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Salimos de aquel lugar, había estado casi una hora dentro de aquella horrible fiesta.

Necesitaba respirar.

Apenas había prensa fuera, nos fotografiaron a la salida, decidimos posar todos para ellos y nos dejaron en paz.

Estaba un poco nerviosa, ya que me había ido con una panda de desconocidos a un after party, pero cualquier cosa era mejor que estar con Diana.

Me di cuenta que comenzaron a silbar a Camila, me molestó un poco ese acto, pero no tenía derecho a decir nada.

Camila se acercó a nosotros bastante sonriente.

-¿Os vais tan pronto?- me miró.

-Sí, nos vamos al after party ¿te vienes preciosa?- Bei le guiñó un ojo.

Yo me tensé viendo cómo ese tonto le coqueteaba, Camila se dio cuenta porque me miró y sonrió pícaramente.

-Tengo que hacer unas cosas, pero podríamos vernos luego en el after party- dijo Camila satisfecha.

No se quedó muy convencido con las palabras de Camila, pero decidió pasar del tema.

-Entonces ¿te vemos allá?- volvió a insistir.

Me crucé de brazos ante tal comentario, se estaba sobrepasando.

Me di cuenta del ridículo que estaba haciendo y estiré los brazos completamente.

-Sí, pero voy luego, primero tengo que hablar con _____- me señaló con una sonrisa.

Los demás comenzaron a hacer ruidos sexuales, consiguieron ponerme nerviosa.

Camila se reía ante tales comentarios.

Me llamó con su mano, los demás me dieron una palmada en el hombro y se fueron en sus coches hasta el after party.

Camila y yo nos miramos sin saber muy bien que decir.

Reímos a la vez.

Ambas estábamos nerviosas.

-¿Qué tal tu noche?- quise romper el hielo.

-Bastante bien ¿no me ves?- dio la vuelta para que viese su deslumbrante vestido.

Me mordí el labio ante los pensamientos subidos de tono que pasaban ahora mismo por mi mente.

-Dímelo- me miró fijamente.

-Decirte ¿el qué?- tartamudeé.

-Lo que piensas- se acercó un poco más a mi.

Miré alrededor, no había prensa pero no me fiaba mucho, así que decidí retroceder la distancia que ella se había acercado.

Camila se dio cuenta de lo que había hecho y decidió retroceder, dos metros nos separaban ahora mismo.

-¿No me lo vas a decir?

Miré otra vez mis pies, debía controlar mis nervios.

-Estaba pensando en lo guapa que estás esta noche.

-¿Sólo esta noche?

-No, no, guapa estás siempre- Volví a tartamudear.

Ella suspiró y después soltó una carcajada, se estaba riendo de mi.

-Mi mamá no confía en ti ¿sabes?- me miró fijamente a los ojos.

Chasqueé la lengua e intenté no reírme.

-No te preocupes, si yo fuese ella, tampoco lo haría- negué con la cabeza.

Camila se acercó para golpearme con su bolso ante mi comentario.

Yo intenté taparme pero fue imposible, recibí un buen golpe.

-Bueno, después de este ataque gratuito ¿vamos al after party?

-¿Quieres ir conmigo al after party?

Asentí.

-Me sorprende que no quieras ir con tu novia Diana.

Camila estaba celosa.

Intenté no burlarme de ella, pero me era muy difícil.

-¿Te vienes conmigo?- le ofrecí mi mano.

Ella aceptó sin pensarlo y fuimos hacia la zona de los taxis, quise separarme de Camila pero tenía mi mano agarrada fuertemente.

Me quedé pensando en lo que me había dicho de su madre, la madre tenía razón.

Si Camila fuese lista no se iría conmigo esta noche.

El after party no estaba tan lejos como yo creía de aquel lugar, no tardamos mucho en llegar.

El taxista resultó ser fan de Camila, así que me tocó ir detrás mientras él cantaba canciones con ella adelante.

Había un grupo de seguridad que no quería dejarme pasar, hasta que reconocieron a Camila y se nos abrieron todas las puertas del lugar, ya había gente.

Era un reservado de uno de los hoteles más lujosos de la ciudad, me abrumaba el dinero que se podían gastar en estas fiestas para celebrities.

Estaba todo perfectamente decorado, el salón se dividía en tres partes, pista de baile, sofás y las mesas repletas de comidas.

Camila y yo nos miramos muy bien sin saber dónde ir.

-¿Tienes hambre?- la miré.

-Siempre tengo hambre.

Camila y yo nos fuimos hacia las mesas a comer algo, escogimos dos tentempiés y nos los llevamos hacia la zona de sofás.

Nos sentamos en uno de los pocos sofás que quedaban vacíos y comenzamos a devorar aquellos manjares.

Los amigos de Sean pasaron por nuestro lado y decidieron acompañarnos en aquel sofá, nos acompañaron hasta que aparecieron unas modelos y se fueron con ellas a las pista de baile.

Me había terminado el tentempié y no sabía a qué parte ir.

¿Debería ir a la pista de baile con los demás?
¿Había sido buena idea venir?

Noté un leve cosquilleo por todo el cuerpo cuando hice contacto visual con una actriz ¿cómo se llamaba? La había visto en alguna que otra película pero no recordaba su nombre.

Ella me miró fijamente, sonrió y después siguió a lo suyo con su grupo de amigas.

¿Debería ir detrás?

Miré a Camila, la cual estaba bebiendo un mojito tranquilamente sin enterarse de nada.

-Bienvenidas al paraíso nenas- gritó Bei.

Bei no paraba de mirar a Camila, parece que no entendía que Camila no quería nada con él.

Se sentó en medio de las dos y pasó el brazo por el cuello de Camila.

Tosí intentando hacerme notar, pero me ignoró completamente.

-Oye _____, hay un grupo de fans que quieren conocerte- me dijo Bei.

Me sorprendí al escuchar esas palabras.

-¿Qué fans?

Bei chasqueó los dedos y apareció un grupo de chicas, se acercaron a abrazarme y a darme besos.

No paraban de gritar ¿eres tú? ¿eres tú?

Asentía entre carcajadas, ya que era la primera vez que me ocurría algo así.

-Chicas, llevaos a mi buena amiga a una suite- Comentó Bei.

Ellas asintieron mientras me llevaban de la mano lejos del sofá donde estaban ellos.

•Barbara Palvin y tú• Famous in love•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora