Una vieja amistad, 17 años sin verse, un reencuentro inesperado.
Sus vidas habían cambiado, ya no eran aquellos chiquillos de ocho y diez años, ya no se dejaban humillar por nadie, ya habían madurado y encontrado su camino.
¿Pero qué pasa cuando s...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Hunter Hall, por supuesto que lo conozco, hacía diecisiete años no nos veíamos, pero lo conozco y esos ojos grises nunca los había podido olvidar. Hunter Hall era mi superhéroe, supo ser mi mejor amigo y la única persona que me protegió, cuidó y quiso cuando yo vivía con mis padres biológicos, es la única persona que extrañé y mucho cuando mis padres nos adoptaron. Fue por la persona que lloré varias noches, varios meses. Mis padres habían intentado localizarlo, para que nos pudiéramos ver, pero nunca pudieron, había noches que lloraba acurrucada en mi cama llamándolo.
Él era el que curaba mis heridas cuando mi padre me golpeaba, era el que me escondía en su casa cuando veía venir a mi padre cabreadísimo, el que me alimentaba cuando mis padres no se preocupaban por hacerlo, siempre me abrazaba cuando yo tenía miedo, cuando me dolía todo el cuerpo por las golpizas que me daba mi padre. Él siempre tenía un abrazo esperando por mí, siempre tenía palabras hermosas que decirme y siempre me distraía con algún juego. Sus padres también eran una mierda, pero él siempre tenía una sonrisa para mí, él decía que yo era su escape y él definitivamente era el mío, juntos nos sosteníamos cuando no había nadie más a nuestro alrededor para hacerlo, cuando las personas que realmente lo deberían hacer no hacían más que maltratarnos y despreciarnos.
-Liv – vuelve a susurrar Hunter mientras me separa de su cuerpo para examinar mi cara, pone una de sus enormes manos en mi mejilla para intentar limpiarla - ¿eres realmente tú? – pregunta sin poder creerlo.
-Sí Hunty, si – digo en voz baja.
-Jodida mierda – masculla para después apretarme contra él, se siente exactamente como hace diecisiete años, un lugar seguro, siempre me sentí protegida entre sus brazos – Sabía que volveríamos a encontrarnos – me susurra y yo asiento con mi cabeza.
-¿Prez? – dice un anonadado Izan.
-Vamos dentro – pide Hunter, mi Hunty, todos asienten y vamos dentro, Hunter me lleva abrazada por los hombros, estoy segura que no quiere soltarme, y yo, definitivamente no quiero que me suelte.
Todos nos acomodamos en el enorme living de la casa-club, en un sillón pequeño nos acomodamos Hunty y yo, frente a nosotros en un enorme sillón se encuentran Izan, Sky, Anne y James y en otro Cayden, Mason y Asher. Todos tienen sus ojos fijos en nosotros y yo solo quiero que nos dejen a solas para ponernos al día de todo lo que ha pasado en estos diecisiete años.
-Ella es Liv – susurra Hunter aun mirándome sin poder creer que yo estoy a su lado, sacude su cabeza intentando centrar sus pensamientos y carraspea, para después mirar a los chicos – Ella es Liv, Olivia Miller, la chica que te pedí que localices – y ahora mira a Asher que abre su boca con sorpresa.
-Olivia Lennox – susurro incómoda y Hunter asiente con la cabeza.
-Olivia Lennox – susurra él, saboreando mi nuevo apellido.
