──── camila simone ocupa un segundo lugar en la vida de marcos; peleas, amor incondicional, idas y vueltas; camila quiere alejarse de marcos pero él quiere hacer lo que sea por retenerla.
──── (marcos rojo fanfic)
──── real life; social media
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CAPÍTULO VEINTINUEVE | VOLVER A EMPEZAR
Miami, United States. OCT 2019
— No feli, eso no — Le digo a mi hija que se llevaba un lego a la boca.
Nos instalamos en un lindo departamento en el centro de Miami. Nicolás tomó la decisión de terminar la relación hace poquito más de un mes. Me caigo a pedazos pero trato de seguir adelante por mi hija.
Mi mejor amiga está por llegar a Miami, cosa que me tranquiliza un poco. Más allá de que me hice amigas en Estados Unidos, no viene mal mi compañía de toda la vida.
Me levanto del piso de goma donde juega mi hija y camino en dirección a la mesada de la cocina donde está mi teléfono. En la redes aun siguen hablando de mi separación con Nicolás y ya es molesto.
Entra una llamada a mi celular pero no puedo reconocer el número. Declinó la llamada pero vuelve a llamar el mismo número. Esta vez lo dejo sonar pero cortan. En no menos de quince segundo vuelve a sonar y lo atiendo.
—Cami? — Pregunta una voz que aún no me puedo sacar de la cabeza. Esa voz que por más de que pasen mil años no voy a olvidar.
— Cami, soy yo Marcos — Vuelve a hablar y no puedo articular palabra alguna. Mi garganta está seca. — Sos vos o me equivoqué de número?
— Si soy Cami, hola Marcos. — Trate de hablar como pude y los nervios se me acumularon en la panza.
— Hace unos días llegue a Buenos Aires y me enteré de lo qué pasó. Estás bien? — Pregunta con una pizca de tristeza en su voz.
— Uf, si. Hace más de un mes nos separamos y estoy viviendo en un dpto acá en Miami — Le respondo y siento que di más información de la que debía.
— Necesitan algo? Puedo irme hasta allá. — La puta madre, Camila. Sin que el me vea sonrío negando con mi cabeza.
— Gracias por ofrecerte, pero está viniendo Vicu a ayudarme unos días —Mi respuesta lo hace suspirar. — Vos bien? La pequeña Marti?
— Si, Marti bien, está creciendo muchísimo. Y yo bien, separado de Eugenia pero obligado a convivir con ella por las nenas. — Dice y noto que la está pasando mal.
— Mira Marcos, hay algo que me dijo Vicu la otra vez y tiene razón. No podemos quedarnos en un lugar que nos hace mal. — Suelto y algo se me cierra en el pecho. — Yo lo amo a Nicolás y es el padre de mi hija, pero no por eso me tengo que quedar junto a él cuando tiene a otra persona.
