MI PEOR ERROR - KOOKMIN SHORTFIC [ARG] [TERMINADA]

nueve.

jimin.

— me gusta cuando me cuidas... hasta está bueno que me caguen bien a piñas. —se rió, acostado en mi pecho.

yo sé que no le gusta y que da todo de sí para que las cosas mejoren, pero mientras tanto las pasa con humor.

— un placer contribuir. —suspiré, estaba medio cansado y en una hora entraba a trabajar.

— ¿te acompaño? —me preguntó, al toque negué con la cabeza.

— no, estás hecho poronga. —respondí— quedate acá, a la vuelta me pasa a dejar la belu.

una de mis compas de trabajo que vive a unas cuadras de mi y le queda de pasada.

tiene una bici y en realidad yo pedaleo hasta mi casa y ya después se va ella. pero por lo menos volvemos juntos.

— mmm bueno. te espero entonces. —se movió en la cama— mañana me voy.

— ¿qué tenés que hacer?

— buscar más ropa. —me sonrió.

y me estaba mintiendo, pero quería que me fuera sin preocupaciones.

— bueno. traete bastante.

— debo tener con furia seis mudas locas. —soltó una carcajada— pero weno.

— guarda no me vas a robar la ropa e. —le dije.

— tus remeras me quedan de top y tus pantalones de bóxer masomeno. —negó con la cabeza— si me querés ver en pocas prendas desimeeee eeeeeee.

solté una carcajada mientras le daba un golpecito en la frente.

— nos vemos después, feo. —le dí un besito antes d salir.

arranqué para el bar cervecero más concurrido de la zona y me puse el súper delantal negro para poder atender así más classy.

sin embargo, lo que menos me esperé fue ver a minho esperando por una cerveza. intenté que no me doliera y parece que funcionó, porque a pesar de dolerme lo que él me hizo, ya no le dí tanta importancia.

tengo un turro todo cagado a palos en mi casa que me gusta más.

— podemos hablar? —fue lo primero que dijo.

— sí, qué pasó?

— en privado... —dijo haciéndose el tímido.

jajsjajsj qué hijo de puta.

le pedí diez minutitos a mi jefe y él me dijo sí máster andá, gracias josé por ser buen empleador.

— ahora sí, qué pasó?

podría haberlo evadido pero creo que ya lo hice bastante tiempo, ahora podemos hablar y de paso yo sanar mejor.

— te extraño. —yo solté una pequeña carcajada— en serio.

— ¿no te funcionó con la otra persona? —levanté una ceja— dale, no seas boludo, ya sos grande, decime qué querés...

— quiero volver a hablar con vos, si no me funcionó con la otra persona fue porque seguía pensando... en vos... y...

— y ahora me extrañás y querés que yo vuelva a ser tu todo y todas esas boludeces. —rodé los ojos— no, minho, el mundo no funciona así. vos y yo tuvimos nuestro tiempo y VOS decidiste que yo no era suficiente. —sonreí— te perdono, pero no me pidas que te dé otra oportunidad cuando lo único que puedo darte es una trompada por haberte cagado de tal manera en mi. —me encogí de hombros— nos vemos, que andes bien.

volví a mi puesto de trabajo, hablando con clientes habituales y esquivando cualquier intención doble de otros. acaso pensarán que si salen conmigo, hay cerveza gratis? no gente, si no me pagan los clientes no tengo sueldo.

a la hora de la salida, me puse mi campera y cuando crucé la puerta, el bagre esperaba por mi.

— en serio quiero volver con vos-

— que no, boludo pelotudo... —bufé— yo no soy ningún reemplazo y no voy a volver con vos.

— pero-

— no va a volver con vos. —una tercera voz interrumpió, yo sonreí al saber que era mi turrito cagado a palos.

— y vos quién sos?

— alguien que sí sabe lo que quiere. —contestó— el novio, por?

— otro día hablamos. —fue todo lo que respondió antes de irse.

— qué pesado el forro. —suspiré— y vos? no te dije que me esperaras en casa?

— me dio como ñáñaras en el occipuccio, así que te salí a buscar. —me sonrió— vamos?

— dale, vamos. —lo agarré del brazo para empezar a caminar.

— si no hubiese dado la moto como parte de pago todo sería más lindo.

— na, caminar así también está bueno.

— no tan bueno como vos eeeee si no te sirvo besame. si te sirvo igual besame.

y yo le dí un beso, riéndome.

sabiendo que todo iba a salir como el orto, pero sin poder hacer nada para evitarlo.