❄️ Capítulo cinco.

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Un recuerdo aparece y se siente como aquel Jeon Jungkook de apenas dieciséis años, el cual sentía un fuerte enamoramiento por Taehyung que no sabía cómo confesar, por tal motivo, en su tiempo prefería observarlo a la distancia; mirar el movimiento de sus espesas pestañas con cada parpadeo suave, su expresivo rostro denotando timidez, esas mejillas en un tono rosado natural, los rizos castaños luciendo dorados cada que los rayos del sol pegan directo a él, aquellos pucheros inconscientes y esas sonrisas que sin duda alguna hacían que su corazón diera un vuelco, pues Kim Taehyung le gustaba, por dios que le gustaba mucho.

Asimismo, años después, se encuentra ahí, igual que los años pasados, observándo a Taehyung como si fuese el único en aquel lugar, y no lo entiende. Quizás sea porque... ¡No, por supuesto que no!

─¡Tierra llamando a Jungkook! ─Momo sacude su mano frente al rostro de su hermano, consiguiendo su atención─. ¡Aigo! ¿Dime a quién miras tanto, ah? Desde que llegaste de la mano de aquel pequeño bebé actúas raro. No me dijiste quién es.

─Noona, ¿tú recuerdas a Kim Taehyung?

Momo asiente con rapidez, como olvidarlo, el primer novio y amor de su hermano menor.

─Claro, ese chiquillo te traía loco en la preparatoria, ¿Qué hay con él?

─Pues ese chico, es el que está por allá ─eleva la barbilla y lo señala─. Y el bebé, es su hijo. Taehyung y yo nos reencontramos y, lo invité a salir. ¿Qué piensas?

─¡Pienso que es genial! ¡Dios, que bonito que es Tae! Sigue siendo ese chico precioso de siempre ─confiesa Momo, con su mirada hacia el ventanal dónde Taehyung se encuentra.

─Lo es, y eso me pone tan nervioso. Ha pasado tanto tiempo.

─Entiendo, pero ¡hey, solo déjate llevar! ¿De acuerdo? Conversen de lo que ha sido de ustedes estos años en los que no se han visto, expongan sus gustos, sus pasiones; con suerte se lleven una sorpresa y se den cuenta que siguen siendo los mismos de hace unos años atrás─. con cariño, acaricia uno de los brazos de Jungkook, y este le escucha con atención─. Solo tranquilo.

Jungkook desvía la mirada y se percata que Taehyung, en ese preciso momento, le mira de vuelta, los chicos por instinto apartan su mirada con timidez sin embargo no pasa mucho para que sus orbes se vuelvan a buscar, pues de antemano saben que los ojos de Jungkook siempre están en Taehyung, y los de Taehyung en Jungkook. Eso no ha cambiado en lo absoluto.

─¿Por qué me miras así? ─pregunta Jungkook después de unos segundos, pues la mirada que Momo tiene hacia su persona es tan... extraña.

─¿Sabes? Echaba de menos esa mirada, esa sonrisa. Tus ojos brillan Jungkookie, te ves ilusionado, entusiasmado. Y si es Taehyung quien provoca eso en ti, hazte un favor, no le alejes de tu lado.

Jungkook desciende su cabeza y un atisbo de sonrisa aparece, es gracioso que su rostro se sienta tibio, seguramente está sonrojado hasta las orejas, y si es honesto, no desea mirar a Momo a los ojos y evidenciar que cada palabra saliente de su boca no es para nada una mentira.

No pasa mucho para que Haneul, de la mano de Jaemin lleguen hacia donde los mayores se encuentran. Sus miradas lucen cómplices y esos balbuceos entre sí les parecen curiosos, tanto a Momo como a Jungkook, sin embargo son niños solamente, no estarían tramando algo, ¿cierto?

─¿Cómo les fue con Santa, amor? ─Jungkook se coloca en cuclillas, extendiendo sus brazos para que Haneul enrede los suyos en su cuello y así fundirse en un abrazo, mientras que Jaemin yace de pie a unos escasos metros, balanceando su cuerpito de adelante hacia atrás, tarareando Jingle bell rock, la cual resuena en el lugar.

A love for Christmas | kvWhere stories live. Discover now