𝖠𝗇𝗍𝖾𝗌 𝖽𝖾 𝗍𝗂| Julián Álvarez • √√

|8|

31 𝚍𝚎 𝚊𝚋𝚛𝚒𝚕 2015

— me saqué un uno en la prueba de matemáticas. –me tiré para atrás. Me van a matar.

— eso que te ayudé boba. –se ríe. Te cuesta mucho.

— bueno Julián, no todos somos inteligentes.

Julián y yo este mes nos volvimos más unidos, estábamos todo el tiempo juntos.

Algunos ya pensaban que eramos parejas, pero nos hicimos amigos? Aunque bueno, de vez en cuando uno que otro beso nos dábamos.

Y a mí me encantaba cada día más.

— mi mamá está por llegar. –lo mire.

— ya me tengo que ir entonces. –hace puchero. ¿Mañana te pasó a buscar?.

— si Juli. –sonreí. Cuídate.

— nos vemos, te quiero.

Me da un beso en la mejilla y sale por la ventana, ¿por qué no por la puerta? No tengo idea.

Fui hasta la cocina donde estaba mi hermana dibujando.

— ¿con quién hablabas?. –me mira.

— estaba hablando sola ¿por?. –la mire. ¿vos nunca hablas sola acaso?.

— si, pero no tan así.

Le hice la leche, en eso llegó mamá, mejor rompo la prueba y listo, es un detalle mínimo, nada malo.

— vi al hijo de doña Mari. –me cuenta mamá.

— ¿cuál de los tres?.

— el más chico de los varones claro, la nena es preciosa. –sonríe.

— Julián si, va a mi colegio. –me hice la boluda. ¿Qué tiene?.

— iba rengeando, seguro se cayó, pobre chico la verdad.

Traté de no reírme, Sofía me quedó mirando, le hice señas de que cierre el orto.

01 𝚍𝚎 𝚖𝚊𝚢𝚘 2015

Me desperté temprano, me bañe, me puse el uniforme y empecé a peinarme, con toda la paja del mundo, claro.

Al salir de la casa mientras comía una manzana me encuentro con Julián en la esquina, lo saludo con la mano.

— las horas de matemáticas vamos a tener juntos. –me cuenta.

— ¿cómo?. –lo mire.

— cansamos a mi profe y renunció, tu profe tomó el cargo, van a juntar los cursos para esa hora.

— piola, perdón son las siete de la mañana y no entiendo la vida.

— no pasa nada Ornellita.

— bueno Juliancito.

Llegamos al colegio, fui a sentarme con una compañera, se llamaba Selena, era la única amiga que tenía acá, todos me caen mal.

— te vi llegando con Julián, que hombre dios. –me sacude.

— ay si, normal. –la mire. No me toques, es temprano.

Bueno, soy un poco ortiva a la hora del contacto físico.

— somos amigos. –volví hablar. Nada fuera de lo normal, ahora voy a dormir, llámame para matemáticas.

— pero si odias matemáticas.

— ahora no tanto.

Me apoyé en su hombro para cerrar los ojos y ayudarla ahí nomas.

(...)

— despertarte, Julián te esta mirando y estás con la boca abierta. –me mueve. dale Ornella, dale boluda.

— ¿QUÉ QUERÉS TARADA?. –dije de mal humor.

Todas las miradas estaban en mí ahora, más que nada la de Julián, me limpié la baba rápidamente y me acomode el pelo.

— ¿todo bien señorita García?. –me mira la profesora. No se grita en mi clase.

— fue, fue sin querer.

Quiero salir corriendo, que me tragué la tierra, Selena me miró mal.

— ahora van a copiar estos ejercicios y los hacemos todos juntos.

Que paja, empecé a copiar.

Cuando levantó mi mirada, Julián estaba hablando con una morocha, se estaban riendo, aaaaaa la chabona le toca el pelo.

— Ornella, pase hacer el primero.

No profe, que verga que es.

Selena me miró riendo.

— ¿yo? Pero profe. –la mire.

— pase porfavor.

Me levanté sin ganas, agarré una tiza.

Me voy a quedar dos horas acá parada haciéndome la que pienso para que me diga que me vaya a sentar.

— Ornella, rápido.

— profe es fácil esa. –habla Julián. Da 30,000.

Me di vuelta para mirarlo y me guiño el ojo.

— muy bien Julián, Ornella ponga eso y vaya a sentarse.

Lo copié, y fui a mi lugar.

No necesitaba su ayuda igual.