(Re)encontrándonos

XLII

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            Estoy realmente enojado, parece que nada me sale como quiero, el taller ha estado a reventar de gente, por lo que no he podido adelantar mucho en la casa. Lo único que habíamos hecho fue pintar la cocina y el living, aún me quedan los dormitorios, elegiría el más grande para Liv y para mí, justo en frente hay un dormitorio que será el de nuestro pequeño, ese lo dejaré con las paredes blancas y sin muebles, dejaré que Liv lo diseñe como ella quiera.

Por suerte hoy nos pudimos escapar del taller junto a Izan, juntos comenzaríamos con el cuarto que supo ser de mi madre y su padre, aún habían cosas de ellos allí, así que debíamos sacar todo, decidir qué hacer con esas cosas, limpiar y comenzar a pintar las paredes. Cuando tengamos todo pronto, Sky y Anne se encargarían de la decoración de todo.

-¿Qué haremos con las cosas de ellos? – me pregunta Izan una vez que llegamos al dormitorio, ambos parados en el marco de la puerta mirando todo, no habíamos entrado en la habitación en años, tampoco habíamos sacado sus cosas.

-Los muebles y lo de mi madre los donaré todo, ¿Qué quieres hacer con las cosas de Patrick?

-También lo donaremos – dice apoyando una de sus manos en mi hombro derecho – Vamos a buscar las cajas – ambos giramos y vamos hacia la camioneta, para volver con cajas vacías que nos pusimos a llenar con la ropa de los dos.

Nos ponemos manos a la obra, cada uno vaciando una parte del armario, en total llenamos cinco cajas de ropa y zapatos, seguro los refugios a dónde lo llevaremos estarán felices por esta ropa, no sé por qué no lo hice antes, estaba acá haciendo bulto cuando podría haber estado abrigando a una persona.

Bufo con cansancio, ya llevamos dos horas vaciando y vaciando armarios, ¿cuántas cosas tenían mi madre y Patrick? Joder, con ellos, y con mi madre que no quiso sacar las cosas de Patrick cuando éste falleció.

-Mira esto – me dice Izan arrodillado a lado de la mesa de noche de mi madre, golpea un poco un cajón ya vacío y suena hueco.

-¿Es un escondite? – Pregunto frunciendo mi ceño, mientras veo como Izan levanta una tapa y allí hay algunos papeles – Joder con Eliza – digo mientras tomo esos papeles entre mis manos mientras me siento en la cama.

-¿Qué son? – Pregunta Izan con el ceño fruncido mientras yo solo elevo mis hombros y comienzo a leer.

Veo algunos recibos, y sigo pasando papeles, hasta que mi corazón se para, hay una ecografía. Joder, una ecografía con el nombre de mi madre de abril de 2003 donde muestra un puntito que supongo es un bebé, pues se parece bastante a la ecografía que me mostró Olivia.

-Joder – digo casi sin aire.

-¿Qué pasa? ¿Qué es eso? – Me pregunta acercándose a mí, para mirar el papel que tengo en mis manos – Jodida mierda.

Sigo pasando los papeles donde se ve cada vez más definido un bebé, claramente mi madre estuvo embarazada, cuando las ecografías se terminan llegamos a un nuevo papel, cuando leemos lo que dice ambos nos quedamos sin aire. Mi madre dio al bebé en adopción.

-Hija de puta – diga con rabia.

-¿Qué mierda es todo esto? ¿Tenemos una hermana? ¿Será de mi padre?

-No sé ni mierda, pero tenemos que buscarla, iremos al orfanato este a que nos den información.

-Tenemos que buscar donde queda, solo espero que siga existiendo – me dice Izan y yo asiento con mi cabeza, aun procesando toda la información.

Ambos nos quedamos callados viendo ese papel, tengo una hermana, una hermana que no conozco y que la hija de puta de mi madre dio en adopción. ¿Será de Patrick? ¿La habrá dado en adopción porque no era de él? Joder Eliza, ¿qué hiciste?

-Tenemos que ir a ciudad Vina, acabo de buscar el orfanato en internet y dice que queda en esa ciudad.

-Seguiremos con esto después, ahora vamos al club a aprontar nuestras cosas, nos iremos hoy. Aunque antes debo pasar por el trabajo de Liv para contarle esto y avisarle que vamos a estar fuera.

-No tiene sentido que salgamos hoy, ya es tarde, mañana a primera hora saldremos, hoy no nos van a atender – me dice y yo asiento con mi cabeza, sabiendo que tiene razón - ¿No hay nada más? – me pregunta señalándome mis manos, yo asiento con mi cabeza, pasando a la próxima hoja.

-Una jodida carta – digo al leer "querido Patrick".

-Léela – me pide y yo asiento con mi cabeza.

Querido Patrick:

Si lees esta carta es porque no pude más con mi vida, he pasado por muchas cosas y ya estoy cansada de vivir en este mundo.

Hice algo hace unos pocos años, y ahora la culpa no me deja vivir. Lo que hice fue egoísmo en el estado más puro, pero no sabía qué hacer. Tenemos una hija Patrick, seguramente sea preciosa, pero no la quise conocer. No puedo tener otro hijo Patrick, ya tuve uno y lo hice sufrir demasiado, eso me pesa en lo más profundo de mi corazón, siempre me pesa, y no puedo hacerle lo mismo a otro hijo más.

Espero que algún día conozcas a tú hija Patrick, acá te dejo todo lo que tengo para que puedas buscarla, sé que lo vas a hacer.

Te quiero con todo mi corazón, y espero que tú y los chicos puedan perdonarme alguna vez.

Siempre tuya, Eliza.

Termino de leer con los dientes apretados, ¿cómo pudo ocultarnos algo así? ¿Cómo pudo ser tan hija de puta? ¿Dice que espera que la perdonemos? En mi jodida vida la voy a perdonar, dio en adopción a mi pequeña hermana, nos separó de ella y nos ocultó esta información. ¡Joder! ¿Cómo no limpiamos esta habitación de mierda antes?

-Que hija de puta – dice Izan con sus puños apretados.

-La mataría si no se hubiera matado ella misma – digo yo - ¿Cómo pudo ocultarnos algo así? ¿Cómo jodidamente no nos dimos cuenta de su panza?

-No lo sé, ¡Joder! – grita y estrella su puño contra uno de los muebles.

-Vamos Izan – digo guardando todos los papeles para llevármelos – Necesitamos salir de esta jodida casa – digo y juntos salimos del dormitorio y de la casa.

-Necesito estar con Sky – me susurra y yo asiento con mi cabeza.

-Lo sé, ya paso a dejarte por el Club, yo iré con Liv – le digo y él asiente con su cabeza – Mañana a primera hora iremos a Vina, la encontraremos, encontraremos a nuestra hermana – le prometo.

-Hunter, ella ya no va a estar en el orfanato, debe tener 19 o 20 años.

-Pero sabrán darnos información, buscaremos en cada rincón de este puto mundo, pero te prometo que vamos a encontrarla – digo mirándolo a los ojos.

-La encontraremos – me dice asintiendo con su cabeza.

Luego de esa promesa que ambos nos hacemos prendo la camioneta y la pongo en dirección al club, para dejar a mi hermano e ir al trabajo de mi mujer, necesito de ella en este momento. 

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Holaaa, acá vengo a dejarles los dos capítulos de la semana.

Espero disfruten de los capítulos, nos leemos el lunes!!