❃𝑼𝒏𝒂 𝑬𝒍𝒇𝒂 𝑬𝒏𝒂𝒏𝒂 𝑬𝒏 𝑬𝒍 𝑳𝒊𝒏𝒂𝒋𝒆 𝑫𝒆 𝑫𝒖𝒓𝒊𝒏 ❃(El Hobbit)

CAPÍTULO 1

Hola es un placer, mi nombre es Indis. Me gustaría empezar hace no tanto tiempo, al menos para mi no es mucho. Mi primer recuerdo fue a mis 7 años, en los pasajes que conducen hacia Rivendel, que hermoso lugar, allí conocí a Lord Elrond quien me cuido durante 4 años, en ese tiempo aprendí sobre la historia, cultura y mas o menos de su lengua; a mis 11 años quise conocer más culturas o mas lugares en lo que habitaban los elfos, un claro ejemplo el Bosque Negro donde habitan los elfos mas desconfiados. Y cerca de allí la Cuidad del Lago, Cuidad de Valle y lo que mas quería conocer . . . Erebor, lugar donde vivieron los enanos uno de los reinos mas poderosos de toda Tierra Media.

Lord Elrond sabia de mi entusiasmo por conocer todas estas tierras, y justamente al cumplir mi 12 años me dejaría marchar si prometía volver cada año por lo menos una semana en Rivendel, con gusto y un fuerte abrazo acepte. Cuando llego el día Elrond ordeno a uno de sus guardias acompañarme hasta el Bosque Negro que allí Thranduil me enseñaria de su pueblo; al llegar en la entrada vi al rey y con una reverencia lo salude, el rey me devolvió el saludo invitando me a pasar. Me enseño y mostró cosas y creencias que jamás imaginaria; pero de repente una pregunta se me escapo:

-Rey Thranduil, ¿usted conoce a los enanos?

-Si -dijo con notable desprecio por mi pregunta. -pero no te aconsejo que tu los conozcas, son seres codiciosos y tercos, que solo buscan cumplir sus propios deseos.

-¿Acaso hicieron algo malo? -había preguntado yo un poco mal por su respuesta.

-Eso no es un tema que a esta edad debas de saber. -dijo para tomar mi mano cual acepte y lo seguí. -pero si que, no debes juntarte o aceptar nada de ellos, los lazos entre elfos y enanos no son los mejores.

Me dijo para abrir una puerta mostrando mi habitación en la cual entre y cuando la cerro me quede pensado. Y de pronto una idea paso por mi cabeza, buscaria la manera que entre elfos y enanos convivan en paz.
Quien diría que me lo tomaría tan es serio que después de pensarlo, empaque lo necesario y aprovechando que el rey se celebraba una fecha muy importante que ahora mismo no recuerdo; me escape y sin rumbo vague durante un tiempo, creo que habían pasado como 3 o 4 años que fueron una maravilla, hasta que llegue a Bree, en las Fronteras de la Comarca; ya era de noche y me acente solo esa noche en la taberna del Pony Pisador, ahí si se sentía a montones la alegría. A la mañana siguiente me levante y quise dirigirme hacia las Montañas Azules, a pesar de lo que me habían dicho quería conocer realmente a los enanos y ver si eran como los elfos los habían descrito; al salir de la taberna corriendo me choque con un extraño . . . No lo podía creer era Thorin Escudo de Roble, había escuchado su nombre una vez cuando me tuve que ir por un camino que pasaba por una antigua fortaleza y vi a un gran orco con una cicatriz, pero me tuve que ir rápido pues lo orcos son peores que cualquier humano, enano o elfo.

-¡Ten mas cuidado niña! -me dijo con una mirada aterradora.

-Lo siento señor, pero estoy apresurada -le dije con un poco de miedo.

-¿A donde? Si se puede preguntar. -me miró curioso.

-¡En dirección a las Montañas Azules! -le dije con una sonrisa.

-¿Y porque te diriges allí? -me dijo con asombro. -debes estar confundida, una elfa nunca le gustaría visitar a los enanos.

-Pues usted se confunde, yo si quiero conocerlos, desde que tengo memoria.

-¿Niña donde están tu padres?

-¿Padres? Lo siento señor pero ¿que es eso?

-¿No lo sabes? -me dijo Thorin con sorpresa. -pues, un padre o madre son dos personas que cuidan de ti y evitan que termines mal, te enseñan del mundo.