cincuenta y ocho

1.2K 72 22
                                    

Oriana

Pasaron 5 meses de aquella pelea de Duki y Cata, no volvieron, pero de vez en cuando, se ven, aunque, Duki por una cuestión de fama, formalizó con Emilia y ahora la gente se piensa que está de novio con ella.

Con Gonza, las cosas están cada vez mejor, desde aquella noche que discutimos antes de dormir, y él me dijo que deje de permitir que la gente ajena a la relación, nos afecte como pareja, lo entendí, y cambié mucho en ese aspecto.

Tengo recién 8 meses de embarazo, que se me pasaron más que volando, la panza esta bastante grande y la ropa que antes me entraba; ahora no me entra.

Alina juega y habla mucho con el bebé, porque si, es un bebito, un nene, como yo quería, al fin llegó.

Todavía no tenemos nombre para el bebé, pero, Alina ya nos aviso, que ella le iba a poner el nombre apenas nazca, pero, por ahora no nos va decir.

(...)

-Amor, ¿Venís de mi mamá?- me preguntó Biza, poniéndose la campera.

-Si, espera que cambio a Ali- le contesté subiendo las escaleras, despacio.

-¿Queres que la cambié yo?- me preguntó frenándome con sus manos en mi cintura.

-Oooh, ¿Me haces ese favor?- le pregunté mirándolo con una sonrisa.

-Si mi amor, obvio, anda a sentarte en el sillón, descansa un ratito- un poco más y me obligo.

Asentí sin decir nada, realmente quería descansar un ratito.

-Enseguida bajo con Ali- me avisó.

Volví asentir y le sonreí.

-Mamá- me gritó Alina.

-¿Que pasó, mi amor?- le devolví el grito.

-Te amo- me tiró besos mientras desaparecía por las escaleras.

-Yo también mi amor- le dije y sonreí.

La primera palabra de Alina, fue "mamá", la segunda palabra fue "papá" y la tercera, fue "te amo".
Así que, al principio, cada 2 segundos decía "papá te amo" o "mamá te amo". Con Gonza, felices.

Me tranquilicé ya que Biza se iba encargar de cambiarla; me recosté en el sillón y empecé a tocarme la panza.

La tocaba en forma de círculos, a veces, la acariciaba solo con los dedos índices de cada mano.

Y el bebé, enseguida empezó a moverse, por lo que sonreí, siempre que me tocó lo panza, él empieza a moverse y se ve como lo hace por cómo deforma la panza.

-Amor- le grité a Biza.

-Eu- me dijo bajando con Alina en los brazos.

-Ah, ya la cambiaste, que rápido- sonreí- Como en todo- solté una carcajada.

Biza me miro serio, porque entendió la referencia, pero cuando le sonreí, me sonrió mostrando los dientes.

-Sabes que te jodo, mi amor- le dije entre risas- Para mi sos perfecto, seas como seas, sos perfecto.

-Te amo mi amor, y creo que lo sabes más que nadie en la ciudad y en el mundo- sonrío.

Se acercó y dejó un beso en mis labios, después del beso, sonreí.

Alina hizo cara de desagrado, con Biza nos miramos y nos reímos. Siempre que nos damos un beso, ella hace cara de asco, porque es muy celosa del padre.

-¿Vamos?- me preguntó y me ofreció la mano, así me levanto del sillón.

-Vamos- asentí, agarrando su mano, y haciendo un poco de fuerza para levantarme del sillón.

 Cᴜᴀʀᴇɴᴛᴇɴᴀ ➞ Bɪᴢᴀʀʀᴀᴘ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora