|2| No puedo apartar los ojos de ti ✔

Capítulo 286: Reunión en la cafetería.

No era la hora de la cena común para los soldados a esta hora del día, por lo que cuando Jiang Yao y Lu Xingzhi fueron, estaba bastante vacío.

"¡Ahí tienes! ¡Ven aquí, ven! ¡Toma asiento!"

El coronel Lin agitó su mano hacia ellos con entusiasmo en el momento en que entraron. Él y los asistentes se sorprendieron cuando vieron a Jiang Yao.

Sabían que Lu Xingzhi se casó con su esposa cuando ella solo tenía dieciocho años, la boda también parecía celebrarse apresuradamente. Ahora que finalmente vieron su rostro, quedaron atónitos por la sorpresa. La niña se veía muy encantadora y dulce, la gente la compraría si afirmara ser menor de edad.

“¡Xingzhi, tú eres el hombre! ¡No es de extrañar que tengas que casarte con ella rápido!" El coronel Lin tenía treinta y siete años, era el coronel más joven de la base. Como compartía una estrecha amistad con Lu Xingzhi, le hablaba en un tono informal y relajado.

Ante el comentario, la Sra. Lin apartó la mirada de Jiang Yao y se rió entre dientes, “Así es. Si soy un hombre y me tropiezo con una dama tan fina, también me habría casado con ella rápidamente”.

La Sra. Lin llevó a Lu Xingzhi y Jiang Yao a sus asientos. Después de instalarse, la Sra. Lin presentó a Jiang Yao a las personas que la rodeaban. La mujer un poco más baja y gordita era Deng Meihua, la esposa del Mayor Zhu, Jiang Yao se dirigió a ella como la Sra. Zhu. Sentada junto a la Sra. Zhu estaba una mujer flaca, Jiang Liping, la esposa del Capitán Yang.

“¿Diste un paseo por la ciudad de Jin esta tarde? ¿Como estuvo? ¿Cuál es la diferencia entre nuestra ciudad y la ciudad del sur?” La Sra. Lin era local. Nunca antes había estado en la región sur, por lo que tenía curiosidad por el lugar.

“El sargento Lu fue a buscarte después del almuerzo. Pensé que llegarías más tarde en la tarde, pero quién sabía que estarías de vuelta por la noche”. El coronel Lin lanzó una mirada descarada a Lu Xingzhi antes de volver a hablar con Jiang Yao: “Justo ahora, le pregunté si su tren llegaría alrededor de la 1 p.m. ya que lo recogería después del almuerzo. Solo entonces me enteré de que su vuelo salía a las 13:30. ¡Ni siquiera habías despegado cuando salió!"

En el momento en que el coronel Lin terminó de hablar, todos en la mesa se rieron alegremente.

A un lado, Jiang Yao apretó los labios con fuerza, tratando de ahogar una risa. Después de aterrizar, ella le preguntó cuánto tiempo había estado esperándola y él respondió que acababa de llegar. Bueno, el hombre definitivamente mintió sin pestañear. Claramente estuvo allí en el aeropuerto durante mucho tiempo. No es de extrañar que su camisa se sintiera fría y húmeda.

Lu Xingzhi bajó la mirada hacia la joven que se reía con los labios curvados con picardía. No sintió ni la más mínima vergüenza después de haber sido expuesto.

Anticipó mucho la llegada del día. Por la mañana, tan pronto como salió el sol, no pudo concentrarse en el entrenamiento ni en su deber en la base mientras pensaba en Jiang Yao, que llegaría por la noche. Por lo tanto, se tomó medio día libre y corrió al aeropuerto para esperar su llegada.

Esperó durante horas en el aeropuerto, pero fue muy agradable y encantador. Cada minuto que pasaba indicaba que ella vendría a él pronto.

Mirando los platos en la mesa, Jiang Yao supo que primero le habían preguntado sobre su gusto a Lu Xingzhi. Casi todos los platos eran de sabor ligero y guisos que no eran tan picantes.

En realidad, fue una reunión entre los camaradas y sus familias en nombre de una fiesta de bienvenida. Durante la boda de Lu Xingzhi, nadie de la base pudo asistir debido a la distancia. Esta era la primera vez que veían a la esposa de Lu Xingzhi después de estar casados ​​por más de un año. Para causar una buena impresión en la base, el Coronel Lin patrocinó la cena de esta noche.