花FLOWER ⟨Minjoong⟩

𝑶𝒄𝒉𝒐

— Mingi, dime que no es verdad.

Obviamente las noticias de que el futuro rey Mingi se iba a casar con un campesino volaron por todo el reino. Y el rey se ha enterado.

— Lamento si mi decisión te disgusta. Pero es la verdad. — Dijo Mingi, manteniéndose firme. — Ninguna ley puede prohibirme casarme con él, y créeme que lo haré. Es sin duda el chico más maravilloso que he conocido hasta ahora, y visto lo visto sin duda no habrá nadie más como él. Lo quiero a él, a Hongjoong.

— ¿Tú sabes a lo que te enfrentas? Toda la corte irá en contra tuya, casi todo el reino también. Y ni hablemos de los reinos vecinos.

— Que digan lo que quieran, deja de intentarlo padre.

Hubo un silencio sepulcral. El actual rey mantenía un rostro sereno, pero su mirada sería recaía en Mingi.

— Haz lo que quieras, pero párate a pensar un momento. Sabes que habrán críticas y podrás defenderte, pero ese chico no. — Eso fue lo último que dijo antes de irse de la sala.

Mingi se dejó caer en el pequeño sofa de la sala soltando un largo suspiro. Por mucho que lo odiara sabía que en eso su padre tenía la total razón. Él podía defenderse ante la corte al ser una autoridad, pero Hongjoong no es nadie en la realeza. Hablando mal, lo iban a putear.

Solo podía defenderlo todo lo que pudiera, y demostrar que es apto para ser rey junto a él.

Y ahí se dio cuenta de la realidad. Hongjoong tiene cero formación de realeza. No sabe absolutamente nada de leyes, no había dado ni una clase de postura y modales en su vida. Tenían un grave problema, si Hongjoong no mostraba ser competente irían a por él y su vida sería más difícil en palacio.

Se levantó y fue a toda prisa al cuarto de Hongjoong, al no estar casados no se les permitía dormir juntos. Llamó a la puerta y al escuchar un "adelante" entró.

— Hola. Te ves apurado, ¿Va todo bien?

— Creo que no. — Dijo Mingi mientras cerraba la puerta y se sentaba al lado de Hongjoong en la cama. — Mi padre me hizo pensar...

Hongjoong sintió el pánico. Mingi se veía apurado, algo preocupado y dice que su padre le hizo pensar. ¿Lo iba a echar verdad?

Mingi al ver la cara de susto de Hongjoong rapidamente se corrigió.

— ¡No es lo que crees! ¡No te voy a echar! — Dijo con rapidez. Hongjoong suspiró aliviado y lo miró para que continuará hablando. — Como no eres de la realeza no has tenido formación para ser rey. Tenemos que pensarlo con cabeza no es solo casarse, gobernarás conmigo y tendrás responsabilidades que yo no tendré. Tenemos que asegurarnos de que puedas hacerlo, si no lo tendrás muy complicado. Tanto con la corte como con el resto de los reinos.

— ¿Sugieres que tenga clases?

Mingi lo miró y asintió algo preocupado. Sabía lo estrictas que eran esas clases, y le parecía casi injusto tener que someter a Hongjoong a algo así.

— Está bien. — Hongjoong agarró la mano de Mingi con fuerza, ya tenía cierta confianza como para mostrar algo de cariño. — Prometo dar mi mayor esfuerzo, quiero demostrarte que puedo ser un buen marido.

— Ya lo eres. — Dijo más relajado. Hongjoong era sin duda, maravilloso.