CAPÍTULO 32. Portal de noticias

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Jaden.

Todo está bien.

He intentado meterme esa maldita frase en la cabeza mientras el ron abrasaba mi garganta y el ruido de Berlín, de fondo, me acompañaba.

Si, todo ha ido bien, el examen ha salido genial, pero siento que mi vida está yendo a un ritmo acelerado y no me estoy sabiendo gestionar, por eso mismo traje a Star, porque sabía como haría las cosas y la necesitaba a ella para frenar, entenderlo todo y e intentar hacerlo bien.

Ahora la estoy alejando porque he  hecho una estupidez.

¿Que problema había con que ella estuviese aquí? No tengo nada que ocultar ¿Que maldita cosa se me ha pasado por la cabeza para prácticamente echarla si es lo que más necesito a mi lado ahora?

Dios, me siento como un auténtico imbécil.

La presión del momento, las caras de ambas, la situación... No he sabido hacerlo, y he mandado su confianza a la mierda, cuando como ya he dicho en millones de ocasiones, es la persona más importante de mi vida.

—Jad.

Doy un sorbo largo al ron, y cierro mis ojos al oír la voz de Nicole —¿Qué?

Me giro, encontrándome a mi mejor amiga en la puerta de la terraza, con una camiseta mía puesta y su pelo a un lado. En ningún momento le he dado permiso para entrar en mi habitación y coger una de mis camisetas, pero la culpa es mía por haberle dado siempre tanta confianza.

No sabe que ahora, las cosas han cambiado.

—He preparado perritos calientes con mostaza —sonríe —Son tus favoritos.

Tomo aire —No tengo hambre.

—Le he dado el punto exacto al pan, y la mostaza es de...

—Nicole —interrumpo —No tengo hambre, y si no te importa, mejor vuelve a ponerte tu ropa, es igual de cómoda que esa camiseta.

La chica suspira.

Mi mejor amiga lleva una vida de mierda, rodeada de gente de mierda, y ha intentado hacer cosas que me han dejado muchas veces, devastado, y voy a estar aquí siempre que lo necesite, pero tiene que saber cuál es su lugar.

—Si tu novia se va a enfadar por verme con una camiseta tuya, aún sabiendo la relación que tenemos, debería ir a terapia.

No me jodas.

Me muevo hasta ella, molesto, y agarro su brazo con fuerza —Demasiado permisiva ha sido mi novia siempre, Nicole.

—Ella no tiene que permitirte nada, Jaden.

—Pero si sabe lo que tiene que permitirse a ella misma, y la estoy jodiendo.

La pelinegra se encoge de hombros —No le he pedido en ningún momento que se fuera. Yo he venido a buscarte porque te necesito, y ella se ha ido porque tú la has echado.

—Yo no he echado a nadie.

—Si, la has echado, y así demuestras que no tienes nada claro aún.

Frunzo mi ceño —¿Que estupidez estás diciendo?

Se suelta de mi agarre y lleva una mano a mi nuca, acercándose lentamente a mi rostro —Todavía sigo en tu cabeza, y estoy segura que necesitabas este momento de soledad para escaparte de todo lo agobiante que debe ser estar en una "relación estable".

Todo eso lo susurra a escasos centímetros de mi rostro, y la aparto abruptamente sin creerme aún que su mente sea tan retorcida.

—¿De verdad ha vuelto a tener problemas con tu madre, Nicole? —digo —Después de todo, parece que solo has venido a meter leña entre Star y yo.

¿A donde vamos? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora