CAP 40

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Monbebeee, discúlpame por la demora, no me encontraba bien de salud y tampoco emocionalmente, ya estoy de vuelta con un nuevo capítulo, espero lo disfrutes<3 

Posdata; Para que se den una idea del aspecto que puede tener el personaje de Emilia, está inspirada un poco en IU 

Han pasado un par de meses desde aquella conversación que Kihyun y yo tuvimos, obviamente la situación no había tenido un buen resultado y él me pidió que lo dejara esclarecer sus sentimientos y procesar las cosas, aún con todo el dolor, evidentemente iba a respetar su decisión y carajo, cómo dolía, pero era lo menos que merecía por tantas mentiras. Estaba realmente arrepentida de todo. 

 — Por más que traté, no salió la mancha —dijo Hyun Woo saliendo del baño de hombres

Habíamos vuelto a ser amigos sin importar lo demás, así que decidimos ir al cine y a mitad de película se tiró la salsa de tomate encima de su chaqueta blanca

— Al menos no fue en el pantalón —respondí entre risas, este me miró con los ojos entrecerrados y negó — Además de todo, ¿quién le pone salsa de tomate a las palomitas? —me burlé 

— ¡Dijiste que sabían bien! ¿ahora te vas a burlar de mí por eso? —revolvió mi cabello 

— No me estoy burlando, Son Hyun, ¡no seas tan exagerado! 

— ¡No me estoy burlando!  —arremedó con voz chillona 

Este chocó con alguien por ir molestándome y se disculpó 

— Oh, lo siento es mi culpa... ¿Kihyun? 

— ¿Kihyun? —pregunté confundida y me di media vuelta 

Miré de inmediato a la tercera persona y casi se detiene mi corazón 

— Ah... hola Hyun Woo —respondió el pelinegro y en cuanto me miró frunció el entrecejo— ¿Qué están haciendo juntos? 

Lo miré con confusión 

— Bueno, nosotros vinimos a ver una película ¿vienes solo? —pregunté

— No, de hecho, vine con mi... 

— Perdón por tardarme tanto —se acercó una chica bastante linda y recargó su brazo sobre el de Kihyun para amarrar su agujeta 

— Yo lo hago —Kihyun se agachó para ayudarle 

Claramente esta vez sí sentí como si me hubiera caído un balde de agua helada. Sabía que él quería tiempo para pensar bien las cosas, pero... ¿tenía que salir con alguien más para eso? 

Miré a Hyun Woo bastante indignada y negué, lo tomé del brazo y lo jalé 

— Nos tenemos que ir, nos vemos 

Salí casi corriendo de ahí antes que se me salieran las lágrimas, ¿por qué carajo tenía que verlo con alguien más? ¿qué carajo significaba esto? 

— ¿Estás...bien? —preguntó mi acompañante en cuanto estuvimos lo suficientemente lejos de aquél par 

Asentí y respiré hondo 

— ¿Tú lo estás? 

Arqueó una ceja como si no supiera de lo que estaba hablando y un par de segundos después entendió y rascó su nuca 

— Sí, yo estoy bien, pero contigo es con quien tiene algo pendiente 

— Bueno, ahora no lo creo, ¿acaso no lo viste? ¡estaba con una chica y ella... maldita sea, era tan linda! 

— Pero él también nos vio juntos así que ambos están sintiendo lo mismo, no pueden simplemente ponerse a dar por hecho todo, Emilia 

— Es diferente Hyun Woo, a ti también te gusta él

— Ah, ahhh, te refieres a eso... si es verdad, es... es diferente, creo 

Me quedé en silencio unos minutos hasta que finalmente nos acercamos a la puerta de la plaza comercial 

— ¿Podemos irnos a casa? —supliqué y me miró con tristeza— Sé que iríamos a comer después de la función, pero honestamente ya no tengo apetito 

— Está bien Em, lo entiendo perfectamente. Sé lo mucho que duele ver a la persona que más te gusta con alguien más —agachó la mirada y entonces me lancé a darle un abrazo 

...... Lunes .....

La letra de la canción que estaba escuchando, no podía estar más acertada el día de hoy, aunque los demás alumnos pasaran  y me escucharan sonarme la nariz cada 3 minutos, seguía repitiendo una y otra vez la misma canción para desahogar mis penas. Era así hasta que un imbécil apareció frente a mí para quitarme los audífonos inalámbricos 

— ¡Oye, deja eso! —grité molesta 

Entonces se inclinó el pelinegro inesperadamente 

— ¿Puedo hablar contigo? 

— ¿Qué quieres Yoo? ¿cómo supiste que estaba aquí? 

Este se burló en cuanto escuchó mi voz ligeramente congestionada y se sentó a un lado de mi 

— Dalilah me dijo que estabas aquí, ayer te llamé por teléfono, pero nunca obtuve respuesta

— Es que no quería hablar contigo 

— Eso lo noté, pero ¿puedo saber por qué?

Nuevamente lo miré con los ojos empapados de lágrimas y las limpié con mi suéter 

— El corazón... aún me duele. —asentí— Esa chica con la que estabas en el cine, ¿es tu novia? —solté 

Este me miró seriamente por unos cuantos segundos 

Dear YooKde žijí příběhy. Začni objevovat