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-¿Qué te ha hecho ese pobre piano?- Rió Camila.

-Se supone que en una semana tengo que tocarlo en una escena y es la primera vez que toco uno y está siendo un desastre.

Notaba como Camila me miraba con ternura.

-Tienes suerte de tener una compañera que toque el piano.

-¿Katherine?

-No, yo.

Camila se sentó a mi lado y empezó a buscar las partituras, se la veía bastante concentrada.

¿Por qué me ponen a mi a tocar el piano?

-No es tan complicado.

-Eso mismo dijo Katherine antes de que empezara a aporrear el piano- señalé las teclas nerviosa.

-Dame la mano y respira- me ofreció su mano.

Camila y yo estábamos agarradas, me quedé observando a Camila ahora que la tenía cerca.

Camila se dio cuenta de que la estaba mirando demasiado.

-Cierra los ojos y respira.

Obedecí.

Me sentía más tranquila después de la tontería que acababa de hacer con Camila.

-¿Mejor?

Asentí.

-Muchas gracias, te debo una.

-Deberías practicar este finde.

-Mis planes este finde eran dormir y ahora resulta que tocaré el piano.

-Yo tengo dos entrevistas.

-Se me olvidaba que tú aparte de actuar, cantas.

-Y tú ¿cantas?

-¿Yo?- reí mientras negaba.

-¿Has cantado alguna vez?

Me limité a seguir negando entre risas.

-Cantar no es lo mío, es una de las pocas cosas que tengo claro.

-¿Cómo sabes que no te gusta si nunca lo has probado?

-Primero aprendo a tocar el piano y luego cantamos lo que tú quieras.

-Entendido, te tomo la palabra.

Camila me dio un beso en la mejilla y se fue de aquella habitación.

¿Quién me manda a presentarme al casting de mierda? Maldición.

Me resigne y decidí acercarme al plató en el que grabaría hoy, me quedé en silencio repasando mis líneas.

Los ojos se me cerraban, me quería tirar al suelo a dormir y no me quería despertar hasta el día siguiente.

¿Cómo están tan despiertos si han dormido menos que yo?

Mi móvil se encendió, me acababa de llegar una notificación de Barbara Palvin.

Mi día acababa de mejorar.

-Millers a grabar.

Mierda, tendré que ver el mensaje después de grabar.

..........

Entré por la puerta y ahí estaban Nathan y Lily, agobiados por los exámenes.

Me miraron ambos y siguieron con lo suyo.

-¿Dónde te pierdes tanto? Superestrella- Nathan me tiró un bolígrafo.

•Barbara Palvin y tú• Famous in love•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora