En un giro inesperado, las vidas de Alysa McCartney y Max Cooper se cruzaron, sin saber que no sería una simple coincidencia.
La amistad entre ellos se fortaleció, hasta que ambos tuvieron sentimientos más profundos.
Sin embargo, alguien se enfocó e...
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Ay, nunca me había sentido tan cómoda...
Me acurruqué un poco en el pecho del oficial. Le vi de reojo el rostro y no estaba extrañado, se veía tranquilo. Así que me despreocupé y respiré hondo.
Hasta que...
¿Y ese olor a perfume femenino costoso? No, no puedo ser yo, mis perfumes son baratos, —Pero son muy buenos, tampoco crean que tengo mal gusto—. Aunque este aroma tiene un parecido a los perfumes de la marcas reconocidas a nivel mundial...
Oh, ¡Claro! ¿Cómo no lo pensé antes? De seguro no soy la primera mujer que carga. Ya es una costumbre para él. Ni tampoco soy la única en el día.
... Fue lindo mientras duró. Pero tengo DIGNIDAD.
—Oye, oye, ¡Bájame!
— [Pero... ¿Por qué?] Oh, bueno. Okey... —Me soltó con delicadeza, todo un caballero. Pero de seguro ya es algo que ha hecho muchas veces...
—Entonces... ¿Ya no estás cansada?
—Oh, creí que te habías dado cuenta antes que yo...
—Eehh... No, esta vez no. Jaja...
—¡LLEGUÉ! UFF...
— ¿Dónde está la bolsa? —Preguntó el oficial rubio— ¿Por qué vienes sin ella? No me digas que perdiste al delincuente.
—Yo... Puedo... Explicarlo... —Habla de forma pausada, se ve cansado y sin aire.
— ¡LE DIRÉ SOBRE ESTO A LA JEFA! No puedo creer que...
— ¡Hey, ya cállate! —Lo interrumpí— Tiene algo que decir. Tranquilo, inhala y exhala, eso te ayudará a recuperar aire.
—Gracias... Déjenme contarles.
— ¿NUNCA TE CANSAS DE CORRER? ¡Ven aquí!
— ¡DÉJAME, TENGO HAMBRE!
— ¿COMES CARTERAS O QUÉ?
— ¡NO, PIENSO VENDER ESTO Y COMPRAR COMIDA!
Mientras corríamos, hablábamos a larga distancia. Fue una conversación épica, pero muy agotadora.
— ¿Y qué harás con lo que contiene la bolsa?
—No sé. Posiblemente también lo venda, parece ser algo caro, ¡Pesa mucho!
Corrí demasiado, sentí que había recorrido medio continente. Luego de un rato, se detuvo y lo alcancé.
Se paró frente a un puente, al verme cerca se lanzó.
