࿆𝕸𝖚𝖗𝖉𝖊𝖗𝖘՞˖ ᵒᵘʳ ᵐᵘˢⁱᶜᵃˡ ♡︎ ⃝❔Draco x OC (EDITANDO)

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¿cómo explicarle a un niño pequeño la tristeza de un defecto?

porque los niños son puros e inocentes, no ven los defectos como lo que son, los ven como simples particularidades más allá de su comprensión aniñada, como algo a lo que hacer grandeza por el simple hecho de salir de la norma, como ser el primer mago del mundo.

por eso, ¿cómo podrían aquellos padres explicarle a su pequeño niño que él tenía un defecto?

porque no querían que su hijo viera aquella singularidad en su cerebro como algo que estaba bien, por sus propios prejuicios y complicaciones a la hora de aceptar que tenían un hijo fuera de lo "común".

aún siendo médicos, afrontar la condición divagante de su pequeño era algo que se les complicaba más que nada, puesto que nunca habían tenido en sus planes que alguna de las tantas enfermedades y singularidades que la mujer del hogar había estudiado por años se presentará en su pequeño retoño.

quizás estaban haciendo un escándalo, como decía su hijo mayor, quien tampoco era capaz de comprender del todo aquellas diferencias que presentaba el cerebro de su hermanito, pero no lo veía diferente a él.

quizás el niño de 7 años solía quedarse por horas en silencio, quieto, admirando la cosa más insignificante del mundo en un mar de detalles, y luego era incapaz de recordar qué había estado admirando tanto, y aún si era capaz de poner toda su atención prolongada en la cosa más mínima, luego era incapaz de prestar atención en tareas más complejas y necesarias, como lo era simplemente leer. quizás algunas veces mientras corría el destello del sol pasando por la ventana lo distraía y acababa cayendo al tropezar con algo, pero sin poder dejar de ver el sol, como si entrara en un trance.

quizás al llegar a un lugar nuevo en silencio su curiosidad lo llevaba a desaparecer para explorarlo, sin decir nada, sin emitir un solo sonido, como un pequeño fantasma. quizás solía actuar con impulsividad, sin pensar antes de hacer o decir las cosas, acabando metido él o sus cercanos siempre en problemas. quizás era irritante el hecho de que su actitud pasará de ser la de un niño tranquilo concentrado en la existencia de una naranja a ser la más grande fuente de energía que había en el mundo, necesitando constantemente un estímulo para su defectuoso cerebro. quizás era molesto para profesores o para sus propios padres el hecho de que no pudiera recordar nunca nada, que su cerebro pareciera autodestruir la información que recibía al segundo.

quizás todas esas cosas no eran características de un niño normal, pero no por ello debía ver diferente a su hermanito, ¿verdad?

quizás estaban ahogándose en un vaso de agua mientras veían al pequeño dibujando tranquilamente en una hoja de papel, absorto en sus pensamientos y trazos chuecos, con la radio de su padre puesta al lado en cualquier sintonía dónde hubiera mucho ruido, y obviamente atento a las conversaciones que llevaban sus familiares respecto a él, fingiendo que no oía nada, que no sabía nada, que él era normal, que todo estaba bien, que si se iba al rincón más silencioso de la casa iba a poder seguir igual de concentrado en su tarea.

las esperanzas en que la condición divagante del joven no afectara su desarrollo se perdieron mientras iba creciendo, viendo cómo este se mantenía reacio a tener alguna relación con alguien ajeno a su familia, no lograba hacer amigos a pesar de ser bastante extrovertido y aquellos que lograba hacer no duraban mucho, siempre cansados de que el rizado fuera tan cambiante, tan perdido, tan impredecible.

Hogwarts solo fué otra de las grandes decepciones que el menor agregaba a su lista, viendo a sus padres preocupados por él, por su futuro. ¿qué podría hacer?

encerrado tras las paredes de su hogar se aisló del mundo exterior, maldiciendo con todo su odio podrido a su propio ser, a su defectuoso y divagante cerebro, al dios que lo había hecho de esa manera, a la maldición que juraba tener, a lo que fuera que hubiera causado aquel insufrible defecto que solo hacía sus días más difíciles.