Mafia boss [SN]

04

Era sábado por la mañana, Naruto salía de la ducha con una toalla enrollada en sus cadera y lavando sus dientes mientras elegía que ropa ponerse el día de hoy. Había quedado de salir con Kiba, uno de sus viejos amigos, pero lamentablemente este le había cancelado quedándose sin planes para hoy.

Tenía ganas de una fiesta, emborracharse hasta perder la cordura y ni acordarse que había pasado la noche anterior.

¿Tenía con quién ir?, No.

¿Sasuke?, A él no le gustaban las fiestas, decía que el alcohol pone mal a las personas y hacen que no midan sus acciones haciendo cualquier estupidez o hablar cosas sin sentido. Su otra opción era Shikamaru, uno de los tantos guardias de Sasuke, tenía las misma edad que él y ya había salido antes con él.

Sabía que estaría bien y que Shikamaru se encargaría de que no hiciera algo de lo que después se pudiera arrepentir.

Terminó de lavar sus dientes y se vistió con algo no tan formal ni llamativo, eso lo dejaría para la noche, bajó las escaleras sin toparse con Sasuke en el transcurso del camino. Algo que le pareció raro ya que Sasuke no era de levantarse tarde.

Vio una sirvienta poniendo el desayuno que suponía que era para Sasuke en una bandeja, fue hacia ella y la detuvo.

— Ten ten, si no te molesta, se lo llevaré yo al señor Uchiha, ¿sí? —La mujer asintió sin problema.

Naruto con cuidado subió las escaleras con la bandeja en sus manos, la cual tuvo que dejar en una mesita que se encontraba al lado de la puerta para poder tocar. En cuanto escuchó el "Pase" por parte de Sasuke, abrió la puerta y entró con la bandeja en sus manos.

— Buenos días —Canturreó mientras dejaba la bandeja en la mesita de noche.

— ¿Ahora tienes ganas de hablarme?

— De hecho no, pero tenía que avisarte de que saldré con Shikamaru esta noche. —Dijo sin muchos rodeos.

— ¿A dónde?

— Una fiesta.

— Sabes que no me gusta que vayas a esas cosas.

— Sabes que me importa una mierda lo que digas.

Sasuke rodó sus ojos mediante un suspiro, a veces Naruto era un caso imposible.

— Está bien, haz lo quieras.

— No digas eso, me haces pensar como que no te importo.

— Si me importas.

— Entonces no me digas "Haz lo que quieras" —Imitó otra voz.

— ¿Y qué quieres que te diga? Si aún que te diga que no, saldrás igual —Naruto miró hacía otro lado como en señal de que el alfa tenía razón— Ve y diviértete, Naruto, deja al pobre viejo solo.

— Para estar viejo estás bastante bueno.

— No se si sentirme halagado u ofendido.

Naruto rió y se sentó en su cama, viendo el teléfono de Sasuke en la mesita, lo tomó entre sus manos haciendo que el teléfono se encendiera, dejando ver una foto de ellos dos.

— ¿Por qué pusiste nuestra foto de fondo de pantalla?

— Es la única que me gustó de las cientos de fotos que tomaste —Naruto no evitó sonreír al ver la foto, era el besando la mejilla de Sasuke mientras que esté sonreía con sus ojos cerrados.

Un lindo recuerdo de su viaje al Reino Unido.

— ¿No tienes más? —Preguntó mientras desbloqueaba el teléfono y entraba a la galería.

— Naruto, pásame mi teléfono —Le pidió el alfa mientras se paraba de su silla e iba dispuesto a quitarle su teléfono a Naruto.

— ¿Por qué? ¿Ocultas algo? —Naruto siguió deslizando su dedo viendo la mayoría de fotos de ellos dos juntos, hasta toparse con una del abdomen de Sasuke frente a un espejo— Jesús, María y José, ¿a quién le ibas o le vas a enviar esta foto?

— A nadie.

— Joder, Sasuke, que bueno estás —Musitó el omega mientras lamía sus labios— Deberías enviarme esas fotos.

— No —El alfa le arrebató el teléfono apagando este y guardándolo en el bolsillo de su chaqueta— Pervertido.

— No, no me entregaré a ti tan fácil —Naruto formó un puchero— Tus pucheros los puedes guardar para otra ocasión.

Volvió a sentarse en su silla viendo su computador nuevamente, tenía que hacer unos informes contra otros casos y ver de quienes se trataban para obtener la mayor información posible.

Naruto por otro lado se paró de la cama y se dirigió hacia él con una cara maliciosa, puso sus manos en sus hombros haciendo un pequeño masaje, el cual Sasuke disfrutó por unos segundos.

— Estás tenso, eso no es bueno — Murmuró en un susurro, pero audible para el pelinegro— ¿No quieres un descanso?

— No trates de engatusarme.

El omega soltó una pequeña risa.

Quitó sus manos de los hombros de Sasuke y esta vez acarició sus brazos mientras dejaba pequeños besos entre su nuca y cuello.

— Naruto —Lo llamó con su respiración agitada— Déjame tranquilo —Pidió.

— Bien, que lo disfrutes.

Esta vez sus manos se dirigieron a la camisa del alfa, la cual comenzó a desabrochar dejando a la vista su abdomen bien trabajado. Naruto giró la silla dejando a Sasuke frente a él aún sentado con sus ojos cerrados.

Comenzó a besar su abdomen con pequeños besos, de vez en cuando lamía aquella partes haciendo que la piel de Sasuke se erizara al tener contacto con la tibia lengua de Naruto.

Sus manos ahora estaban en el cinturón de Sasuke que poco a poco comenzaba a desabrochar. El alfa sabía a donde quería llegar Naruto, se hubiera negado, pero la cordura ya se le había ido por el caño.

— Señor Uchiha, lo buscan.