21

911 128 9
                                    

El omega frunció su ceño viendo la computadora frente a él, antes de irse había tomado la computadora de Suigetsu para no perder la información.

Sasuke estaba a su lado manejando hacia la casa en la que se estaban quedando, Hinata y Sakura iban atrás sin decir nada.

— Creo que Suigetsu era amigo de Sai, tiene correos de él preguntándole cuando se pueden juntar, el último fue hace una semana.

— Hace una semana estaban en Tokio, ¿no? Suigetsu no sabía que él está aquí, dudo que le haya dicho algo.

— De seguro sabe que eras amigo de él, pero no entiendo cómo se entera de todo, sabe cada uno de nuestros pasos. —Musitó el omega con su ceño aún más fruncido.

— Debe tener a alguien que trabaje para él.

— Y esa persona nos está siguiendo o está entre nosotros. —Naruto miró hacia atrás de ellos, pero no se veía ningún auto que no fuera el de ellos.

Gaara lo miraba desde el espejo delantero, le regaló una pequeña sonrisa a lo que Naruto se la devolvió.

— Mis sospechas están en alguien, pero tengo que confirmarlo. —Le dijo el alfa. — Y tú. —Apuntó al omega. — Me vas a ayudar.

— ¿Qué?

— Por más que la idea que tenga en la cabeza no me guste, hablaremos adentro. —El alfa quitó las llaves del auto y se bajó, Naruto hizo lo mismo al igual que la pareja de atrás.

— Creo que es ese tal Gaara. —Le dijo Sakura a su novia en el oído.

— ¿Tú crees? Es lindo como para ser el malo. —Sakura le dio un golpe en el brazo.

— Si sigues así le diré a Sasuke que nos ponga en habitaciones distintas.

— Dile, ve y dile, Sakura, quiero escucharte.

— E-Es broma, corazón. —La alfa lo abrazó mientras que la omega quería separarse de su abrazo.

— Tonta.

.▬▬▬▬▬▬ ◦ ❖ ◦ ▬▬▬▬▬▬.

— ¿Qué tienes en la cabeza? ¿Te pegaste de bebé? —Cuestionó el omega algo enojado.

— Tú le gustas, es obvio, ¿y que mejor que aprovecharnos de eso?

— Le estás pidiendo a tu novio que bese a otro chico.

— Pero mi novio es inteligente y lo distraerá mientras que yo le pego con un palo en la cabeza para que caiga inconsciente y podamos llevarlo al sótano para interrogarlo. —Explicó. — Créeme que a mí tampoco me gusta la idea de que lo beses, pero es lo único que se me ocurrió.

— Bien, ¿cuándo lo hacemos?

— Ahora.

— ¿Ahora?

— Ahora.

Naruto solo asintió antes de salir de la habitación e ir hacia la cocina, celebró cuando vio a Gaara sentado en el taburete tomando una taza de té.

Soltó un pequeño suspiró antes de entrar e ir al refrigerador haciéndose el que no lo había visto, tomó una botella de agua y bebió de esta.

— Pensé que te habías dormido.

— Soy sonámbulo.

Gaara rió.

— ¿Y tu novio?

— Está bañándose. —Dijo. — ¿Has tenido novia?

— ¿A qué viene tu pregunta?

— Curiosidad.

— He tenido dos.

Naruto asintió lentamente.

— ¿Y novio? —Preguntó esta vez acercándose a él.

— No, no he tenido la oportunidad.

Gaara vio como el dedo de Naruto pasó por su cuello y luego por sus labios, se paró de su silla y lo estampó contra la pared.

— ¿Qué estas tramando? Tu novio está arriba y no creo que quieras engañarlo conmigo. —Musitó cerca de sus labios.

— ¿Por qué no? Es un engaño que vale la pena. —Habló esta vez el omega mirando sus ojos y sus labios.

Y entonces Gaara lo besó, tomó su cintura con sus grandes manos y antes de viajaran al trasero del omega cayó inconsciente al suelo.

— ¡Me metió la lengua!

— Cállate o se la cortaré.

Naruto limpió su boca y lo ayudó a sacar el cuerpo de la cocina dirigiéndose al sótano, el cuerpo era algo pesado así que no les quedó opción que arrástralo por las escaleras.

Cuando llegaron al sótano Sasuke lo sentó en la silla y Naruto comenzó a amarrarlo.

— Te dije que le gustabas, caería fácil.

— Es obvio, soy irresistible.

Naruto terminó de amarrarlo y sacó un algodón y un poco de alcohol, lo acercó un poco a la nariz del alfa y este poco a poco empezó a despertar.

— Eres un mentiroso. —Fue lo primero que dijo al despertar y ver a Naruto frente a él. — Y una puta.

El puño de Sasuke no tardó en golpear su cara,

— Habla si no quieres que te quite cada uno de los dientes.

— ¿De qué?

— Trabajas para los Shimura, es demasiado obvio. —Habló Naruto. — Saben cada cosa que hacemos, el único que puede estar trabajando para ellos eres tú.

— No sé de qué hablas.

Y Sasuke lo volvió a golpear.

— Hablas o te vuelo la cabeza. —Lo volvió a amenazar el alfa.

— ¿Hace cuánto trabajas para ellos? —Preguntó el omega de brazos cruzados.

— Dos meses.

— ¿Por qué te enviaron?

— Querían que yo me acostara contigo y luego decirle a Sasuke, para que ustedes terminaran y no tenerlos a los dos para cuando ellos atacaran.

Sasuke estaba ardiendo en rabia, con cada palabra que decía más ganas le daban de matarlo.

— Eso es absurdo.

— No nos acostamos, pero si nos besamos.

— Fue parte de un plan. —Respondió el omega con obviedad. — Jamás besaría a alguien como tú.

— ¿La dirección que tiene Naruto es donde están?

— Sí.

— Mañana iremos entonces.

— Ellos vienen para acá. —Confesó. — Yo no dije nada, ellos rastrearon mi teléfono.

— Jodida mierda. —Maldijo el alfa. — Hay que decirle a los demás.

— Los ayudaré. —Dijo Gaara.

— ¿Por? No es como que ganarás algo.

— No, pero quiero verlos sufrir, ellos me engañaron.

Naruto entrecerró sus ojos y miró a Sasuke.

— Bien, pero haces algo y no dudaré en cortarte la cabeza.

— Sí, sí, desátenme.

Mientras que Naruto lo desataba un fuerte sonido se escuchó en el piso de arriba.

— Llegaron.

Mafia boss [SN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora