Dos

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Narra Daniel:

Daniel llegas tarde, como siempre

Dicha frase resonó unos segundos en mi mente, segundos que fueron más que suficientes para que mis recuerdos me transportaran al pasado, al momento exacto en el que sentí que había perdido la batalla.

Inicio del flashback:

Estacioné el auto de mala manera en el primer lugar que encontré, tomé el paquete fuertemente para acto seguido bajarme de él dejando la puerta abierta, sin importar lo que el inspector de seguridad me gritaba.

Mis piernas comenzaron a moverse más rápido que nunca por aquel aeropuerto, en tanto mis ojos, buscaban desesperados aquella puerta de embarque sin éxito alguno.

Corrí una vez más en la dirección contraria para buscar en la pantalla los próximos vuelos, y fue en ese preciso instante en el que sentí que mi corazón se detuvo bruscamente al igual que mis pies.

"8:00 Hs Londres - arribo 12:35 hs"

Pestañe varias veces para que mis ojos pasaran de dicha pantalla a la de mi celular, la cual indicaba las nueve horas en punto.

Mis pies retrocedieron hasta el punto el que mis piernas chocaron con el asiento de la silla, lugar en el cual dejé caer mi cuerpo decepcionado, mientras intentaba entender el porqué, siendo la respuesta la que llegaba más rápido de lo esperado.

La presencia de alguien sentarse a mi lado provocó que mis ojos pasaran del piso hacia su figura, para encontrarme con el papá de Esmeray, quien me miraba con su típica mueca de enojo en su rostro.

-Creo que llegas tarde

-¿Qué está haciendo aquí?

-Desearía preguntarte lo mismo, pero ya se la respuesta

-Y la suya ¿Cuál es?

-Sos un muchacho inteligente Daniel, no necesitas que te la de

Aparté mi vista de él, y volví a agachar nuevamente mi cabeza, en tanto sentía como todo el peso de mi cuerpo se deslizaba rendido en aquella silla, mientras mi mente pretendía traicionarme.

-No entiendo como Esmeray pudo hacerme esto

Solté enojado dándole a él la escapatoria perfecta, pero por primera vez, Ben en lugar de aprovecharse de la situación, decidió sincerarse, siendo ese el acto más gentil que había tenido para con su hija, pero al mismo tiempo el más dañino.

-Si realmente crees que mi hija te hizo algo semejante, entonces no la conoces lo suficiente

Mi vista volvió hacia él, y a juzgar por su respuesta no hizo falta que preguntara absolutamente nada, aunque él continuó como si yo lo hiciera.

-Cambié el vuelo de Esmeray porque no quería que esta despedida ocurriera, porque tampoco quería que ni ella ni tú, se ilusionaran con que esta historia imposible continuara

-Claro, entonces decidió que ella se fuera al otro lado del mundo tristemente angustiada pensando en que nunca la vine a despedir, cuando sabemos que no es así

-Ese no es mi problema, ella es fuerte, con tiempo te superará

Soltó de forma descarada mientras se levantaba de aquel asiento y comenzaba a caminar, dejándome con el enojo que comenzaba a surgir a flor de piel.

-Ah Daniel una cosa más, no pretendas contactarla porque lo sabré, y Esmeray será la única que terminará pagando las consecuencias de tus actos

Tinta negra |Daniel Ricciardo | Trilogía F1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora