[La Venganza]

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Jordan

—¿Cómo puedes estar leyendo porno en un momento como este, Jordan? —Cuestionó entonces Alisson y, con un hábil movimiento de manos, le arrebató el libro a su compañero de las manos.

Medio segundo se demoró este último en darse cuenta que sus manos ahora no sostenían más que aire y, con el genio que lo caracterizaba, procedió a intentar recuperarlo de la pelirroja curiosa quién, a su vez, lo mantenía alejado de su alcance con una sonrisa de diversión en el rostro.

—No sabes de lo que hablas —se defendió Jordan, cuando tuvo finalmente el libro de regreso en sus manos—, y te agradecería mucho que la próxima vez no anunciaras a los cuatro vientos "el estudiante nuevo lee porno" estando en mitad del pasillo.

Tenía las cejas arrugadas, pero a su lado, la chica no se dio ni cuenta. ¿Cómo podría? La superficie plástica de la mascara se lo impedía.

—¿Crees que eso pueda arruinar tu reputación? Sería difícil, eh... —se burló ella.

Jordan guardó silencio, para variar. El libro: "Baile de plomo y lujuria" que había sacado para leer en ese momento, se trataba de una mafiosa obsesionada con las bailarinas de un burdel, hasta el punto de secuestrarlas. La historia era turbia, y la portada del libro no mucho menos sugestiva, pero definitivamente no se trataba de "porno" propiamente dicho.

—Además, como pudiste ver, el director no estaba en su despacho. Nos saltamos la primera clase para nada. Ahora debemos esperar al cambio de aula para integrarnos nuevamente a las clases —comentó el joven, introduciendo nuevamente el libro en su mochila, libre de cualquier ojo curioso de la pelirroja.

Esta última suspiró con irritación.

Y no era para menos, esa misma mañana, nada más Jordan había puesto un pie en el instituto -con desgana, todo había que decirlo-, se sorprendió a sí mismo siendo arrastrado por Alisson quien, agarrándolo firmemente del brazo para evitar cualquier escape e ignorando totalmente sus protestas, terminó por encerrarse junto a él en el armario del conserje.

Una vez a solas, pequeños flashbacks de cuando estuvieron metidos en los cubículos del baño golpearon la mente de Jordan. Solo que a diferencia de esa ocasión, ahora se encontraban apretados y mirándose fijamente.

Lamento mucho ni siquiera haberte saludado, pero ahora mismo no tenemos mucho tiempo que perder —comentó ella, mordiéndose el labio y acompañando dicho gesto con una sonrisita juguetona—. Tengo una propuesta que hacerte. Y puede que te guste mucho.

Jordan intentó procesar dichas palabras lo mejor que pudo. ¿Una propuesta? Sus pensamientos iban y venían sin parar y, si bien en un principio no supo cómo reaccionar, solo encontró la fuerza suficiente para susurrar:

Yo... No creo que debamos hacer esto aquí, Alisson, ya sabes, podemos meternos en problemas —Con lo cerca que estaban el uno del otro en ese espacio tan reducido, y de no traer la máscara puesta, Jordan sin duda hubiese sentido el aliento de la pelirroja chocando contra sus labios...

¿Acaso a esta chica le gustaba correr riesgos? Aquello resultaba... Excitante.

¿Qué? ¿De qué estás hablando...? —Cuestionó ella, y solo entonces fue consciente de la tensión sexual involuntaria que había creado en ese armario, sin darse cuenta—. ¡Ni siquiera estás prestando atención a lo que te digo! ¿Acaso piensas que mi propuesta es que nos besemos o algo así?

No...

¡Lo sabía! Eres un malpensado —La chica se alejó unos cuantos centímetros de él y le insertó un golpe bien dado en el hombro que lo hizo soltar un pequeño quejido—. No seas pendejo. Lo que te quiero proponer es una venganza. Hoy es el día, Jordan —dijo ella, agitando la cabeza con energía para ocultar levemente el rubor de sus mejillas y sacudiendo ligeramente a Jordan por los hombros, haciéndole soltar otro quejido—. Hoy es el día en que se las cobramos todas a la fastidiosa de Jessica.

El Estudiante Nuevo, ¿Usa Una Máscara?Where stories live. Discover now