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¿Cómo los guía la Divina Providencia?

Me ha contado la historia desde el principio. Desde Abrahán, y así me dijo.

No me voy a detener en su vida que lo hemos hecho en otros momentos, me voy a detener en el pacto que hice con él de formar un pueblo.

El pueblo de la fe.

Abrahán, era un hombre acostumbrado a las costumbres de su tiempo, donde no tenían Dios, y los dioses que tenían eran falsos, eran hechos por las manos de los hombres. Los hombres desde el principio, como los misterios escapaban de su entendimiento, se inventaban a un dios a su imagen, eran dioses copiados de los fenómenos naturales de la naturaleza, que ellos no podían dominarlos ni vencerlos ni comprenderlos, y por eso los llamaban dioses.

Porque sin saberlo, el hombre se siente de alguna manera atraído por alguien superior a él, y los fenómenos que no comprendían ni podía dominar, los llamaban dioses, y en ellos veían a dioses que de alguna manera los asustaban y querían hacerle daño. Como las tormentas, los volcanes, los animales furiosos, las serpientes venenosas.

Desde el principio, entre los hombres y en todos los pueblos, ha existido el poder, en forma de fuerza, de astucia o de saber. El poder es un dios muy poderoso. Y el poder era el que fabricaba el dios, y hacia un dios a su medida a quien poder dominar, y con el dominaba también a la gente a la que engañaba. Y hacían pactos con él, y le ofrecían sacrificios, diciendo que así aplacaban su ira o su sed de venganza.

Eran dioses malos.

(A imagen del poder que lo creaba.) Castigadores, sedientos de placer y de todas las abominaciones que le inventaban los hombres.

En ese tiempo y en ese ambiente vivió Abrahán.

En aquellos tiempos, lo mismo que en estos, los hombres compraban, vendían, intercambiaban cosas, y para ello hacían un pacto.

Lo mismo que ahora vais al notario, antes hacían pactos entre ellos con lo que tenían.

Y Dios quiso hacer un pacto con Abrahán al modo de los hombres para que pudiera entender sus deseos. Abrahán veía los sacrificios que las tribus vecinas hacían a sus dioses, sacrificaban para aplacar a su dios a niños a doncellas vírgenes, y creían con esos sacrificios aplacar la ira de los dioses para que no fueran destruidos.

Pero pasa lo mismo que siempre. Ellos buscaban victimas inocentes, ellos nunca se sacrificaban ni sacrificaban a los suyos.

Igual hace ahora el terror, el dios que los manda se esconde, y manda a las víctimas mas pobres, a las que puede engañar, las busca entre los pobres, ignorantes y desesperados de la tierra, y los va preparando para inmolarse por los demás, les promete un paraíso de dichas que aquí no pueden gozar, (que seguro que en el cielo lo tendrán, porque son victimas engañadas sin saber la verdad.) Y así alcanzar un premio, que él que los manda no quiere alcanzar.

Ahora en nuestro tiempo, los dioses han cambiado. Ahora tenemos multitud de dioses falsos. Los dioses de ahora son distintos, pero muy parecidos. Los dioses, siempre los maneja el poder.

Un salmo esta mañana me lo recordaba, dice así, es el salmo 2º.

¿Por qué se amotinan las naciones y los pueblos planean un fracaso?

Se alían los reyes de la tierra, los príncipes conspiran contra el Señor y contra su Mesías.

"Rompamos sus coyundas sacudamos su yugo."

LA LIBERTAD SALIO DE SU PRISIÓNWhere stories live. Discover now