Capítulo XXIII

405 28 3
                                    

CAPÍTULO XXIII: “Como que salio, para donde?”

AUTORÍA: Regina

()()()()()()()()()()()()()()()()

Betty y Armando se separaron bruscamente, pero sin soltarse.

A: Ah! Valencia, que hace usted aquí, volvió a ser accionista y yo no me había enterado?

D: No, ni Dios permita volver a este circo, vengo por otra persona.

A: Y a quien representa Valencia?

D: A mis hermanas, por fin las convencí para que vendan sus acciones

A: Bien, bien se lo comunicare a mi padre.

D: Prefiere que le hable yo, sabe que tengo mayor influencia.

A (sonrió) : Inténtelo, Daniel, yo no tengo problema, le podría decir que por mucho tiempo fue así, pero ahora le digo que no necesito de su influencia, mi padre sabe que hice y quien soy yo.

B: Vamos amor, por favor, se hace tarde.

A (la abraza mas fuerte y le da un beso en el pelo) : Disculpa Daniel, pero el deber me llama.

B: Buenas tarde doctor Valencia.

D: Disfruten mientras puedan (Mirando a Betty)... A usted no la entiendo, de verdad.

A: Que es lo que no entiendes de mi mujer?

D: No entiendo como “tu novia” todavía esta contigo.

A: Mira Daniel Valencia, una vez me contuve, pero si continuas molestando a “mi mujer”, te lo juro, te juro que te las veras conmigo.

B (reteniéndolo del brazo) : Amor, vamos, no vale la pena.

Sin decir más se fueron para el ascensor. Armando refunfuñando y Betty tratando de calmarlo... Ya en el restaurante.

A: Va a llegar un día en que voy a despedazar a ese idiota.

B: Amor, por favor, cálmate ya.

A: Es que no puedo calmarme, no soporto que ese tipejo te mire, te hable, se te insinúe.

B: Te parece a ti mi amor? Eso no es así, ese tipo solo lo hace por molestarte.

A: Betty! Betty! Te olvidas del episodio del restaurante? Ah? Te olvidas como ese tipo quería llevarte con él, quien sabe con que propósito (Betty enrojeció de la ira y además el recuerdo de la proposición le provoco nauseas)... Que te sucede, amor, te sientes mal?

B: Ya cariño me siento bien, solo que recordar “eso” me provoca nauseas.

A (mirándola extrañado) : Porque? Por que te provoca nauseas? Sabes? Nunca me contaste… anda cielo, cuéntame que paso en esa comida.

B: No mi amor, dejémoslo quieres?

A: No. Pues no, no quiero, Betty cuéntame, estamos a unos días de casarnos y no debe haber ningún secreto entre nosotros.

B: No, cariño. Pero dime, porque querías salir hoy?

A: Beatriz, no me eludas…

B: No amor. Cómo piensas?

A: Betty, es evidente… mira yo te prometo no enfadarme, no hacer nada que te pueda disgustar o que tu no quieras, es mas si me cuentas te prometo… te prometo no hacer nada.

B (advirtiéndole) : Bueno pero creo que va a arruinar tu día…

A: Tú lo compones, anda amor, cuéntame.

CONVERSACIONES Donde viven las historias. Descúbrelo ahora