el circo - saioma

¿jefe? 3

Tsumugi: ¡Señor!

Otro sábado había llegado y con el otro espectáculo que hacer, pero algo era diferente.

Tsumugi trato de advertirle a su jefe toda la semana pero él parecía estar completamente perdido, pensando en todo menos en lo que debería y siempre tenía que ver con la persona que ella ya empezaba a considerar una molestia.

Despertaba diciendo "¿Cómo hago miserable a Shuichi hoy?" En el desayuno "¿Que nombre ridículo le pondré está vez?" En el viaje al circo "¿Que haremos juntos esta vez?" Y ciertamente ya era frustrante.

Un evento sin precedentes se acercaba y su jefe lo único en lo que pensaba era en Shuichi y así había sido desde siempre... Solo que ahora era más constante.

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Hace unos meses, en el día de la entrevista.

Tsumugi: ¡Esto es inaudito! ¡Mira como lo dejaron!

Tsumugi señaló a Ouma quien seguía cubierto por esa masa rosada y no se veía nada contento.

Byakuya: ya fueron reportados

Tsumugi: ¡No es suficiente!

Pero Ouma ni siquiera los escuchaba, solo miraba su mano pegajosa con curiosidad y duda, conocía ese truco, lo había usado antes pero nunca en el circo, la pregunta era "¿Como ellos lo conocían?"

A mitad de la discusión había llegado Kaito con las cintas de seguridad que se le habían pedido para reproducirlas y ver qué demonios había pasado dentro de ese armario.

Las cintas mostraron a los tres chicos asustados pensando en un plan y ahí fue cuando él lo noto, Kaede siendo la líder que los guiaba, Himiko era la que conocía el truco y Shuichi el que sabía que elementos podrían usar para replicarlo, no solamente era un gran trabajo en equipo, sino un potencial enorme.

Y aunque no lo supiera, muy dentro de él, todavía estaba esa fría pero dulce sensación, aquella sensación que había sentido cuando le dió la mano Shuichi hace tanto tiempo y quería verlo de nuevo.

Kokichi: contratados

Tsumugi y Byakuya: ¿Eh?

Kokichi: quiero que vayan a contratarlos, ahora

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Actualidad.

Kokichi: ¡Suici!

Shuichi había llegado con todo lo que sabía que su jefe le iba a pedir: la capa, el sombrero, una bebida y un cepillo, el señor Ouma odiaba como lo peinaban así que el mismo se cambiaba el peinado a última hora, de nuevo, Shuichi había hecho un trabajo excelente, pero claro que sí jefe no se lo reconocería tan fácil.

Kokichi: nada mal, pero llegaste 0,34 milisegundos más tarde de lo esperado

Ante esto Shuichi sonrió y tomo la capa para colocarla en los hombros de Ouma y comenzar a sujetarla al traje.

Él ya sabía que esos "regaños" nunca iban en serio, su jefe parecía ser incapaz de felicitar a alguien que no formará parte de los miembros originales de DICE, pero eso no significaba que muy dentro de él no valore el trabajo del resto de su equipo, eso era lo que hacía a Shuichi tan buen acompañante para él, su ingenio y facilidad para adaptarse a sus locuras, simplemente era lo que siempre había pedido.

Shuichi: ¿Listo para el show de hoy? - pregunto mientras acomodaba su cabello y la capa

Kokichi: siempre estoy listo, el público me adora, nada puede salir mal

Shuichi: eso es impresionante ¿De verdad no le importa?

Kokichi: ¿Por qué debería? Es lo mismo de siempre

Shuichi:... Supongo... Aunque yo si estoy un poco asustado...

Kokichi: tú nunca te asustas por un espectáculo... ¿Hay algo que no sepa y tú sí?

Shuichi: ¿¡N-No lo sabe!?

En ese momento Ouma volteó a ver a su acompañante con una ceja levantada.

Shuichi: hoy viene Celestia Ludenberg...

Kokichi: ¿¡Eh!?

Shuichi: viene a puntuar el show para saber si su club lo usa como entretenimiento para la celebración del aniversario de su club

Kokichi: ¿¡Por qué nadie me lo dijo!?

Shuichi: ¡Todo el equipo se lo dijo!... Cómo diez veces en toda la semana
...

Kokichi: oh... Quizás debería ignorar menos a la gente...

Kokichi puso su mano en su barbilla y comenzó a pensar, después salió del camerino junto a Shuichi y comenzó a soltar distintas órdenes a distintas personas.

Kokichi: Miu, Souda, quiero que den una última revisión a los sistemas de la parte baja del escenario, Kaito, Gonta, vigilen a Celestia, Kaede apresura a DICE que ya casi van a salir, Himiko...

Miro por un momento a Himiko quien esperaba ansiosa su instrucción pero su sonrisa desapareció cuando escucho lo que su jefe le dijo.

Kokichi: tú mantente lejos del escenario... - luego miro a Shuichi y sonrió - y tú, mantente cerca de mí

Estaba a punto de salir cuando Tsumugi se puso enfrente ahora dispuesta a que finalmente la escucharán.

Tsumugi: ¡SEÑOR!

Kokichi: Tranquila, yo me encargo de Celestita

Shuichi: es Celestia, señor

Kokichi: como se llame

Tsumugi:... Cómo... ¿¡Cómo sabes!?

Kokichi: querida Tsugumi

Shuichi: es Tsumugi, señor

Kokichi: tú crees que nunca te escucho, pero siempre lo hago

Esto hizo que Shuichi rodará los ojos mientras su jefe salía al escenario, después se acercó a tsumugi quien se veía confundida y le susurró.

Shuichi: yo se lo dije

Tsumugi:... Sí, me lo imaginaba

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Ella quería ver el show pero tenía que cumplir la única orden que su jefe le había dado, ciertamente, si era complicado...

Mientras él se maravillaba con su nuevo compañero, yendo y haciendo aventuras, ella se quedaba ayudando en todo lo que podía, pero siempre a la sombra y quizás... Eso era lo mejor.

Cada vez que destacaba, era por algo malo, porque rompió algo, alguien se enojo con ella o por ser... Inútil.

Ella era una gran fanática desde mucho antes de lo que cualquiera pudiera imaginar, conocía todos los trucos, sabía todos los pasos que se habían utilizado y admiraba más que nadie a quien era ahora su jefe.

Pero eso no era lo suficiente y nunca lo sería, solo quería sentirse útil, solo quería ser como su ídolo algún día.

Algún día.