Illecebra ✠ lumity

꙳ ﹡ ⛧ Épiologiste

Las estaciones pasaban tan rápido como los días, el invierno quedo como un recuerdo lejano, la primavera llego siendo luz y claridad, el otoño fie testigo de muchos deseos cumplidos y ahora el verano se hacía participe de una fresca mañana acompañada de un sol caliente y el sonido de las olas del mar acabando en la orilla de la playa.

Amity despertó esa mañana entre los brazos fuertes y musculosos de su novia. Su pequeña mano esta sobre su pecho desnudo, y su rostro hundido en su cuello, relajándose con su dulce aroma

Basto solo un beso en la mejilla por parte de Amity para que la castaña despertara también, se removieron en las sábanas blancas abrazando sus cuerpos, Amity soltó una leve risa acariciando la nuca de Luz.

—Buenos días. —dice la menor mirándole.

—Hm... buenos días, querubín. —besa su cuello— Oh, te ves muy apetecible.

Amity rueda sus ojos.

—Todas las mañanas dices lo mismo.

—Porque todas las mañanas quiero devorarte de pies a cabeza. —susurra sobre su oreja.

—No seas caníbal, Luz. —se queja mientras se aleja para mirarla— Es un lindo día, quiero dar un paseo.

—Lo haremos cuando comamos algo, tengo hambre.

—Te dije que esa hamburguesa no nos iba a llenar. —le recuerda, colocándose de pie.

Luz sonríe mostrando sus colmillos y mirando su cuerpo blanquecino, totalmente desnudo y marcado. Lame sus labios y sin poder contenerse más, jalo el brazo de Amity para tirarla de vuelta en la cama, la pelimorada la miro fijamente, Luz acaricia sus brazos y junta sus labios en un profundo beso, sintiendo su lengua meterse en el medio. Amity gimió sobre su boca abrazando sus hombros. Luz abrió las piernas de la pelimorada para meterse dentro de estas y así hundirse en lo más profundo de Amity.

Su entrada seguía dilatada y mojada ante la recién acción, fue más fácil simplemente moverse para follar a su pequeña querubín. Deslizándose con un vaivén en su interior, chocando disimuladamente sus cuerpos y mordiendo sus labios como tanto le gustaba.

Amity gemía sobre sus labios, disfrutando aquel roce que solo Luz podía darle todos los días al desertar, y era algo de lo cual jamás se cansaría. Nunca se cansaría de Luz.

La pelimorada clavo sus uñas en su espalda, dejando salir su esencia, Luz gruño sobre sus labios para después correrse dentro de Amity, envueltas en espasmos recientes del orgasmo.

—¿Nunca me dejaras libre de esto, cierto? —susurro Amity.

—No, nunca. —dice con burla la castaña.

Poco después salió de su cuerpo y cayo justo a su lado.

—Ahora si quiero comer comida. —dice la mayor riendo.

Amity negó con su cabeza.

—Yo igual.

Decidieron colocarse de pie y tomar una ducha juntas, se vistieron con una ropa cómoda y salieron a la cocina para comer algo. El clima estaba muy fresco, Amity agradecía que Luz compro esta casa en la playa para pasar las vacaciones de verano.

Mientras bebía su jugo, tomo su teléfono revisando los recientes mensajes, entre ellos uno de Willow. Desde que descubrió que Willow era un ángel guardián, su relación con ella se volvió más estrecha, aunque todavía ella y Luz seguirían llevándose mal.

La castaña miro hacia el frente, donde vio la bonita playa, Amity bebió de su jugo para acercarse a la castaña y sentarse en sus piernas.

—¿Por qué tienes esa cara?

—Es la mía, a menos que quieras que te muestre la real.

Amity negó rápidamente.

—No, gracias. Me gustas así.

Luz soltó una carcajada.

—Lo sé. —besa su mejilla—¿Quieres pasear un poco?

—Sí, me encantaría.

Dejan sus vasos vacíos en la cocina y toman sus manos para salir de la casa y caminar en la arena de la playa. Amity miro a los niños lejanos jugar con el agua, una sonrisa se le planto en su rostro, pues se le hacía muy tierna la vista.

—Me gusta este lugar. —comenta la castaña.

—¿Por qué?

—Es relajante. —responde, y voltea mirando a Amity— Y estar contigo lo hace aún mejor.

Amity se sonroja.

—A mi también me gusta estar aquí, siento que somos libres.

Luz se detiene para mirarla una vez más.

—Y ahora lo somos, querubín. —se acerca a su rostro— Lo somos, juntas.

Amity rodea su cuello.

—¿No extrañas tu vida de antes?

Luz abulta sus labios.

—No, porque la que tengo ahora es mejor.

Amity esbozo una dulce sonrisa, acaricio la mejilla de su novia y beso sus labios con amor. Siendo recibida de la misma forma por aquella castaña.

Siendo libres y felices, como siempre desearon, como siempre soñaron.

YA LO TERMINE HDP VIVA YO

ahora sigue blue and grey.

Gracias por leer esta cagada, se m ocurren mil ideas con la temática de ángeles ciertamente, este fue mi segundo fic de eso, planeo subir mas con esos, espero que los lean al igual que esto.

Los tqm, nos vemos en otro fic.