Tian Guan Ci Fu- Bendición del Oficial del Cielo (versión española)

Capítulo 4- Antiguo Templo Encerrado por la Montaña

el Bosque de cadáveres Colgantes

(Capítulos 9 a 11)

FU YAO SE HABÍA DADO CUENTA de que Xiao-Ying se había encogido entre la multitud, y frunció el ceño. "¿Por qué hay una mujer aquí?" 

Mientras que su tono no estaba furioso, tampoco tenía buena intención. Cuando Xiao-Ying lo oyó, ella se inclinó la cabeza. Xie Lian explicó, "Ella estaba preocupada, así que vino aquí a ver." 

Fu Yao cuestionó a los demás, "¿Todos ustedes subieron con ella?"

La multitud estaba un poco insegura al principio, pero, luego, respondieron: 

"No recuerdo."

"No puedo darme cuenta."

"No, cuando subimos ella no estaba aquí, ¡¿verdad?!"

"De cualquier manera, no la vi."

"Yo tampoco."

Xiao-Ying dijo rápidamente, "Es porque estaba siguiendo en secreto..."

Xiao-Pengtou la interrumpió inmediatamente. "¿Por qué seguiste en secreto? ¿Eres culpable de algo? ¿Eres el novio fantasma disfrazado?"

Con tal acusación, el espacio cerca de Xiao-Ying inmediatamente despejado, y ella agitó las manos nerviosamente, "¡No... no, soy Xiao-Ying, soy real!" Ella giró hacia Xie Lian. "¡Maestro joven, nos acabamos de ver! Le ayudé usted a ponerse colorete, arreglé su cabello y su cambio de imagen completo..."

Xie Lian no pudo encontrar las palabras para responder a eso. "..." 

Todos lo miraban, y algunos comenzaron a susurrar entre ellos. Oyó las palabras vagamente "pasatiempo," "anormal," "increíble," y se aclaró su garganta. 

"Este era un requisito de la misión. Un requisito de la misión. Nan Feng, Fu Yao, tú..." 

Xie Lian buscó por todos lados, y sólo entonces se dio cuenta de que Nan Feng y Fu Yao lo habían estado mirando fijamente extrañamente todo el tiempo. Retrocedieron muy rígidamente a cierta distancia de él. 

La forma en que lo miraban fijamente le puso la piel de gallina de la cabeza a los pies. "... ¿Hay algo que quieras decirme?"

¿Cómo podría haber sabido que el trabajo de cambio de imagen de esta chica estaba tan dotado que sus cejas tenían una forma elegante, su rostro estaba tan pálido como el polvo de jade y sus labios estaban tocados con colorete? Si no abrió la boca, entonces él era completamente una doncella gentil, tímida y hermosa. Esto les dio a los dos un gran shock y los sumió en la incredulidad, haciéndolos cuestionar sus vidas y sentirse incómodos por todas partes. La cara seguía siendo la misma cara, pero, ya no sabían con quién estaban hablando. 

Fu Yao se dirigió hacia Nan Feng. "¿Había algo que quisieras decir?" 

Nan Feng inmediatamente sacudió la cabeza. "No hay nada que quiera decir." 

"... ¿Por qué ustedes no dicen algo?" Xie Lian dijo. 

Justo entonces, algunos hombres de la multitud hablaron en voz alta: