Capitulo 16 - Un hermano perdido

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Había sido como cualquier otro día. Revisé el periódico para ver qué más estaba pasando en el mundo que me rodeaba. Mirando hacia abajo, me sorprendió la gran atención prestada a la primera página: había habido una guerra, una grande al parecer. Aparentemente, todos lo sabían, pero yo había estado demasiado ocupado con el trabajo y los viajes para darme cuenta. Los piratas de Barbablanca lucharon contra todo Marineford, aunque según el periódico, no solo perdieron la guerra, sino también el propio Barbablanca. Aunque murió un Pirata legendario tan influyente como Barbablanca, no me llamó tanto la atención como el resto del artículo. Había bastantes fotos colocadas en la página, y la primera que me llamó la atención fue una foto de Dragon- el periódico decía que tenía ¿un hijo? Nunca me di cuenta de eso. Este hijo suyo era un... pirata... llamado... Sombrero de Paja Luffy...

Ese nombre, esa cara, ese sombrero todo parecía tan familiar por alguna razón. De repente, imágenes pasaron por mi memoria, recuerdos que había olvidado hacía mucho tiempo. Un chico, sonriendo, persiguiéndome a mí ya otro chico nos gritaba sin aliento, "¡Ace! ¡Sabó! ¡Espera!" Resurgieron numerosos recuerdos del niño, en algunos estaba sonriendo con la sonrisa más grande que jamás había visto, en algunos estaba llorando, en otros durmiendo y corriendo, seguido de su pequeño cuerpo cayendo al suelo. Eran buenos recuerdos, pero en ese momento me di cuenta de quiénes eran esos chicos. Las lágrimas corrían por mi rostro y comencé a gritar.

Eran mis hermanos, mis hermanos por los que hubiera muerto alguna vez para protegerlos. Hermanos con los que compartí mis sueños. La última vez que los vi, estaban tirados en los terrenos de la Terminal Grey. Los dejé atrás antes de que un incendio alcanzara ese lugar.

Mirando las fotos de él ahora, no puedo creer cuánto ha crecido y en qué famoso pirata se ha convertido. Debe ser mucho más fuerte ahora. Ese pequeño bebé llorón ahora tenía una tripulación propia que viajaba por los mares peligrosos. Me pregunto cómo era él ahora. Vaya. Así es él ahora. Está tendido en el suelo duro y frío de Marineford, tendido sobre su propia sangre seca. Ya no sonreía, ya no estaba lleno de vida como antes.

Mi hermano pequeño estaba muerto.

Sabo había dejado la base principal del Ejército Revolucionario para regresar a su país de origen. Nadie sabía dónde estaba Dragón. Poco después de la publicación del periódico, Dragon había tomado un bote y se había ido a alguna parte.

Sabo se paró en el acantilado cubierto de hierba donde Luffy, Ace y él solían pararse y hablar sobre sus sueños para el futuro juntos. Sin embargo, no estaba solo; una lápida estaba delante de él. Se sintió tan arrepentido, mirando la tumba de sus hermanos pequeños. ¿Cómo podía haberse olvidado de él? ¿Cómo podría finalmente recordarlo después de su muerte? Nunca pensó que su hermano pequeño moriría. Era solo un pensamiento que nunca se le ocurrió, ya que había planeado protegerlo junto con Ace. Podía ver a su hermano pequeño de pie frente al océano, riendo, emocionado de ser algún día el Rey de los Piratas. La imagen se desvaneció y el cuerpo de Luffy se convirtió en piedra.

Una pequeña lápida.

Cayendo de rodillas por el dolor, todo lo que pudo hacer fue recordar a Luffy como un pequeño niño tonto y esperanzado. Quería conocerlo tal como era, un pirata de diecisiete años, uno que se volvió lo suficientemente fuerte como para derrotar a un hombre fuerte como Crocodile; uno que podría entrar en Enies Lobby, Impel Down y Marineford. Simplemente no pudo escapar de la última parada.

Se preguntó cómo estaría Ace. Ace estaba realmente allí, vio morir a Luffy. De hecho, vio a su hermano pequeño ser empalado por un almirante de la Marina. Sabo se agarró el pecho con dolor. Su hermano pequeño no podía haber sido... empalado hasta la muerte. Habló, pero su voz era tan baja que apenas podía oírse a sí mismo.

"Luffy. Luffy, lo siento mucho. Te recordé demasiado tarde. Te dejé, mi hermanito llorón, entrar en una guerra y luchar por la vida de Ace solo. No sé si hubiera sido capaz de cambiaría nada si yo hubiera estado allí pero al menos hubiésemos luchado como hermanos, no tú solo contra una masa de soldados.

Sabo ya ni siquiera podía ver la lápida a través de sus lágrimas; la imagen era tan borrosa que pensó que podía ver a un niño pequeño parado frente a él, mirándolo. Realmente no podía ver su rostro, pero lo miró de todos modos.

"¡Luffy! ¡Ace está vivo, gracias a ti! Hiciste un buen trabajo pero... idiota... ¡no estabas destinado a morir!"

Se echó a llorar. Todavía no podía creerlo. Volvió a levantarse para sentarse más cerca de la tumba de su hermano pequeño. Sirvió tres tazas de sake, vitoreó y bebió una en honor a Luffy.

Poniéndose de pie, se dio la vuelta y comenzó a alejarse. Quería visitar su casa del árbol, la que construyeron juntos. El viento susurraba detrás de él. Pensó que se parecía mucho a las palabras "¡Sabo! ¡Espera!", pero cuando se dio la vuelta no había nada más que la tumba.

Después de caminar un rato, Sabo se detuvo. Se enfrentó a un gran árbol, en el que solía esconder el tesoro y el dinero que él y Ace robaron para sus fondos piratas. La primera vez que habló con Luffy, lo había atado a este árbol. Podía recordar al niño pequeño llorando, gritando "¡No quiero morir!" Fue cerca de aquí donde los tres se pararon después de salvar a Luffy del secuaz pirata de Bluejam. Luffy les había dicho que hubiera preferido morir antes que decirles dónde estaba el dinero, porque estaba cansado de estar solo. Quería ser nuestro amigo. Respondió a las preguntas de Ace diciendo que quería que Ace viviera.

Sabo apretó los puños cuando su cuerpo comenzó a temblar. Se paró frente al árbol solo.

Él estaba tan arrepentido.

Cuartos Oscuros |One PieceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora