par de minutos. Mari apareció recién arreglada con sus típicos atuendos con faldas largas; parecía que ya llevaba un tiempo despierta. No obstante, su rostro expresaba sentimientos que Kel no podía descifrar. A veces se lamentaba en no ser tan observador como Hero.

«Sí se pelearon», concluyó Kel en su mente. Hasta alguien tan denso como él pudo darse cuenta al instante. El ambiente de la casa se sentía muy pesada y eso de que ninguno de los dos hermanos había puesto un pie en ella. A pesar de que Kel tenía limitadas las visitas debido al padre de sus amigos, aun así en ningún momento se había sentido que no era bienvenido a su casa; pero ese no era el caso de ahora. 

—Buenos días, chicos —saludó Mari con una sonrisa claramente forzada. A Kel no le parecía para nada correcto ver una sonrisa no genuina en la novia de su hermano mayor. La más baja siempre fue alguien muy risueña y bromista, ver ese tipo de expresiones en su rostro se sentía muy mal.

—¡Hola, Mari! —intentó saludar el Omega con su típico entusiasmo. No obstante, algo en él lo sintió muy incorrecto. Se contuvo en no mostrar una mueca de desagrado cuando escuchó el tono de su propia voz.

«Bien hecho, Quetzalli», se regañó a él mismo en su mente, utilizando su segundo nombre; una costumbre que agarró de Hero y su madre.

—Buenos días, Mari —devolvió el saludo su hermano mayor.

—¿Qué les trae por aquí? —Los vio con curiosidad—. Son como las ocho de la mañana. Kel, creí que te despertabas casi a la una.

—Ah bueno... —intentó hablar, pero no le salía ni una otra palabra.

—¿Podemos hablar? —interrumpió su hermano con seriedad.

La expresión de Mari cambió por un instante, pero se compuso con mucha rapidez. Kel vio la acción sin entender mucho. ¿Se habrían peleado así de mal? Ahora el Omega estaba más que preocupado.

☀️𝑰𝒕 𝒂𝒍𝒍 𝒔𝒕𝒂𝒓𝒆𝒅 𝒘𝒊𝒕𝒉 𝑴𝒆𝒘𝒐🌻 || 𝐎𝐦𝐞𝐠𝐚𝐯𝐞𝐫𝐬𝐞 Where stories live. Discover now