posesivo-VINNIE HACKER

cap 22

Entré en esa maldita casa, casi derribando todo, ¿cómo podría dejarme involucrar por ese chico? Dime. Fui una idiota y ahora sería una puta. ¿Por qué esta mierda solo me pasa a mí?

¿Por qué es así? Dios mio.

Fui a la ducha y esa fue considerada la ducha más larga de mi vida, una ducha perdida en pensamientos y en intentar quitar su perfume de mi cuerpo, y parecía imposible, su olor se me había pegado. Lo odio, simplemente lo odio. Lo máximo que tuvo que pasar fue que fue solo una noche con él para salvar a mi "amigo", lo cual me arrepiento totalmente. Debería haber dejado morir a Josh, si no me hubiera metido en estas cosas de pandillas idiotas, no estaría en esta situación, siendo de alguien que no es mío, y conocía a Vinnie y me enamore de ese maldito desgraciado su olor, su cabello su cara si cuerpo dios lo odio pero lo amo y siento que no puedo vivir sin el.

Maldita sea, mierda, mierda. ¿Por qué apareció de nuevo? ¿Por qué tuvo que ir a trabajar a esa escuela tan pronto? ¿Por qué Fred tuvo que estudiar en esa escuela? Porque si no hubiera robado a Vinnie me fuera dejadl tranquila, si el idiota de mi amigo no fuera tirado lo que sea que tenía  Vinnie no habría necesitado seguir su rastro.

Vale, pero vayamos a la verdad: Vinnie era dueño de una belleza intensa, tiene que ser muy lo suficientemente fuerte como para resistirlo, así que ¿por qué me resistiría? Soy débil, todo el mundo lo sabe. No sé si tenía algo más que atracción física, y si lo tenía, quería descartarlo. Todo el mundo sabe que Vinnie Hacker no vale ni lo que come, que rompe el corazón de las niñas y todavía se ríe, entonces, ¿por qué aceptaría ser suya? Estaba dispuesta a luchar, aunque sabía que mi muerte valdría la pena, pero resultó que no iba a ver a Vinnie joder el poste y aplaudir y luego aterrizar en su cama, porque simplemente decidió que yo pertenecía a él. a él. Pero algo me intrigó: ¿Por qué yo? ¿Luego yo? Estaba dispuesta a averiguarlo.

Al día siguiente, llegué a la escuela con una cara de culo terrible, pero pronto me sentí mejor cuando vi a Quinton caminando hacia mí.

- ¿Qué pasa, Desty, todo bien? - preguntó y me reí.

- Esa forma de saludar no te sienta nada bien. - Dije y me reí una vez más.

- Es que los chicos geniales hablan así, creo, y conquistan a las chicas más fácilmente.

No necesitas eso, Quin. - Dije sacando unos libros del armario y me reí. Eres un chico inteligente. - Dije cuando recordé a Vinnie que era hermoso, maravilloso y unas manos. Pero en realidad, ni siquiera quería recordar a Vinnie.

- Pero a las chicas ya no les importa eso. - Dijo señalando su cabeza. - Y sí, por eso. - Esta vez señaló entre sus piernas y fue imposible no reírse. Quin estaba siendo un buen amigo estos últimos años que estudiamos juntos, sin mencionar que sabía cómo hacer que volviera mi buen humor.

Todos en esa escuela pensaron que era raro que hablara con él, porque él tenía una imagen de mí como otra chica linda que ama a los jugadores de fútbol, ​​​​siendo que ni los miré en esa escuela, pasé directamente como si fueran irrelevantes, y lo fueron.

Chloe, bueno, no hace falta decirlo. Ya se acostó con la mitad del equipo y era capitana de las porristas, pero no hizo nada y las demás porristas votaron para que se fuera, recuerdo que me reí mucho ese día. Fue a fines del año pasado cuando se dieron cuenta de que nunca habían ganado ningún campeonato con Chloe y que ella solo sabía ligar con los jugadores.

Guau, quin. Entonces me ofendes. - Dijo en broma.

- Con la excepción de usted. - Dijo un poco incómodo. - Espero no haber metido la pata.

Para las otras chicas, Quinton no tenía el estándar de belleza que buscaban, pero si no fuera mi amigo, lo tomaría solo porque es tan lindo.

Por supuesto que no, idiota. Estaba bromeando. - Le di un ligero puñetazo en el hombro, se rió y me rodeó con uno de sus brazos y estábamos hablando tonterías por el pasillo. En ese momento, Mads pasó junto a Cynthia y evitó mirarme, mientras Cynthia venía alegremente a saludarnos a Quinton y a mi.Pronto se fueron los dos y eso me dolió por completo.

- Aunque no sé por qué ustedes dos ya no se hablan, sé que ella se arrepentirá. Quinton trató de consolarme cuando vio que mi expresión cambiaba. - Una verdadera amistad no puede ser reemplazada. - No pude decir nada, solo lo miré y sonreí. Cuando doblamos la esquina, Quin se encontró cara a cara con Hacker, todavía con su brazo alrededor de mí.

- Lo siento. - Dijo Quinton con naturalidad, realmente no sabía con quién estaba tratando. Vinnie solo lo miró con esa cara de gilipollas y no dijo nada. Entonces recordé el día anterior y tomé los brazos de Quin a mi alrededor, porque no me perdonaría si Vinnie se volvía loco y le hacía algo. Quinton no entendió.

¿Algo pasó? - Preguntó extrañado.

- Nada, es que... Sonó el timbre y teníamos que irnos. - Lo jalé y salimos corriendo.

Las horas se arrastraron y necesitaba un descanso para hablar con Vinnie, esa cosa de ayer me estaba comiendo por dentro, necesitaba limpiarla y tratar de decirle que las cosas no funcionaban así... y luego recibir un disparo. , por supuesto. Y finalmente, llegó el maldito descanso. Caminé rápidamente por los pasillos de la escuela, atropellando a todos y metiéndome entre la multitud, tratando de encontrar a ese idiota, busqué por todos lados, incluso en la habitación en la que solía estar, y nada. Ya me dolían las piernas de caminar por esa enorme escuela, me vi obligado a detenerme para poder respirar un poco.

- Oye, Desty... Va a haber una fiesta en mi casa, si quieres ir... - Erick, uno de los chicos más codiciados de esa escuela me pasó entregándome una invitación. - Ahí estará mi cuarto también, si quieren hacer una pequeña visita... - Se rió junto con unos chicos que venían detrás y se fueron. Tomé la invitación y la tiré a un rincón.

Me quedé allí un poco más, hasta que, a propósito, decidí ir al sexto piso de la
escuela, pero tomé el ascensor, porque todavía estaba cansada, aunque el ascensor era solo para emergencias, pero esto era una emergencia.

Llegué al piso y comencé a escuchar la voz de Hacker, tal vez estaba haciendo algunos mandados por teléfono.

Empecé a acercarme a él para hablar con él, y todas esas ideas mías murieron cuando escuché una voz femenina...

Me hervía la sangre. Fui lentamente a una habitación número 603 que tenía la puerta entreabierta, y entonces comencé a escuchar gemidos... Ni siquiera se prestaban a cerrar la puerta por completo... No necesitaba estar viendo eso. ..